Ilustración de portada: Guillermo Burgos/Criterio.hn
Tegucigalpa. – Las violaciones a los derechos humanos en Honduras son una constante que se evidencia aún más en los grupos vulnerables como las personas de la población LGBTI+.
En ese sentido, la Unidad de Vigilancia KAI, observatorio de violencia integrado por la Asociación Kukulcán, IXCHEL y Generación Awilix, presentó el informe Situación de Derechos Humanos y Discriminación Hacia la Población LGBTI+, en Honduras en el periodo de enero a diciembre de 2022.
Owen Zelaya, asistente jurídico de la asociación Kukulcán, expresó que “es preocupante y alarmante” la situación de los derechos humanos, particularmente la muerte de personas de las personas que son parte de la comunidad LGBTIQ+.
“Solo en el 2022 se registraron 42 casos de muertes violentas entre gays, lesbianas y mujeres trans”.
Este informe se presentó a fin de promover respuestas efectivas del Estado en materia de derechos humanos y acceso a la justicia de las poblaciones LGBTQI+.
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MUERTES VIOLENTAS
El observatorio KAI registra 42 casos de muertes violentas, de enero a diciembre de 2022, 27 son hombres gais, tres hombres bisexuales, cinco mujeres lesbianas, seis mujeres trans y un hombre con identidad sexual indeterminada. Estas muertes, generan zozobra en la comunidad ya que son víctimas de discriminación por su orientación sexual e identidad y expresión de género.
En esta sistematización de 18 años, un total de 254 hombres gay, 125 personas trans. 43 mujeres lesbianas, y una persona con orientación sexual indeterminada fueron asesinadas en Honduras.
De los 42 casos de muertes violentas que registra el observatorio KAI, de enero a diciembre de 2022, 27 son hombres gais, 3 hombres bisexuales, 5 mujeres lesbianas, 6 mujeres trans y un hombre con identidad sexual indeterminada, perdieron la vida de manera violenta.
Estas muertes, generan zozobra en la comunidad ya que son víctimas de discriminación por su orientación sexual.
De acuerdo con Lucía Barrientos, coordinadora de la Organización Ixchel, con este informe “no solo buscamos presentar un índice, sino buscamos respuestas ante el incremento de la violencia en nuestro país, en las poblaciones vulnerables”.
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Las muertes violentas, la violencia generalizada, la desaparición de personas, y las solicitudes de refugio en el extranjero junto con otras problemáticas sociales contribuyen al incremento de la estigmatización, discriminación, y violencia hacia la población LGBTIQ+.
Ante este panorama, las organizaciones de la comunidad LGBTI+ tenían su confianza en el nuevo gobierno de Xiomara Castro, quien asumió el poder el 27 de enero de 2022, ya que la mandataria hondureña, incluyó a la comunidad en su discurso de toma de posesión.
“Adultos mayores, personas con discapacidad, niños y juventud, pueblos indígenas y afrodescendientes y comunidad LGTBIQ, todos tendrán un lugar de atención precisa dentro de mi gobierno”, expresó Castro.
Sin embargo, catalogan las acciones estatales, como “escasas”, por lo que mencionan “falta de voluntad política para las acciones en materia de derechos humanos y el avance en la aprobación de leyes que protejan a la comunidad LGBTIQ+”.
En ese sentido, Lucía Barrientos mencionó a Criterio.hn la importancia de generar mecanismos de protección y de incidencia que hagan respetar los derechos de las personas LGBTIQ+.
De igual manera, realizó un llamado a las autoridades estatales para que “se respeten nuestros derechos porque todos somos iguales ante la ley”, enfatizó Barrientos.
En ese sentido, la coordinadora de Ixchel, también sugirió la creación de protocolos y leyes que “garanticen nuestra vida en nuestro país para que no tengamos la necesidad de migrar y dejar nuestras familias”.
La Agencia de la Organización de las Naciones Unidad para los Refugiados (ACNUR), señala que, en Honduras, más de 247 mil personas han sido desplazadas por la violencia, estadísticas a las que se suman las personas de la comunidad LGBTI+ que se ven obligadas a huir del país.
