Por: Redacción CRITERIO
La gente llamaba a Nikola Testa un futurista, pero tal vez “psíquico” habría sido más cierto. El inventor murió en 1943, estaría cumpliendo 153 el viernes, pero lo que es extraño es que, si se hace una investigación de lo que escribía, se podrá ver una clara descripción de la vida moderna.
Se puede leer todo en una entrevista con la revista Collier reproducida por los libros del “twenty-one century”
Esto es lo que dijo:
Cuando las conexiones inalámbrica se conecten adecuadamente, todo el mundo se convertirá en un gran cerebro, lo que hará que todas las cosas sean partículas de un todo completo y rítmico.
Podremos comunicarnos los unos con los otros instantáneamente, sin importar la distancia
No sólo esto, pero a través de la televisión y la telefonía nos podremos ver y oír los unos a los otros como si estuviéramos cara a cara, sin importar que estemos a distancias de miles de km.
Cuando las conexiones y transmisiones inalámbricas se conviertan en una generalidad, estos métodos se volverán tan crudos como comparar el tren de vapor con el tren eléctrico.
