El informe de Red Coiproden revela que la situación de la niñez migrante de Honduras requiere atención inmediata para evitar una crisis mayor, señalando la urgencia de implementar políticas públicas integrales
Tegucigalpa, Honduras. – La migración infantil en Honduras se ha convertido en un fenómeno preocupante que afecta a miles de niños y niñas en busca de un futuro más prometedor. En un contexto marcado por la pobreza, la violencia y la falta de oportunidades, cada vez más la niñez y la adolescencia se ven forzados a abandonar sus hogares.
En 2024, las detenciones de menores hondureños en México han aumentado significativamente, evidenciando la creciente vulnerabilidad de esta población. Ante esta crisis, organizaciones sociales y expertos hacen un llamado urgente a la acción para abordar las causas profundas de la migración y garantizar la protección de los derechos de la niñez
Edgardo Molina, coordinador técnico del Proyecto Binacional de Migración Guatemala-Honduras, destacó en entrevista con Criterio.hn que las detenciones de niños hondureños en México han alcanzado cifras alarmantes.
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AUMENTO DE LAS DETENCIONES
La Red Coordinadora de Instituciones Privadas Pro las Niñas, Niños, Adolescentes, Jóvenes y sus Derechos (Red Coiproden), y la Mesa de Organizaciones de Sociedad Civil para la Niñez Migrante (MNM) han presentado un análisis sobre la crítica situación que enfrenta la niñez migrante hondureña al cierre de 2024. Este informe destaca los retos, desafíos y amenazas que requieren atención inmediata para evitar una profundización de la crisis humanitaria que afecta a miles de menores en el país.
De acuerdo con los datos de la Unidad de Política Migratoria de México, de enero a agosto de 2024 al menos 10,627 niños, niñas y adolescentes han sido detenidos en México.
Las cifras son preocupantes porque representan un aumento en las detenciones en comparación con el 2023, ese año 13,906 niños y niñas fueron detenidos, y al hacer un análisis comparativo de enero a agosto de 2023 fueron detenidos 7,023, es decir un aumento de las detenciones de 3,279 NNA.
Por otro lado, las autoridades hondureñas han sugerido que la disminución en el flujo migratorio se debe a la baja en los retornos y en las aprehensiones de migrantes en la frontera sur de Estados Unidos, interpretando estas cifras como un indicativo de que menos hondureños están optando por abandonar el país. Sin embargo, esta apreciación no toma en cuenta la evolución del fenómeno migratorio, que se ha vuelto más complejo
En ese sentido, Edgardo Molina subrayó que no se puede evaluar el fenómeno migratorio únicamente a través de los retornos. La migración ha evolucionado hacia una forma más compleja, explica, donde muchos niños permanecen en México como migrantes estacionarios, esperando cruzar a Estados Unidos.
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NIÑEZ ASUME EL PESO DE LA CRISIS FAMILIAR
La migración de hondureños es un fenómeno constante que ha alcanzado niveles alarmantes, considerada como una emergencia humanitaria, con un número creciente de personas, incluidos niños, niñas y adolescentes, abandonando el país en busca de mejores oportunidades y seguridad.
Sally Valladares, especialista en temas de migración, destaca que la situación actual es crítica: «Las autoridades todavía siguen con esa idea de menos detenciones, pero el flujo de personas de Honduras ha aumentado significativamente», señaló.
En entrevista con Criterio.hn, explicó que la crisis histórica de la migración en Honduras se ve impulsada por la violencia, la pobreza y la falta de oportunidades. De acuerdo con Valladares, muchos niños se ven obligados a migrar acompañados, pero en la mayoría de los casos lo hacen solos, asumiendo responsabilidades familiares que no deberían recaer sobre ellos. «La niñez ha dejado de ser niñez en Honduras; muchos toman la decisión de migrar porque sienten que deben sostener a sus familias» refirió.
Esta realidad refleja un entorno donde las necesidades básicas y los derechos fundamentales son constantemente vulnerados, que requiere de políticas publicas integrales para su abordaje y además para atender a la niñez que está siendo retornada.
