Tegucigalpa.– El gremio de periodistas, elegirá este sábado a su nuevo representante para el periodo 2023-2025, este proceso de elección, que muchos periodistas esperan sea democrático, marcará el rumbo del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH).
Al abrirse las postulaciones para elegir a las nuevas autoridades del CPH, un movimiento de comunicadores jóvenes lanzó su planilla en busca de rescatar el control del Colegio de Periodistas de Honduras, arrastrado por el sistema de corrupción e impunidad que históricamente ha existido en este gremio y que se evidenció durante la administración del expresidente Juan Orlando Hernández (2014-2018 y 2018-2022), encarcelado en los Estados Unidos a la espera de un juicio bajo cargos de narcotráfico.
En el «Narco Estado», llamado así en Estados Unidos, el gobierno entre 2014 y 2016 pagó en coimas a 77 periodistas, casi 100 millones de Lempiras para «que emitieran opiniones favorables» a Hernández, beneficiando entre ellos a directivos y exdirectivos del CPH entre los que se cuenta al actual presidente del Tribunal de Honor, Juan Carlos Sierra y el dirigente Lesman Aníbal Morazán.
El acto de corrupción antes señalado, fue bautizado por la Unidad Fiscal Especial Contra la Impunidad de la Corrupción del Ministerio Público (Ufecic-MP) como caso Hermes.
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Hernández sancionó además en noviembre de 2019, a pedido del presidente del CPH, entonces, Dagoberto Rodríguez un decreto de impunidad que impide a entes especializados del Estado investigar denunciados episodios de corrupción en el ente de pensiones de los periodistas.
NUEVA GENERACIÓN DE PERIODISTAS
En medio de esta vorágine de irregularidades ha surgido el «Movimiento Nueva Generación de Periodistas», integrado por jóvenes comunicadores, que lanzó una planilla que nomina como presidente al conocido periodista de Radio América, Javier Rivera. Este movimiento, que pretende participar en una asamblea del CPH el sábado, trascendió en las últimas horas.
La presidencia del CPH es ocupada actualmente por Osman Reyes, gerente de Comunicaciones del Sistema Nacional de Emergencias 911, operado por oficiales de cuerpos militares y policiales de investigación e inteligencia. Reyes fue nombrado en el cargo en el 911, que era controlado por Hernández, en julio de 2016.
«Acá los hombres y mujeres que integran la planilla del movimiento Nueva Generación de Periodistas. La cita es este sábado 21 de enero a las 9 de la mañana en el Colegio de Periodistas de Honduras» en Tegucigalpa, se indicó en el mensaje acogido con esperanza por el gremio.
Este movimiento enfrentará la maquinaria del llamado Movimiento Álvaro Contreras que ha forjado fuertes lazos de colaboración con el poder durante gobiernos nacionalistas y liberales que se alternaron la presidencial desde 1982, cuando se puso fin a casi 20 años de regímenes militares de facto.
El CPH es controlado desde su creación por la llamada «vieja guardia» de la gremial representada por Rodrigo Wong Arévalo, Edgardo Vallejo, Adán Elvir y René Zepeda, entre otros y otro grupito de la «nueva guardia» entre los que se cuentan Dagoberto Rodríguez, Elán Reyes, Juan Ramón Mairena, Eduin Romero, Ninfa Arias y Osman Reyes.
Los dirigentes del Colegio de Periodistas de Honduras, tradicionalmente han entrado, en complicidad con los gobiernos de turno, para mantenerse en control de la organización gremial, sometiéndose a los designios de los mandatarios de turno, olvidando la defensa de la libertad de expresión y la integridad de los comunicadores en el ejercicio de su trabajo.
«Una nueva generación de periodistas le apuestan a generar grandes cambios, recuperando la institucionalidad», dijo el periodista Mario Guevara en un Twitter. El periodista Juan Antonio Moncada, conocido como «Benny», de larga trayectoria en radio y exdirectivo del CPH saludó la iniciativa que pretende obtener el control de la gremial, calificándola de «excelente» en un mensaje en Facebook.
El movimiento Nueva Generación de Periodistas, también recibió el respaldo de personas ajenas al gremio con el ex presidenciable Luis Zelaya, quien también a través de su cuenta de Twitrter calificó como “persona decente y correcta” a Javier Rivera.
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CONTROL DEL PARTIDO NACIONAL
La institucionalidad del CPH literalmente ha sido controlada hace dos décadas, por dirigentes ligados al Partido Nacional lo que se pronunció durante el control del poder del extraditado Hernández desde 2010 cuando era presidente del Congreso Nacional y de 2014 a 2022 como presidente del país.
Entre 2010 y 2014 se impuso como presidente a Juan Ramón Mairena, un funcionario público e íntimo colaborador del exalcalde de Tegucigalpa y exdesignado presidencial Ricardo Álvarez, mientras que Eduin Romero, también funcionario público por más de una década desde 2010 en la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), también en la desaparecida Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social y asesor de imagen y comunicación estratégica en el ministerio de Relaciones Exteriores con el excanciller Lisandro Rosales, ocupó la presidencia entre 2015 y 2016.
Y entre 2016 y 2020 fue presidente Dagoberto Rodríguez, exministro de Prensa en el gobierno del presidente nacionalista Ricardo Maduro, y entre 2020 y 2022 Osman Reyes, al igual que Romero, un protegido de Lisandro Rosales que lo nombró como gerente de comunicaciones del Sistema Nacional de Emergencias 911.
Los vínculos de los directivos con Hernández y el Partido Nacional no solo son de trabajo, también se trenzaron en el ámbito del sistema de corrupción e impunidad construido durante el llamado «narcoestado», en el que el presidente del Tribunal de Honor del Colegio de Periodistas, Juan Carlos Sierra, recibió 1,240,000.00 lempiras y el directivo Lesman Aníbal Morazán 1,400,000.00 lempiras en el «Caso Hermes», según el requerimiento presentado en los tribunales por el fiscal anticorrupción, Luis Javier Santos.
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Hay que recordar, que Rodríguez y sus compañeros directivos Ninfa Arias, Eduin Romero y Osman Reyes le pidieron al Congreso la aprobación del decreto 113-2019, que exime al ente de pensiones de la investigación de corrupción por parte de entes especializados. El inconstitucional decreto de impunidad fue sancionado en noviembre de ese año por el expresidente Hernández a pedido de los directivos del CPH.
El emblemático y cuestionado Movimiento Álvaro Contreras será representado por Osman Reyes, quien, con su reelección, busca su segundo periodo al mando del CPH.
Sin duda alguna, el ambiente está lleno de expectativas, ya que un gran número de periodistas no pierden la esperanza de refrescar la imagen del Colegio de Periodistas de Honduras, donde la defensa de la libertad de expresión y la integridad de los comunicadores sea una prioridad.
