Por: Redacción CRITERIO.HN
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Tegucigalpa, Honduras.- La atención está centrada en la discusión de la nueva Ley Electoral en el Congreso Nacional, misma que continuará esta semana. A criterio de analistas la nueva normativa es importante pero no da garantías de transparencia de cara a los próximos comicios.
La principal conclusión a la que han llegado analistas es que el país perdió tiempo en el 2018, 2019 y parte del 2020, pues no hubo decisiones y voluntad política para aprobar reformas que transformen la realidad electoral y que siente las bases para que no se repitan los escenarios del 2017.
El exmagistrado suplente del extinto Tribunal Supremo Electoral (TSE), Marco Ramiro Lobo, manifestó que las expectativas que había de cara a la discusión política de este 2020, se han diluido y que el panorama no pinta nada bien hacia el futuro inmediato.
“Honduras necesita hacer un giro de 90 grados en la forma en la que se han desarrollado los procesos electorales, necesitamos regular el tema del financiamiento de campañas, tenemos una Ley y una Unidad de Financiamiento y Transparencia que es decorativa porque su estructura, su Ley Orgánica no le permite sancionar, no estamos llegando al fondo del asunto”, valoró Lobo.
Para Lobo se está dejando por fuera temas profundos que son la garantía de cambio en las reglas del juego democrático del país: “por otra parte no tenemos segunda vuelta electoral, revisar los requisitos de candidatos, y creo que las reformas que está aprobando el Congreso, son superficiales que produce situaciones irregulares en los procesos electorales”.
El exmagistrado advirtió que si no se toman decisiones antes del cierre de la actual legislatura en el Poder Legislativo, Honduras está a las puertas de un proceso electoral parecido al del 2017.
“En realidad hay muy pocos cambios, no hay reformas sustanciales ni trascendentes, lo más importante quizá es regular lo de las credenciales en las mesas, lo demás diría que es lo mismo con pequeños brochazos que solo están cubriendo lo desfasado que está nuestro sistema electoral”, concluyó Marco Ramiro Lobo.
Por su parte el dirigente liberal Eduardo Martell, consideró que la discusión de reformas electorales se está dando fuera del tiempo ideal, es decir que las fuerzas políticas debieron abordar esto desde antes del 2020.
“Creemos que todo está fuera de tiempo, no es posible que ya estamos convocados a primarias, y que todavía estemos discutiendo reformas electorales, más cuando se tuvo todo el 2018 y 2019, creemos que es una estrategia del oficialismo para dilatar y no aprobar nada profundo”, interpreto Martell.
Eduardo Martell coincide con Ramiro Lobo en torno a la falta de discusión de reformas profundas: ”no se están discutiendo temas importantes como la segunda vuelta, financiamiento de campañas, reelección presidencial que creemos nosotros que debería ponerse punto y final al asunto”, recalcó el abogado.
El dirigente liberal reconoce que hay pequeños avances como el de la paridad de género, pero que solo serán aplicables hasta que se publique la Ley aprobada y tal y como se están desarrollando las cosas en el Poder Legislativo, hay dudas que incluso la misma se publique antes de la inscripción de corrientes internas en la segunda semana de noviembre.
“Se avanzó en pocos temas pero no son suficientes, además todo lo que se ha alcanzado como el asunto de la paridad solo entrará en vigencia hasta que se termine de aprobar la nueva Ley y sea publicada en La Gaceta, sospechamos que el partido de gobierno tiene una estrategia para dilatar e incluso evitar que se apruebe la nueva Ley Electoral, lamentamos que se estén cometiendo los mismos procedimientos que desembocaron en un fraude en 2017”, advirtió Eduardo Martell.
