Pese al estado de excepción las muertes violentas de niñez y juventud se siguen dando en el país, en el primer trimestre se registró un incremento del 9 % de muertes
Tegucigalpa, Honduras. – La violencia se ensaña cada vez más con la niñez, adolescencia y juventud, una de las poblaciones altamente vulnerables y catalogados como los menos desprotegidos, sólo en el primer trimestre del 2023, Honduras, país centroamericano con altos niveles de violencia, registró la muerte violenta de 151 Niños, Niñas, Adolescentes y Jóvenes (NNAJ).
La Coordinadora de Instituciones Privadas Pro las Niñas, Niños, Adolescentes, Jóvenes y sus Derechos (Coiproden), destaca que en promedio 50 NNAJ están perdiendo la vida de manera violenta en Honduras, que cerró el 2022 con una tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes de 35.8 según la data de la Secretaría de Seguridad.
Honduras atraviesa por un estado de excepción, una medida coercitiva implementada desde el 6 diciembre de 2022 por la presidenta Xiomara Castro con la cual declaró la guerra a la extorsión y delitos conexos, medida que de acuerdo con analistas no ha mostrado resultados tangibles.
“Lamentamos que a pesar de este estado de excepción no logremos tener una reducción Sustancial de muerte violentas”, expresó en entrevista con Criterio.hn, Wilmer Vásquez, director de Coiproden.
Los departamentos con más muertes registradas de niñez, adolescencia y juventud, son Francisco Morazán donde se reportaron 34, Cortés con 28 muertes y Olancho registró 16, todas durante el primer trimestre del 2023.
Coiproden reconoce que en comparación a este mismo periodo del 2022 hubo una reducción del 4 %, sin embargo, aunque es importante como reducción, para Wilmer Vásquez “no es tan significativo” tomando en cuenta la puesta en marcha del estado de excepción.
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NIÑEZ Y JUVENTUD SIN PROTECCIÓN SOCIAL
En las últimas décadas la niñez, adolescencia y juventud han sido víctimas de los actos de violencia, y se han convertido en la presa fácil para la incorporación a maras, pandillas y al crimen organizado.
En los últimos 23 años se han registrado 13 mil 638 muertes de NNAJ menores de 23 años, de acuerdo con el observatorio de Derechos de Niñas, Niños, y Jóvenes de Casa Alianza.
Para el sociólogo Armando Orellana, con estas muertes violentas se pone en evidencia las contradicciones y las confrontaciones que los criminales están haciendo frente a la autoridad y la lucha de los territorios.
En este mismo orden de ideas, el director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) en Honduras, Rolando Sierra, las muertes violentas parten porque no hay una protección inicial para los niños y adolescentes lo que los hace más vulnerables de ser cooptados por el crimen organizado.
Sierra expresó a Criterio.hn “la violencia también es producto de la falta de protección social por parte del gobierno, sigue siendo uno de estos de los principales desafíos”, además refirió que la violencia es uno de los factores caudales de la inmigración, especialmente de niños y jóvenes en el país.
Según el Observatorio de Migraciones Internacionales en Honduras (OMIH), en el 2022 se registraron 14 mil 334 niños, niñas y adolescentes, que representan el 16 % de la población retornada a Honduras.
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CONSEJO NACIONAL DE GARANTÍA DE DERECHOS SIN SER IMPLEMENTADAS
De las muertes registradas en el monitoreo de medios de Coiproden, el 24% son menores de 18 años de edad y el 76% están entre los 19 y 30 años de edad, situación que enciende las alarmas de la sociedad civil y exigen al gobierno de Xiomara Castro poner en marcha el Consejo Nacional del Sistema Integral de Garantía de Derechos de la Niñez y Adolescencia en Honduras (Sigadenah).
Sistema integral aprobado mediante el Decreto Ejecutivo PCM-020-2019, que busca la respuesta inmediata desde la institucionalidad del Estado para garantizar una verdadera protección integral a los derechos de la niñez y adolescencia en el país, pero que aun no ha sido implementado.
Wilmer Vázquez, coordinador del Coiproden lamentó que a pesar que existe un consejo nacional de prevención de violencia y una política de prevención de violencia, la presidenta de la República no ha girado instrucciones –al más alto nivel – para que las diferentes instituciones del Estado puedan comenzar a implementar los lineamientos estratégicos de esta política de prevención.
Vázquez, denunció que en los 14 meses de gobierno de la presidenta Castro, “lamentablemente ha sido imposible poder llegar a ella, ha sido imposible poder colocar el tema de niñez, en la agenda de la presidenta”, además agregó que han tenido obstáculos para “lograr una verdadera coordinación con la institucionalidad” a fin de dar seguimiento a compromisos nacionales e internacionales en materia de niñez y adolescencia.
El sociólogo, Armando Orellana, consideró que para contrarrestar la violencia en contra de la niñez y adolescencia el Estado de Honduras tiene el reto de mejorar las condiciones en los sistemas de educación, salud, vivienda y apoyo a la familia para mejorar las condiciones económicas.
En Honduras, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el 73% de la población vive en la línea de la pobreza y el 53% de la población vive en situación de pobreza extrema.
