Tegucigalpa, Honduras. – A más de 15 años del homicidio de Isy Obed Murillo, el primer mártir del golpe de Estado de 2009, las autoridades hondureñas han reabierto el caso, presentando una acusación formal y capturando al exjefe del Estado Mayor Conjunto, Romeo Vásquez Velásquez y a dos ex altos oficiales, a quienes el Ministerio Público señala como los supuestos responsables del deceso del joven.
Durante la mañana de este lunes 6 de enero, un día después de las acciones realizadas por la Fiscalía, El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH) en compañía de la Familia Murillo Mencía, realizaron una conferencia de prensa en la que, entre distintos puntos, denunciaron la persecución de la que han sido objeto, el manto de impunidad que durante años ha envuelto el caso y su postura ante el reciente accionar de las autoridades hondureñas.
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COFADEH DENUNCIA FAVORITISMO DURANTE AUDIENCIA
En el transcurso de la conferencia, Bertha Oliva, Coordinadora del Comité de Familiares Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), explicó a los medios de comunicación que durante la audiencia de declaración de imputados, la defensa de los acusados se centró en argumentar que se trataba de persecución política intentando desvirtuar los señalamientos realizados por el Ministerio Público.
Otro de los puntos remarcados por Oliva, fue la petición realizada por los asesores legales de los acusados, quienes solicitaron a la jueza Karla Vázquez, la no participación de la asesora legal del COFADEH, que actúa como representante y defensa privada de los padres de la víctima, sin embargo, la jueza aceptó la solicitud, ordenando que tuvieran presencia, más no participación.
La defensora explicó que al inicio de la audiencia la representante legal de COFADEH solicitó que los acusados quedarán en arresto provisional, siendo esta acción la que a criterio de Oliva, provocó la no participación de la abogada durante el proceso.
Además, denunció el comportamiento de la jueza, quien durante la audiencia intentó favorecer a los imputados programando la audiencia inicial el martes 7 de enero “para que estuvieran menos tiempo detenidos”.
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FAMILIARES DE ISY OBED EXIGEN JUSTICIA
Silvia Mencía, madre de Isy Obed Murillo, declaró que pese a que han pasado 15 años y seis meses desde el homicidio de su hijo, y de haber atravesado un proceso inundado por la impunidad y la falta de respuestas por parte de las autoridades hondureñas continúan a la espera de que se haga justicia.
Mencía calificó como una barbarie el extravió del expediente de su hijo, y asegura que está la fecha se continúa preguntando el porqué específicamente ese se perdió, sin embargo, afirma que con la propuesta de la exhumación vieron una posibilidad de esclarecer el crimen, debido a que por mucho tiempo estuvieron a la espera de que se hiciera justicia, misma que no era alcanzada por la falta del expediente.
Mencía señaló que la respuesta de las autoridades hondureñas durante los últimos años fue negativa y remarca que nunca estuvieron dispuestos a investigar porque no indagaron en donde estaba el expediente, en quién lo sacó o quién es el culpable.
Silvia Mencía asegura que las acciones realizadas ayer por el Ministerio Público marcan un nuevo comienzo ante la falta de justicia de los últimos años.
Por su parte, David Murillo, padre del joven, manifestó durante la conferencia de prensa que la exhumación del cadáver arrojó que efectivamente el arma homicida se trataba de un fusil del ejército y que el fiscal posee todas las pruebas al respecto.
Murillo pidió a los responsables que aceptaran su responsabilidad intelectual en el crimen y que dejaran a un lado la estrategía de la persecución política, pues remarca que en ese momento no existía el Partido Libre, pero sí los muertos a manos de las Fuerzas Armadas.
El padre recalcó «Yo no guardo rencor contra Romeo Vásquez Velásquez, no tengo odio ni busco venganza, solo pido que se haga justicia».
ACUSACIÓN DEL MINISTERIO PÚBLICO
El pasado domingo 5 de enero, el Ministerio Público presentó un requerimiento fiscal contra los generales en condición de retiro, Romeo Orlando Vásquez Velázquez, Venancio Cervantes Suazo y el excomandante de las Fuerzas Especiales, Carlos Roberto Puerto Fúnez, por suponerlos responsables de los delitos de homicidio en perjuicio de Isy Obed Murillo Mencías y lesiones graves contra Alex Roberto Zavala Licona.
Según lo expuesto por la fiscalía, los altos mandos del Estado Mayor Conjunto, son señalados como responsables directos de comandar y planificar el operativo, que terminó en graves violaciones de derechos humanos al permitir que las fuerzas militares actuaran con violencia inhumana y desmedida contra los manifestantes.
Los ahora acusados se encuentran detenidos en la Penitenciaría Nacional de Támara a la espera de la audiencia inicial que fue programada para el viernes 10 de enero a las 10 de la mañana.
