Campañas de desinformación transgreden los derechos de las mujeres

¿Son campañas de desinformación o cortinas de humo?, la pregunta que sale a flote en medio de la polémica

Por: Breidy Hernández

Fotos: Horacio Lorca

Portada: Guillermo Burgos

Tegucigalpa. – Género, la palabra que pone a correr a muchos en Honduras, y el sueño, de otros y otras, para lograr equidad en una sociedad abiertamente machista, donde los roles de género –impuestos por la sociedad— nos dicen cómo actuar, cómo vestirnos, qué estudiar, e incluso cómo pensar.

Pero el debate, se traslada y se vuelve más interesante al hablar de entornos escolares con perspectiva o enfoque de género y libres de violencia de género, ya que se generan discusiones, tanto en padres, madres y maestros como en religiosos y políticos, que terminan transpirando el odio y la desinformación.

De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), los centros escolares pueden facilitar la violencia, pero a la vez tienen la ventaja que también pueden desempeñar un rol en la prevención.

“Las escuelas pueden servir como espacios de protección para los niños y las niñas, actuando como un área importante para un cambio social más amplio para poner fin a la violencia tanto dentro como fuera de la escuela”, sugiere el organismo de las Naciones Unidas.

Para este cambio, Unicef plantea el papel fundamental que ejercen los medios de comunicación, que son los llamados a informar desde una mirada de derechos humanos, con especial atención a la información que llega a los niños, niñas y adolescentes.

“Todos los días se producen y publican cantidad de noticias, informaciones y coberturas periodísticas sobre niños, niñas y adolescentes: muchas de ellas, tanto en gráfica, como en radio, televisión o internet, no contemplan una mirada de derechos” señala Unicef.

Partiendo del ideal de informar desde una perspectiva de derechos humanos, y luego que, en diversos medios de comunicación tradicional, se han difundo artículos que generan debate, pero más allá, amplían la brecha de la desigualdad de género,  Criterio.hn, realiza la verificación de campañas que abordan la Educación Sexual Integral como “Ideología de Género”, sin hacer pausa y pensar que se están transgrediendo derechos.

Tras un anuncio de la Secretaría de Educación de incluir dentro de la maya curricular para el 2023 la equidad de género, usurarios de Twitter se volcaron en contra de esta iniciativa y por qué no decirlo, una deuda heredada por años.

“En febrero del 2023 comenzamos clases bajo una nueva malla curricular donde nuestras niñas y niños aprenderán la importancia de la equidad de género, rompiendo con los estigmas que afectan a nuestra sociedad”.

Comentarios como el de Yami Cárcamo, no se hicieron esperar, quien menciona que es madre y docente, y “me opongo a que este tipo de transformación educativa venga a contradecir la ley Divina”.

De su lado, Cecile Flores tomó como referencia, sin razón alguna, el artículo 68 de la Constitución de la República, que refiere, entre otras cosas, que toda persona tiene derecho a que se respete su integridad física, psíquica y moral”. Flores arguye la parte moral y asegura que la intención es “adoctrinar a niños en temas de sexualidad” “desde un punto de vista genital antinatural”.

La hondureña también hizo referencia al artículo 152 de la Constitución que establece que “los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrán de darle a sus hijos”.

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MEDIOS TRADICIONALES CAJAS DE RESONANCIA PARA CAMPAÑAS DE DESINFORMACIÓN

Esa ceguera ciudadana ante los derechos, se prolifera y se evidencia en las campañas de desinformación que han utilizado los medios de comunicación, grupos religiosos e institutos políticos, en torno a la implementación de la Educación Sexual Integral con enfoque de género.

Recientemente un medio de prensa escrito, sacó en su portada por dos días consecutivos titulares con frases “Ideología de género, un peligro para la identidad sexual de niños y jóvenes”, “Escuelas rechazan la ideología de género”.

Dunia Orellana, Periodista de Reportar Sin Miedo expresó a Criterio.hn que estas campañas “atentan contra la vida y la reputación de las personas. Una persona que no pueda expresarse, la matan psicológicamente”.

De igual manera, mencionó que muchas de estas campañas de desinformación terminan en campañas de discriminación.

De igual manera, las reacciones ante estas publicaciones se hicieron públicas, tal es el caso del congresista Víctor Grajeda, el primer diputado abiertamente gay en el Congreso Nacional, se refirió a través de Twitter y lamentó que por dos días consecutivos este medio de comunicación publicara “portadas que desinforman y promueven la LGTBIQ Fobia”.

De igual manera, Jacky S., otra usuaria de Twitter, manifestó que estas acciones son “la ironía de los medios de comunicación” ya que en su segundo día la portada de este medio escrito, destacó el titular “escuelas rechazan la ideología de género”, en esa misma portada también matizaron con el titular “sale libre joven que propino salvaje golpiza a su novia”.

Con este mismo contraste el escritor Oscar Estrada publicó “Si vamos a hablar de “ideología de género” hablemos de cómo esos dos titulares se relacionan. Porque la lucha contra violencia contra la mujer es también IG. ¿Eso es lo que rechazan las escuelas? La idea de que los hombres no pueden golpear a sus parejas”.

Cabe mencionar que estas campañas de desinformación parten desde los ideales de las instituciones religiosas; para Sandy Arteaga, vocera de Hablemos Los Que Es, estas instituciones “refuerzan algunos estigmas, tabúes y algunos mitos”.

Que, de acuerdo con la vocera, estos conceptos son sinónimos de desinformación a excepción del mito, luego de pasar por un estudio científico filosófico.

Unicef, en su Guía Para Periodistas: Comunicación, Infancia Y Adolescencia con Perspectiva de género, indica que “más allá de los nuevos soportes para almacenar y trasmitir información, los medios de comunicación tradicionales, radio y televisión, siguen teniendo el poder de construir lógicas, sentidos comunes y agendas que determinan qué noticias y qué personas son importantes para entonces destinarles tiempo en minutos de aire o páginas escritas”.

Sin embargo, advierte “esta agenda (setting) no es inocente, responde al poder hegemónico, que es patriarcal, y repite en sus estereotipos sentidos que perpetúan la asignación arbitraria de roles fijos, marcados por la división por género y también por edad”.

La periodista fundadora del medio Reportar Sin Miedo, Dunia Orellana, lamenta que desde la prensa que criminalice a las mujeres. También dice que las campañas de desinformación son una cortina de humo para evadir el abordaje de algunas problemáticas.

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CORTINAS DE HUMO

Estas campañas de desinformación despertaron en la ciudadanía, la controversia, el morbo, la apatía e incluso el odio, es decir, se logró el objetivo de desviar la atención de temas importantes.

“Las campañas de desinformación son utilizadas para diversos fines, y muchas veces son cortinas de humo”, señaló Dunia Orellana.

La periodista Dunia Orellana, recordó que las cortinas de humo, que sirven para distraer a la ciudadanía de un tema central y de relevancia, fueron utilizadas en el gobierno de Juan Orlando Hernández (JOH), presidente de Honduras, a quien se le debe la tipificación de Honduras como narcoestado; JOH está siendo enjuiciado en Nueva York por delitos de narcotráfico.

Esta estrategia fue utilizada, de cara al proceso electoral del 202. Durante su discurso del 15 de septiembre, en el Bicentenario de la independencia de Honduras, el expresidente catalogó como “enemigos de la independencia” a las organizaciones de derechos de las mujeres, así como los derechos de la diversidad sexual y defensores y defensoras del territorio.

Según Orellana, lo manifestado por Hernández “fue una de las grandes cortinas de humo para el tema central, las elecciones y las ZEDE”.

Campañas que, previo a que Xiomara Castro derrotara a la dictadura nacionalista, en las elecciones de 2021, se afianzaron más a fin de, según Orella, desprestigiar y descalificar el gobierno que propuso un plan de gobierno progresista.

En este pan de gobierno, la presidenta Castro, reconoce los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. El numeral cinco, titulado: “Género: nada sobre nosotras, sin nosotras”, despertó las esperanzas de las organizaciones defensoras de derechos de la mujer y del mismo modo despertó los cuestionamientos de iglesias, partidos políticos y otras organizaciones denominadas “Pro-vida”.

Orellana, los califica como “anti derechos”, que están afianzados por las iglesias, –católica y evangélicas— y otros grupos como Partido Nacional, Partido Liberal e incluso en el mismo Libre, señaló.

“No podemos negar que la presidenta Xiomara tiene muchas personas anti derechas en este gobierno”, enfatizó al tiempo que externó que “como periodistas y como defensora de derechos humanos nos damos cuenta que estas campañas son cortinas de humo”.

CONSECUENCIAS DE LAS CORTINAS DE HUMO

Con estas campañas y sus réplicas se provoca que la ciudadanía alimente su odio, fobias y el irrespeto de los derechos humanos, para todos los grupos vulnerabilizados, ya que, al hablar de género, no solo se habla de orientación sexual o identidades de género.

Según Orellana, las cortinas de humo, disfrazadas de campañas mediáticas, como el último caso, en el que un medio tradicional habla de “ideología de género”, trae consigo consecuencias, como la discriminación a las personas de la comunidad LGBTIQ+.

Una muestra de la violencia hacia la diversidad sexual, y que puede derivar de campañas de estigmatización, se refleja en las 43 muertes violentas de personas LGBTIQ+, registradas por el Observatorio de la Red Lésbica Catrachas, que precisa que 11 fueron asesinatos de lesbianas.

El análisis de la periodista Dunia Orellana, indica que estas campañas de desinformación, que se valen de un tema controversial en la sociedad hondureña, se han generado con el objetivo de ocultar temas de gran envergadura.

Entre esos temas destaca las ZEDE, la extradición y las investigaciones por narcotráfico pendientes y que involucra a miembros de los partidos políticos; de igual manera, se pretende desviar la atención de la instauración de la Comisión Internacional contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH).

Ligia Destephen, investigadora del Centro de Derechos de la Mujer (CDM), recalcó que con estas campañas se acentúa el odio hacia la población LGBTIQ+, “fomentado por los medios de comunicación”.

Ligia Destephen, investigadora del Centro de Derechos de la Mujer (CDM), considera que los medios de comunicación fomentan el odio hacia las personas LGBTIQ+ y hacia las mujeres.

ENFOQUE DE GÉNERO Y PREVENCIÓN DE VIOLENCIAS ¿DÓNDE QUEDA?

Pongamos el lente en el enfoque de género y cómo aporta en la prevención de las violencias y embarazos en niñas y adolescentes, sobre todo en el ámbito escolar.

Desde hace dos décadas, cuando iniciaron las encuestas sobre violencia contra las mujeres, de acuerdo con la investigadora colombo-ecuatoriana, Ariadna Reyes, educomunicadora y especialista en prevención y erradicación de las violencias de género hacia niñas, niños, adolescentes y mujeres, la constante en la región latinoamericana es la incidencia en la violencia sexual y embarazos en niñas y adolescentes. Reyes destaca que uno de los países con mayor afectación en la región es Honduras.

Honduras, de acuerdo con el informe del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), sobre el Estado de la Población Mundial, registra una tasa de natalidad de adolescentes de 89 por 1,000 niñas, superior al promedio de la región que es 61 por 1,000 niñas y el doble del promedio mundial.

Para mayo de 2022 la Secretaría de Salud (Sesal) registró cuatro partos en niñas menores de 10 años, 352 en niñas entre los 10 y 14 años, y 8 mil 561 partos en adolescentes de entre 15 y 19 años.

Por otro lado, el Centro de Derechos de la Mujer (CDM) señala que, en el 2022, se presentaron 2,944 denuncias, ante el Ministerio Público (MP) por violencia sexual en contra de mujeres y niñas.

La coordinadora del observatorio del CDM, Hellen Ocampo, detalló que, en el 2022, de las 2,944 denuncias de violencia sexual, el 68% de las víctimas corresponde a niñas y adolescentes menores de 18 años, es decir, más de 2 mil niñas y adolescentes abusadas.

Ante estas cifras es necesaria la implementación de la Educación Sexual Integral que, de acuerdo con analistas, vendría a reducir los embarazos y las violaciones en contra de las niñas y adolescentes, e igualmente se ampliaría el abanico de oportunidades para las niñas ya que gozarían de una vida escolar plena.

Margarita Bueso, coordinadora Nacional de ONU Mujeres, en recientes declaraciones a Criterio.hn, resaltó la necesidad de incluir la educación de la salud sexual y reproductiva en los centros escolares, ya que, a su juicio, los embarazos en adolescentes, “frustran la vida de las niñas”, porque “es la niña la que deja de estudiar y es la niña la que pierde oportunidades”.

Ariadna Reyes, quien también es educomunicadora y especialista en prevención y erradicación de las violencias de género hacia niñas, niños, adolescentes y mujeres, señaló, en entrevista con Criterio.hn, que hay dos espacios “privilegiados” para la prevención de la violencia basada en género, como la prevención de embarazos en niñas y adolescentes. Esta prevención tiene que ver –en primer lugar— con la familia, es decir, “la necesidad de entender la importancia de desnaturalizar prácticas de discriminación de género en las familias”.

Otro de los espacios que se vuelven importantes, son los centros educativos, por lo que, Reyes dice que “la escuela no puede estar al margen de su obligación”. En ese sentido, la educomunicadora, sugiere se creen y garanticen proyectos de vida integral y climas escolares propicios para el reconocimiento y prevención de cualquier forma de violencia basada en género.

Para Ariadna Reyes, el enfoque de género, busca que todas las personas con obligaciones y responsabilidades (padres, madres, comunidades educativas y gobernantes) “nos demos cuenta que existen narrativas, prácticas y conductas”, que, de acuerdo con la investigadora, “han hecho y creado mayores desigualdades entre mujeres y hombres”.

Hoy, 28 de marzo de 2023, en el marco del Día Internacional de la Mujer, las mujeres saldrán nuevamente a las calles a exigir sus derechos.

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EDUCACIÓN SEXUAL INTEGRAL

El enfoque de género, sugiere la implementación de la Educación Sexual Integral en el sistema educativo, una educación que debe iniciar por los docentes y autoridades escolares.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), define la educación integral como “un proceso de enseñanza y aprendizaje basado en planes de estudios que versa sobre los aspectos cognitivos, psicológicos, físicos y sociales de la sexualidad”.

Esta enseñanza, tiene como propósito “dotar a los niños y jóvenes de conocimientos basados en datos empíricos, habilidades, actitudes y valores que los empoderarán para disfrutar de salud, bienestar y dignidad; entablar relaciones sociales y sexuales basadas en el respeto; analizar cómo sus decisiones afectan su propio bienestar y el de otras personas; y comprender cómo proteger sus derechos a lo largo de su vida y velar por ellos”.

En Honduras, las organizaciones de mujeres, feministas y organizaciones de Sociedad Civil, mantienen su exigencia al Estado para incluir la educación sexual integral en los centros educativos.

Ana Ruth García, coordinadora de Ecuménicas por el Derecho a Decidir, mencionó que esta implementación es para “prevención de embarazo adolescentes, abuso sexual y los diferentes tipos de violencia en contra de mujeres y niñas”.

Un informe del Centro de Derechos de la Mujer (CDM), señala que el obstáculo para la implementación de la Educación sexual Integral se origina de grupos religiosos fundamentalistas con fuerte presencia dentro de las estructuras de poder del Estado, así como la influencia simbólica que las iglesias ejercen sobre la población.

En ese sentido, la también pastora y teóloga, Ana Rut García, acusa directamente a la iglesia católica por oponerse “a estos avances científicos y educativos que sirven de prevención hacia la violencia en contra de las niñas y mujeres”.

La especialista en prevención y erradicación de las violencias de género hacia niñas, niños, adolescentes y mujeres, Ariadna Reyes, enfatizó en que la educación sexual integral es fundamental porque implica el reconocimiento de los derechos humanos de niños, niñas y adolescentes, a tener una vida saludable, a su integridad física, psíquica, sexual, moral y en las relaciones interpersonales con la igualdad y  horizontalidad.

Reyes insiste en que desde las escuelas se imparta la educación sexual integral para prevenir las violencias basadas en género y los embarazos en niñas y adolescentes, para que este sector poblacional tenga un desarrollo integral, una autonomía progresiva, sobre la toma de decisiones en cuanto a su integridad, su cuerpo, sus relaciones y además sobre los imaginarios en cuanto a la sexualidad, al amor romántico y las masculinidades que se tejen en clave de dominio u opresión de los cuerpos de las mujeres, a través de la de la información clara y pertinente.

Para Ligia Destephen, psicóloga e investigadora del Centro de Derechos de la Mujer (CDM), la educación sexual integral tiene que ver con autoestima, salud mental, valores, respeto, la no discriminación y la libertad que tienen las personas para decidir sobre sus vidas.

Por su parte, Dafne Unilia Rodríguez, docente y fiscal de la junta directiva central del Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras (Copemh), la exposición de los niños, niñas y adolescentes a las redes sociales, medios de comunicación e internet en general, “les genera una realidad distorsionada sobre la sexualidad”.

Destephen, también comparte esta postura. “Los dejamos a la deriva, que tomen la información de donde sea, todo llega muy rápido”, señaló.

Las mujeres de Honduras, al igual que en México y otros países de Latinoamérica, recurren a las expresiones en paredes de edificios y/u otros lugares para demandar sus derechos.

IDEOLOGÍA Y GÉNERO, DOS PALABRAS QUE NO SE MEZCLAN

Ya hemos mencionado sobre las consecuencias de estas palabras juntas, pero hablemos de los conceptos de cada una de etas palabras.

La Real Academia de la Lengua Española define ideología como “conjunto de ideas fundamentales que caracteriza el pensamiento de una persona, colectividad o época, de un movimiento cultural, religioso o político”.

Desde la filosofía se define como “doctrina que a finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX tuvo por objeto el estudio de las ideas”.

Por otro lado, el termino género, supone una diversidad de usos, que van desde el ámbito social, las artes como la literatura, biología, la gramática, entre otras.

La Real Academia de la Lengua Española, menciona en unos de los conceptos que es el conjunto de seres que tienen uno o varios caracteres comunes.

También lo define como “grupo al que pertenecen los seres humanos de cada sexo, entendido este desde un punto de vista sociocultural en lugar de exclusivamente biológico.

Sin embargo, al hacer una mezcla de la palabra ideología y género, de acuerdo con Sandy Arteaga, lo que se busca es imponer una idea. “Detrás de toda ideología está el background  (fondo) de la imposición”, señaló.

“Con la ideología de género, vienen a confrontar para poner en un cajoncito todos los factores, causas y consecuencias de las discriminaciones hacia las poblaciones vulnerabilizadas”, subrayó Ariadna Reyes.

Al usar estos dos términos unidos, en relación a los derechos humanos, se reduce y excluye las discusiones para que exista un real adelanto de la mujer, niñas y adolescentes, y de todas las personas independientemente de su orientación sexual e identidad de género, apunta Reyes.

  • Breidy Hernández
    Amante de la lectura y la naturaleza, una mujer con la convicción firme que todos podemos hacer cambios significativos en la sociedad, por eso mi objetivo es exponer las injusticias que adolece la ciudadanía. Busco incidir, a través del periodismo, en la defensa y promoción de los derechos humanos, evitando caer en la complicidad de callar ante las injusticias y la corrupción. breidyhernandez@criterio.hn

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