En la cultura machista que vive la sociedad hondureña las mujeres no pueden revelarse en contra del acoso, porque de hacerlo, significa que la mujer se está saliendo del papel que le corresponde
Tegucigalpa. Una pequeña luz alumbra la vida de las mujeres, jóvenes y niñas hondureñas, la Red de Mujeres del Litoral Atlántico, logró consolidar una ordenanza que sancionará el acoso sexual y verbal hacia las mujeres de este municipio.
La violencia y el acoso callejero son otro problema al que se enfrentan a diario las mujeres, jóvenes y niñas de este país, estos problemas muchas veces suelen ser silenciosos y pasan desapercibidos por la sociedad debido a que este problema se ha normalizado, y porque no se toma en cuenta que son problemas que le roban la paz a este grupo de la población.
La municipalidad de La Ceiba, Atlántida, zona norte del país, aprobó una ordenanza que entrará en vigencia el 25 de enero, día en que se conmemora el Día de la Mujer hondureña en memoria de la primera conquista política de las mujeres.
La medida es con el objetivo de velar por los derechos de las mujeres y para sancionar a personas que practiquen el acoso sexual callejero en la ciudad, este municipio caribeño de Honduras es el primero en tomar este tipo de medias contra el acoso callejero en el país.
La ordenanza municipal prohíbe expresar acoso verbal o piropos a las mujeres, imponiendo una sanción económica, por considerar la acción como acoso callejero.
El Departamento de Justicia Municipal será el ente encargado de velar por el estricto cumplimiento de dicha ordenanza y por ejecutar las multas correspondientes que van desde medio salario mínimo en adelante.
La feminista Jessica Sánchez y defensora de los derechos de las mujeres en conversación con Criterio.hn manifestó que dicha medida es un gran logro para las mujeres hondureñas, sin embargo, considera que tanto la medida y sanción deberían trasladarse a todos los municipios del país para evitar que las mujeres sufran este tipo de violencia desde que salen de sus casas.
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Expuso que hay una enorme diferencia entre un piropo y el acoso sexual, porque el acoso sexual siempre va dirigido al cuerpo y la sexualidad de las mujeres y no hacia la inteligencia o a la belleza de una mujer como tal. “El acoso es como si a uno le tiraran basura en el cuerpo”, expresó.
Sánchez es del criterio que esta ordenanza tendrá mucho impacto en La Ceiba y que, además, servirá como ejemplo para los y las hondureñas porque será al menos un lugar del país sin violencia sexual ni acoso para las mujeres.
El acoso callejero ocurre en lugares públicos como en sitios cerrados, por lo general quienes lo practican son personas desconocidas, lamentablemente muchas veces no se queda solo en acoso, sino que va a la par de la violencia sexual dado que es cualquier acto no deseado que tiene una connotación sexual, porque hay comentarios ofensivos hacia la mujer que lo relacionan con su cuerpo.
Honduras es un país en el que las mujeres son víctimas de acoso sexual de manera constante porque está plasmada y latente la cultura patriarcal y machista que ha normalizado el acto de decir comentarios que las mujeres no piden.
Feministas y colectivos de mujeres aseguran que el acoso es un problema estructural, un delito que debería ser severamente penado por el Estado de Honduras.
En entrevista reciente brindada a Criterio.hn la directora de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras (RNDDH), Jessica Trinidad, manifestó que “Mientras el Estado no dé pasos determinantes ni tenga ninguna voluntad para disminuir la brecha de desigualdad que hay entre hombres y mujeres, cambiar los patrones de la violencia contra las mujeres será muy difícil”, razonó la defensora de las mujeres.
La integrante de la Red de Violencia contra la Mujer y las Niñas, Belinda Rodríguez, en entrevista con Criterio.hn manifestó que “Hemos realizado una reunión de coordinación con dependencias municipales, porque el gobierno local es el responsable de la implementación y ahora nos toca ser veedores y acompañar este proceso para que se cumpla”.
Agregó que esta iniciativa fue impulsada porque muchas niñas aseguraron que el indicio de la violencia y de embarazos en menores va abriendo puertas a través de la tolerancia al acoso sexual callejero.
“Nosotros lanzamos esta ordenanza en el marco de un proceso de sensibilización ligada a la prevención de la violencia que llega hasta los femicidios en nuestro país, precisamente este año que lo iniciamos con muertes violentas de mujeres que es lo que nos preocupa y queremos prevenir”, lamentó Rodríguez.
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“A nosotras las mujeres no nos regalan nada, tenemos que luchar para mejorar las condiciones de vida de las mujeres y respetar el derecho a la libre expresión, la libertad y una vida libre de violencia como demandan las convenciones internacionales”, manifestó.
En torno a la violencia ejercida en contra de las mujeres los últimos días, la coordinadora residente de las Naciones Unidas en Honduras, Alice Shakerlford mediante un tuit manifestó su preocupación ante este problema, al tiempo que solicitó el cese a la violencia femicida ejercida en el país.
A juicio de la defensora de derechos de mujeres y niñas se necesita un accionar más fuerte y más determinado por parte de la presidenta Xiomara Castro en tema de violencia contra este grupo.
De igual forma se deben crear iniciativas que prevengan y cambien los niveles de violencia y no que se quede en promesas o pequeñas decisiones, “queremos un accionar más determinante para las mujeres, respuestas más firmes y más efectivas para combatir los niveles de violencia”, concluyó Rodríguez.
