Cómo identificar a personas fanáticas, obsecadas y subjetivas cuando hablan de sus contrarios
Por: Leticia Salomón
Desde hace unos días he empezado a colectar notas, esperando hacer un análisis más detallado, sobre el lenguaje utilizado por líderes políticos, editorialistas, comentaristas, periodistas, maestros, pastores, empresarios, entrevistadores y otros, al referirse al gobierno, partido y líderes que adversan. Y resulta interesante porque ellos solos se evidencian y marcan su territorio. Vivimos en una sociedad tan polarizada y confrontada que bien vale la pena hacer un esfuerzo por la “objetividad”, ese posicionamiento que resulta complicado cuando asumen que las únicas alternativas son: estar a favor o estar en contra, seguido de su terrible consecuencia: “si no estás en contra, es porque estás a favor” o “si no estás a favor, es porque estás en contra”…
Veamos algunas perlas que reflejan lo anterior:
1. Su reacción ante personajes que adversan: despectiva, iracunda, emotiva, irrespetuosa, muchas veces frenética.
2. Reacción física cuando aluden al otro o a los otros: lenguaje utilizado, expresión de la cara, tensión muscular, insistencia temática, gesticulación insistente, muletillas: flamantes, intocables, sabelotodos, incapaces, ladrones, traidores, ñángaras.
3. Su alusión a autoridades con las que no coinciden: las llaman por su nombre, alias, apodos, segundos nombres, apellidos raros o asociación con familiares que provocan rechazo: el hijo de, la hermana de, el papá de…
4. Su referencia al partido de gobierno y a sus lideres (con los que no simpatizan, por supuesto): ladrones, corruptos, no sirven para nada, se dan la gran vida a costa del pobre.
5. Su referencia a autoridades, lideresas, funcionarias o diputadas del partido de gobierno: el que manda es el marido, es el que dice lo que tiene qué hacer, no hace nada sin preguntarle.
6. Forma de expresarse ante los problemas sociales heredados del gobierno anterior: ya dejen de hablar de narcodictadura y de echarle la culpa de todo, empiecen a trabajar que para eso les pagan.
7. Reacción cuando escuchan la palabra “socialismo”, aunque sea democrático: quieren convertir al país en otra “Cuba, Nicaragua o Venezuela”; son ñángaras que quieren terminar con la propiedad privada y robarnos a nuestros hijos.
8. Reacción cuando los atacan y los comparan con líderes del partido de gobierno: nosotros defendemos la democracia, el mundo libre, la libertad, Dios nos libre de caer en las garras del comunismo. (Y lo peor es que no tienen ni idea de lo que significa).
9. Respuesta cuando hablan de corrupción del gobierno anterior: “pero este gobierno también es corrupto”.
10. Reacción cuando les preguntan sobre el clima, la lotería o las rebajas de los supermercados: el que está detrás de todo esto es ÉL, ese pícaro, sinvergüenza, ñángara!!!!
11. Cuando hablan del peligro para la democracia de la corrupcción y el narcotráfico: cambian de tema o silencio sepulcral, como si no fuera con ellos.
12. Cuando alguien no coincide con su reacción, estilo u obsesión: ¡es otro ñángara!
13. Cuando se sienten acorralados en sus argumentos: hacemos un llamado a las Fuerzas Armadas para que garanticen la alternabilidad, la vigencia del Estado de derecho y la soberanía e integridad territorial. ¡Reaccionen que para eso tienen las armas!!!!
14. Cuando ya están totalmente manipulados o convencidos de que el otro es el enemigo, asumen con el lenguaje que las críticas son un hecho: considerando que la política exterior es un desastre…, dado que la estrategia de seguridad ha fracasado…, la política monetaria es un fracaso porque los dólares están escasos…
15. Cuando al fin se ponen de acuerdo con la oposición para resolver un conflicto: a saber qué negociaron, ya se pusieron de acuerdo con los corruptos, son iguales de sinvergüenzas…
16. Cuando algún diputado menciona que si se hacen las cosas de esa manera, cualquier presidente podría presentar su renuncia al CN para reelegirse: ¡Todo está arreglado! ¡Esa es la intención! ¡Bien guardado se lo tenían, preparémonos para impedirlo!!!!
RESUMEN:
La democracia se sustenta en tres valores esenciales: pluralismo, tolerancia y respeto a los que son y piensan diferente. De igual manera se sustenta en el respeto a las reglas del juego democrático que implica reconocer que perdieron las elecciones (en juego limpio) y comienzan a prepararse para ganar las siguientes. Un desafío importante en la democracia es entender lo que es ser oposición política (cuestionar unas acciones, coincidir en otras, votar a favor de iniciativas que benefician al país y en contra si son perjudiciales). Para eso hay que leer, estudiar y prepararse para ser oposición democrática, más allá de que sean de centro, derecha o izquierda. Lastimosamente aquí en este país “que nos duele tanto” ellos y ellas son así: subdesarrollados como el país pero, a pesar de ello, “Honduras tiene derecho a una nueva derecha”… ¿Será posible que eso suceda algún día o definitivamente estamos condenados a seguir soportándolos y aguantándolos, todo por la democracia?
-
Somos un medio de comunicación digital que recoge, investiga, procesa, analiza, transmite información de actualidad y profundiza en los hechos que el poder pretende ocultar, para orientar al público sobre los sucesos y fenómenos sociopolíticos de Honduras y del mundo. Ver todas las entradas