Un reciente informe del Observatorio Nacional de la Violencia revela que entre 2013 y 2022, la violencia ha dejado una profunda huella en los jóvenes hondureños, con un alarmante 72% de las víctimas universitarias en el rango de 20 a 29 años, evidenciando la urgente necesidad de estrategias para proteger a este vulnerable sector de la población
Portada: Dramatización realizada por alumnos universitarios sobre la muerte de sus compañeros. Foto: Horacio Lorca/Criterio.hn
Tegucigalpa, Honduras. – La violencia homicida ha dejado una profunda huella en la vida de los hondureños, convirtiéndose en un fenómeno devastador que impacta a familias y comunidades enteras afectando desproporcionadamente a la población joven.
El Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (IUDPAS) de la Facultad de Ciencias Sociales presentó datos sobre la violencia homicida que ha afectado a estudiantes universitarios.
Migdonia Ayestas, coordinadora del Observatorio Nacional de la Violencia (ONV), presentó el Boletín Especial de Muertes Violentas de Estudiantes de la UNAH (2013-2022), un informe alarmante que documenta la violencia homicida en el ámbito estudiantil.
Ayestas, detalló que, en el periodo analizado, al menos 107 estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) fueron víctimas de homicidio entre enero de 2013 y diciembre de 2022.
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DATOS DE MUERTES VIOLENTAS EN CONTRA DE UNIVERSITARIOS
El informe revela la situación de la violencia entre los estudiantes universitarios en Honduras, destacando que las edades de las víctimas mortales oscilan entre los 18 y 38 años.
De acuerdo con los datos, el 72.0% de las víctimas, es decir, 77 jóvenes, se encuentran en el rango de edad de 20 a 29 años, lo que pone de manifiesto la vulnerabilidad de este grupo etario.
El análisis también señala que los hombres son desproporcionadamente afectados, representando el 77.6% (83 víctimas) del total, mientras que las mujeres constituyen el 22.4% (24 víctimas).
Esta disparidad resalta una tendencia preocupante en la que los hombres jóvenes, especialmente a partir de los 21 años, y las mujeres desde los 18 años, se encuentran expuestos a situaciones de riesgo y vulnerabilidad.
Estos datos evidencian la necesidad urgente de implementar estrategias efectivas para proteger a los estudiantes universitarios matriculados en los diferentes campus de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
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CASOS EN IMPUNIDAD
La violencia homicida en Honduras ha dejado una huella imborrable, afectando a más de 100,000 personas a lo largo de los años, remarcó Carmen Julia Fajardo, decana de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNAH.
A pesar de que la tasa de homicidios ha mostrado una disminución significativa, pasando de 86.5 por cada 100,000 habitantes en 2011 a cerca de 30 en los últimos años, el fenómeno sigue desangrando al país, especialmente entre la juventud.
Fajardo enfatiza la necesidad imperiosa de abordar esta problemática desde una perspectiva crítica y propositiva, reconociendo que la violencia ha dejado profundas cicatrices en la sociedad hondureña.
La decana, enfatizó que la mayoría de los homicidios registrados en contra de los estudiantes universitarios permanecen en un estado de impunidad absoluta, lo que sumerge a las familias de las víctimas en una vulnerabilidad constante y un acceso limitado a la justicia.
