Las muertes violentas de mujeres en comparación con el mismo periodo de 2022 reporta un incremento del 59%. Al cierre de junio 94 mujeres perdieron la vida de manera violenta
Ilustración de protada: Guillermo Burgos
Tegucigalpa, Honduras. – Las mujeres en Honduras viven las violencias de diferentes maneras, tanto en lo público como en lo privado, y a pesar de la lucha de las diferentes organizaciones de mujeres, el flagelo que está cegando la vida a madres, hijas, tías y abuelas, requiere de voluntad política para generar políticas de prevención.
Lara Bohórquez, coordinadora del Observatorio del Centro de Derechos de la Mujer (CDM), informó que, al cierre de junio, 94 mujeres perdieron la vida de manera violenta.
Esta cifra incluye las 46 mujeres privadas de libertad asesinadas de manera dantesca el pasado 20 de junio al interior de la Penitenciaria Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), un hecho catalogado como feminicidio de lesa humanidad por la inacción de Estado de Honduras ante las constantes recomendaciones de organismos internacionales y dejó en evidencia la crisis del sistema penitenciario nacional.
“Nos mostramos preocupadas por el alza de la violencia femicida, junio es considerado el mes más violento para las mujeres en Honduras”, lamentó Lara Bohórquez.
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CIFRAS ALARMANTES
Criterio.hn, analizó el registro de muertes violentas en el último año, las cifras muestran un incremento gradual desde junio de 2022, ese mes se registraron 19 mujeres asesinadas. Para enero de 2023, las alarmas se encendieron con 38 muertes violentas al cierre de mes.
La situación es grave, en un año 408 mujeres han sido asesinadas en el país centroamericano que reporta la tasa mas alta de femicidios en América Latina con 4.7 femicidios por cada 100 mil mujeres.
El “Análisis sobre la situación de la violencia y seguridad ciudadana en Honduras durante el año 2022” de la Secretaría de Seguridad, indicaron que las muertes violentas de mujeres registraron una leve reducción en la incidencia de los femicidios, no así en los casos investigados.
El Portal de Datos Abiertos en Seguridad Ciudadana de la Secretaría de Seguridad señaló que el 43.8% de los femicidios ocurridos en el 2022, es decir 130 muertes violentas de mujeres están en proceso de investigación; lo que lleva a cuestionar si realmente las autoridades policiales y judiciales están realizando su trabajo.
Las muertes violentas de mujeres en comparación con el mismo periodo de 2022, de acuerdo con Lara Bohórquez reportan un incremento del del 59%. Es decir, del 1 de enero al 30 de junio de2022, se contabilizaron 151 muertes violentas de mujeres, en este mismo periodo de tiempo, el 2023 registra 240 femicidios y muertes violentas.
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RECONOCER LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER
Las Naciones Unidas definen la violencia contra la mujer como «todo acto de violencia de género que resulte, o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada».
Para María Santos Paz, de la Red Contra la Violencia Hacia las Mujeres en Intibucá, para contrarrestar la violencia en contra de la mujer, es importante que las mujeres se empoderen sin importar su posición económica, su grado académico o su lugar de origen. “La misma violencia que vivo yo la puede estar viviendo la jueza del juzgado de letras, porque quizá vive con un hombre machista con la misma trayectoria de un hombre que vive con una mujer campesina”.
En ese sentido, la líder comunitaria hace hincapié que hay que reconocer la violencia como tal para no normalizarla. “Una cosa es conocer la violencia y otra es reconocerla, debemos rechazar los tipos de violencias que vivimos las mujeres ya seamos profesionales, analfabetas, campesinas o maestras, es decir todas las mujeres de la sociedad”.
Migdonia Ayestas, coordinadora del Observatorio Nacional de la Violencia (ONV) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), es de la opinión que en Honduras se deben implementar políticas integrales en materia de seguridad.
Además, la especialista en temas de seguridad, en entrevista con Criterio.hn destacó que para contrarrestar las múltiples violencias hacia las mujeres y las niñas “la sociedad hondureña debe entender que la violencia de género no es natural”.
Para Ayestas, esta normalización parte de la enseñanza en la familia y de las marcadas diferencias de los roles que debe cumplir la niña y el niño. “No les estamos enseñando que son iguales, sino que siempre les enseñamos que el papá manda y que el hermano mayor manda y que las mujeres debemos obedecer”.
En ese sentido, Migdonia Ayestas, recalcó “estamos educando para la sumisión y la dominación”, además sugirió que la enseñanza hacia los niños y las niñas debe enfocarse en la igualdad y el respeto a sus derechos.
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Amante de la lectura y la naturaleza, una mujer con la convicción firme que todos podemos hacer cambios significativos en la sociedad, por eso mi objetivo es exponer las injusticias que adolece la ciudadanía. Busco incidir, a través del periodismo, en la defensa y promoción de los derechos humanos, evitando caer en la complicidad de callar ante las injusticias y la corrupción. Ver todas las entradas