“Bullying” o falla de la justicia hondureña

Por: Redacción CRITERIO

redaccion@criterio.hn

Comenzamos definiendo que es Bullying.  Wikipedia dice que, “es el acoso escolar (también conocido como hostigamiento escolar, matonaje escolar, matoneo escolar, maltrato escolar o en inglés (bullying) es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares  de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado tanto en el aula, como a través de las redes sociales, con el nombre específico de ciberacoso ”.

“Estadísticamente, el tipo de violencia dominante es el emocional y se da mayoritariamente en el aula y patio de los centros escolares. Los protagonistas de los casos de acoso escolar suelen ser niños y niñas en proceso de entrada en la adolescencia, siendo ligeramente mayor el porcentaje de niñas en el perfil de víctimas”.

Bullyng,  es burlarse de alguien, golpearlo hasta darlo por muerto es intento de asesinato.
Bullyng, es burlarse de alguien, golpearlo hasta darlo por muerto,  es intento de asesinato.

El 12 de septiembre pasado se dio a conocer la noticia que un joven de 14 años, estudiante de “La Estancia School” fue encontrado tirado en la carretera a Olancho cerca de la residencial Villa Elena, víctima de una golpiza brindada por seis compañeros suyos y que los medios corporativos de Honduras han denominado “bullying” cuando a toda vista,  lo que hubo aquí fue un intento de asesinato.

El jovencito no recibió burlas o bromas, recibió una paliza que culminó con golpes en la cabeza con un palo de golf tratando de quitarle la vida. Una vez que lo creyeron muerto, los jóvenes agresores lo sacaron a la carretera colocándolo en la vía pública para aparentar que lo había atropellado un carro y que se dijera que esa fue la causa de su muerte.

El adolescente fue encontrado por una vecina quien lo trasladó al hospital escuela en condiciones de desconocido y tras permanecer en estado de coma,  logró recuperarse y contra la historia de lo sucedido.

La mayoría de psicólogos y criminalistas comparten la idea que el delincuente puede ser desde un menor de edad hasta un adulto mayor. Definen además que una mente criminal en la mayoría de los casos está asociada a una pérdida del control de las funciones mentales, bien sea en forma temporal o permanente. 

En el primer caso, los delitos asociados a una pérdida del control temporal de las funciones mentales, las causas son variadas e incluyen situaciones de estrés, miedo, celos, abuso de alcohol, uso de substancias alucinógenas. En el segundo caso, la pérdida permanente en el control de las funciones mentales, las causas incluyen patologías que alteran la estructura y función cerebral. 

Definimos la “mente criminal”, porque aunque los medios corporativos hasta el día de hoy quieren hacer aparecer este intento de asesinato como bullying, lo que se dio ese 14 de septiembre fue un intento de asesinato con premeditación alevosía y ventaja.

Primero, premeditación: pensaron el hecho e invitaron al joven a salir de la casa para luego golpearlo hasta casi matarlo.

Segundo, alevosía se aseguraron que el joven no pudiera defenderse y de no ponerse en riesgo ellos mientras cometían el delito.

Tercero, ventaja porque eran seis contra uno llevado mediante engaño y atacado con palos de golf mientras que la víctima solo tenía sus manos para defenderse.

Papel de la fiscalía

El 28 de septiembre se dio a conocer que el  Ministerio Público (MP), a través de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), citaría a los seis escolares que le propinaron la paliza a su compañero, a quien dejaron por muerto.

En esa ocasión se dijo que el delito que enfrentarían los muchachos es tentativa de asesinato que según el artículo 117, “Es reo de asesinato, quien dé muerte a una persona ejecutándola con la concurrencia de cualquiera de las circunstancias siguientes”: 1) Alevosía. 2) Con premeditación conocida. 3) Por medio de inundación, incendio, envenenamiento, explosión, descarrilamiento, volcamiento, varamiento o avería de buque u otro artificio que pueda ocasionar grandes estragos, siempre que haya dolo e intencionalidad; y 4) Con ensañamiento, aumentando deliberada e inhumanamente el dolor del ofendido.

Conjuntamente con las investigaciones que habría realizado el ente acusador del Estado,  solo se quedó en un expediente prejudicial, que se encuentra en el despacho de la juez, coordinadora del Juzgado de la Niñez, quienes desde el 30 de septiembre lo recibieron, pero nunca más le dieron seguimiento.

El caso entró al proceso de “engavetamiento” como muchos en los que se ven involucrados personas poderosas política o económicamente.

Se supo que los familiares del ofendido habrían pedido que no se hiciera nada, pero en un delito de intento de asesinato el Ministerio Publico está obligado a actuar de oficio y hasta la fecha no lo ha hecho.

Hoy se ha conocido que cinco de los seis jóvenes involucrados en el intento de asesinato, calificado como “bullying” por la prensa corporativa, primero desaparecieron del colegio al que no regresaron y ahora han salido del país o han desaparecido “como por arte de magia”, a pesar que tenían prohibido salir del país.

Las preguntas que quedan flotando aquí son:

1.- ¿Qué hará la fiscalía de delitos comunes para resolver este caso?

2.- ¿Van a proceder contra los empleados de migración que permitieron la salida del país de estos jóvenes?

3.- ¿Se librarán las respectivas órdenes de captura, tanto para los jóvenes,  como para los padres que los han sacado del país, eludiendo la justicia y desobedeciendo una prohibición judicial?

  • Me encanta desafiar el poder y escudriñar lo oculto para encender las luces en la oscuridad y mostrar la realidad. Desde ese escenario realizo el periodismo junto a un extraordinario equipo que conforma el medio de comunicación referente de Honduras para el mundo Ver todas las entradas
Contenido a tu alcance

Periodismo de calidad en tus manos

Suscríbete y se parte de nuestro newsletter