Evidencia de un desastre

Evidencia de un desastre

Por: Efraín Bú Figueroa

Una vez más la Secretaría de Salud (SESAL) puso en evidencia su manifiesta debilidad organizativa, infraestructural, carencia de liderazgo e incapacidad de gestión, con el manejo de un supuesto “caso sospechoso” de infección respiratoria por el coronavirus, que venía desde países del Asia vía Los Ángeles hacia Honduras.

Bajo la presunción que la señora hubiese sido caso sospechoso   -que no le era pues ya había pasado los filtros de salud correspondientes en varios países, venia asintomática y no reunía los criterios de la OMS-  lo que procedía en el hipotético caso  que lo hubiera sido,  era trasladarla a la unidad clínica, previamente seleccionada, equipada con medidas universales de control de infección y al grupo expuesto, en este caso todos los pasajeros del avión junto con su tripulación, colocarlos de inmediato en aislamiento por 14 días. Con solo esta falla garrafal queda claro que el personal de la SESAL, no está preparado y no ha entendido los protocolos preventivos de la infección por coronavirus de la OMS/OPS.

Advertido el personal de salud del aeropuerto, de la situación de la señora que de manera civilizada y educada ella misma puso en conocimiento, se sometió a la evaluación médica en dicho sitio. Imprudentemente personal de la SESAL puso en autos a la prensa, según declaró en la televisión, pocas horas después un conocido periodista, desencadenándose desde ese momento, un pésimo manejo de la situación, rompiendo los protocolos convencionales OMS/OPS para enfermedades transmisibles respiratorias, ampliamente conocidos en los sistemas de salud de todo el mundo. Se procedió a trasladar a la paciente en ambulancia, sin asegurarle a ella su derecho a la privacidad y poniendo en peligro su indemnidad personal, facilitando con ello, la misma autoridad de salud, transgresiones al código de ética profesional.

No se le proporcionó a la paciente la seguridad merecida, no obstante que desde el aeropuerto ya comenzaba la trifulca periodística. La ambulancia fue perseguida por vehículos de conocidos medios de prensa, cuando se dirigía al Instituto Nacional Cardiopulmonar (INCP),  designado para evaluar pacientes con sospecha de coronavirus, no obstante que la paciente venia asintomática y ya había pasado controles de salud en otros países, lo que no fue suficiente para los evaluadores iniciales de la SESAL en el aeropuerto Toncontín.

La llegada de la paciente al INCP fue degradante, vergonzosa, estigmatizante y violenta, pues se expresaron públicamente epítetos para deshacerse físicamente de la paciente y una grulla de reporteros y fotógrafos que entraron hasta lo más profundo de la institución como “Pedro por su casa”, provocándole a la paciente una crisis emocional. Como era lo esperado el examen físico del médico especialista y los análisis laboratoriales y radiológicos complementarios fueron totalmente normales.

Es de hacer notar que Honduras en ese momento todavía no tenía la prueba molecular (reacción en Cadena de la Polimeraza o PCR por sus siglas en Inglés) para comprobar si una persona está o no infectada, lo que significaría como se ha hecho en otras ocasiones, enviar muestras a laboratorios de referencia designados por la Organización Panamericana de la salud (OPS).

En horas más tempranas, cuando aún la paciente estaba en el aeropuerto,  un alto funcionario de la SESAL se atrevió, sin comprobarlo,  a afirmar públicamente en medios de prensa que la señora traía síntomas que hasta los llego a  describir  y falsamente afirmó que tenían toda la preparación laboratorial para diagnosticar  la infección por coronavirus, citando públicamente el nombre de una prueba que se utiliza para otros propósitos médicos y no para diagnosticar esta infección, pues hasta ese momento se carecía de la prueba laboratorial específica en Honduras.

Al final y después del intenso circo mediático, que aún le está dando la vuelta al mundo por redes sociales, se le ocurrió la “gran idea” a la máxima autoridad de salud dejar interna a una paciente asintomática, en crisis emocional por la humillación sufrida y que no reunía los requisitos OMS/OPS de caso sospechoso.

Un caso fue suficiente para evidenciar la incapacidad   – ya conocida – de la secretaria de salud. ¿Imagínese el lector si fueren decenas de casos? Que Dios nos encuentre confesados si ese germen llega a ingresar a nuestro país.

  • Jorge Burgos
    Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. Ver todas las entradas

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18 comentarios

  1. @googledrive It’s possible to set a .description property for Google Drive files by uploading a file with IPTC:Caption-Abstract meta field.

    But how to set a .description from metadata for files
    that don’t support IPTC. MP4 for instance. googledrive https://mynewbusiness.org/