El martes, Libre, el Partido Liberal y otras fuerzas minoritarias eligieron, con 73 votos, a la Junta Directiva del Congreso Nacional que ejercerá entre 2024 y 2026
Tegucigalpa, Honduras.- La elección de la Junta Directiva del Congreso Nacional, que tuvo lugar el 16 de enero en una sesión extraordinaria, podría marcar el comienzo del retorno a la gobernabilidad en el Legislativo.
Después de meses de desacuerdos entre el oficialismo y las fuerzas opositoras, finalmente, las bancadas de Libertad y Refundación (Libre), la mayoría del Partido Liberal, una facción del Partido Salvador de Honduras (PSH), la Democracia Cristiana y del Partido Anticorrupción se distribuyeron los cargos de la Junta Directiva.
La Junta Directiva quedó conformada por 11 diputados oficialistas, 5 del Partido Liberal, 3 del PSH, 1 de la DC, 1 del PAC y 1 independiente.
Según analistas consultados por Criterio.hn, el respaldo de 16 de 22 diputados del Partido Liberal a Libre podría significar el retorno a la gobernabilidad democrática en la tercera legislatura del período 2022-2026, que se inaugurará el 25 de enero.
El analista político Lester Ramírez mencionó que Libre encontró el camino para desarrollar su agenda, principalmente con el respaldo del Partido Liberal.
«Habrá una mayor agenda de Libre, más oportunidades para que Libre apruebe proyectos con mayoría simple. Ya lo vimos con el presupuesto general, pero pueden haber otras leyes», expresó Ramírez.
Después de elegir la Junta Directiva para el período 2024-2026, se aprobó el Presupuesto General de Ingresos y Egresos correspondiente al ejercicio fiscal, ascendiendo a L406,580,869,364.00.
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Lester Ramírez destacó el respaldo del Partido Liberal a Libre como una oportunidad para obtener beneficios, como subvenciones para proyectos o presupuesto para las alcaldías.
«En este punto es importante recordar que detrás de los diputados liberales hay alcaldes. Recordemos que son los alcaldes quienes les ayudan con las campañas a los diputados, ya en los territorios», agregó Ramírez.
ERA NECESARIO
El analista político y exdiputado de la Democracia Cristiana, Efraín Díaz Arrivillaga, señaló en conversación con Criterio.hnque era necesario lograr consensos para restablecer la agenda legislativa.
«Es un buen paso el que se ha dado; era necesario lograr esos consensos mínimos que pudieran restablecer el funcionamiento del Congreso Nacional. Se espera una gobernabilidad mínima que abra el funcionamiento del legislativo y permita avanzar en la agenda legislativa», expresó Díaz Arrivillaga.
Díaz Arrivillaga recordó que el Partido Nacional, incluso antes de someter a votación la elección del fiscal general y fiscal general adjunto, ya había mostrado una actitud poco democrática y una posición obstruccionista.
«Se había visto una posición obstruccionista del Partido Nacional, haciendo disfuncional el Congreso para de alguna forma ahogar al Ejecutivo», añadió.
Tras no encontrar consensos para elegir al fiscal general y fiscal general adjunto, el 1 de noviembre la Comisión Permanente seleccionó interinamente a Johel Zelaya y Mario Morazán para esos cargos, generando rechazo en la oposición.
Aún está pendiente que el Congreso Nacional elija en propiedad, con un mínimo de 86 votos, a las personas que se encargarán del Ministerio Público, para lo cual se requieren los votos del Partido Nacional.
¿LEGITIMA A LA JUNTA DIRECTIVA?
Con la elección de la Junta Directiva también se puso fin a un episodio de dilema sobre la legalidad entre 2022 y 2024, presidido por Luis Redondo.
Bajo una controversial reforma al artículo 49 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo, dicha Junta Directiva se eligió con diputados propietarios y suplentes de distintas bancadas, en contraposición con la liderada por Jorge Cálix.
Aunque el conflicto se resolvió el 8 de febrero de 2022 en una reunión entre el coordinador general de Libre, Manuel Zelaya Rosales, y el congresista de ese partido, Jorge Cálix, la oposición, especialmente el Partido Nacional, continuó calificando a la Junta Directiva como «ilegal» durante dos años.
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El argumento de la oposición se basó en que no fue elegida con los 65 votos de diputados propietarios, a pesar de que la reforma al artículo 49 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo facultaba a los suplentes para participar en dicha elección.
Según Efraín Díaz Arrivillaga, el debate sobre la Junta Directiva «fue más político que de legalidad entre Libre y el Partido Nacional, y algún sector del Partido Liberal».
Sin embargo, el analista político y exdiputado del Partido Nacional, Raúl Pineda Alvarado, expresó a Criterio.hnque será difícil que la Junta Directiva obtenga legitimidad, por la forma en que se instaló.
«La legitimidad tiene que ver con otros factores de mayor relevancia. Este es un Congreso que se fundamentó en la ilegalidad, con una junta directiva que llegó a ostentar cargos por medio de la fuerza. La directiva no está legitimada y nunca lo estará, pero ahora tiene un desempeño administrativo aceptable que provocará anuencia y tolerancia en la sociedad», señaló.
La Junta Directiva que encabeza Luis Redondo durará en sus funciones hasta el 23 de enero de 2026, fecha en que se elegirá provisionalmente la Junta Directiva del pleno legislativo que resulte electo durante las elecciones generales de 2025.
Un comentario
El gobierno del Partido Libre va desmontando poco a poco toda la estructura que el Partido Cachureco construyó a lo largo de 12 años de gobiernos fraudulentos, a medida que se acerca el juicio de Juan Robando se ira desmontando mas, y el Partido Liberal comprenda que su alianza con los cachurecos ya no vale nada. El partido cachureco podria perder hasta su personeria juridica.