Por: Redacción CRITERIO
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El actual gerente de la estatal, Luis René Eveline, tiene un conflicto de más de seis meses que no ha podido resolver y además ni siquiera se presenta a sus labores, han denunciado los empleados, lo que habría obligado al mandatario a intervenir la institucion.
El presidente de Honduras, Juan Hernández en Consejo de Ministros decidió nombrar una Junta Interventora para asumir la administración del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), que se encuentra sumergida en una crisis financiera y sometida por las presiones de los empleados.
Ebal Díaz, secretario ejecutivo del Consejo de Ministros, anunció la decisión del mandatario y detalló sobre el decreto aprobado, donde anunció que la Junta Interventora nombrada tendrá el mandato de resolver todos los problemas suscitados al interior de esta institución tan importante para el pueblo hondureño.
Díaz informó que uno de los problemas de la institución es el alto costo que por el servicio que deben pagar los pobladores de las zonas periféricas de la ciudad caoital, que es incluso hasta 50 veces más elevado en relación con el que cancelan los habitantes de zonas residenciales y de mayor poder adquisitivo
El secretario del gabinete también señaló que muchos inconvenientes que enfrenta el SANAA se han generado por los contratos colectivos que se han firmado entre el sindicato y las administraciones anteriores, bajo condiciones completamente desfavorables para el pueblo hondureño, sin señalar los desaciertos del actual gerente, Luis René Eveline.
Según Díaz esas cargas que se acuerdan o firman en esos contratos colectivos, quien los paga al final, es el pueblo hondureño y ejemplo de ellos es que, al despedir a un empleado de esa institución, a veces se le tiene que pagar hasta 10 veces más el valor del pasivo laboral establecido en el Código de Trabajo.
Detalló que, si los contratos colectivos entre el SANAA y el sindicato se negociaran en base a ley y con el Código de Trabajo, la cancelación del personal tendría un costo de 1,000 millones de lempiras y no de 5 mil millones como es hasta la fecha.
A juicio de Díaz, esas cantidades, además de injustas, no pueden ser pagadas por el pueblo hondureño y por eso se ordenó la intervención de esta institución y la nominación de una Junta Interventora, dejando claro que actaurán contra los derechos de los trabajadores y no contra los gerentes que se prestaron para esas negociaciones colectivas.
El funcionario no adelantó quienes, ni cuantos serán los integrantes de la Junta Interventora, en vista de que primero debe publicarse el decreto en el Diario Oficial La Gaceta.
Los empleados la semana pasada pidieron la destitución del gerente Luis Eveline que se ha ausentado de la dirección y por iniciativa propia iniciaron un proyecto de rescate y recuperar una mora superior a los 400 millones de lempiras.