Por: Redacción CRITERIO.HN
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Lo que ha marcado este proceso electoral primario y lo ha hecho tan conflictivo es que el gobernante Juan Hernández quiere dejar su estructura de poder, dijo el analista político Raúl Alvarado.
“Como a algunos medicamentos, al presidente Hernández le está llegando la fecha de vencimiento y eso a él lo preocupa”, declaró el analista a radio Progreso.
“Todos los presidentes cuando entregan la banda se van para su casa tranquilos, algunos a querer seguir mandando, y este no se va a ir así, por eso quiere dejar su estructura de poder que lo proteja, que lo salvaguarde y, si es posible, que le dé la impunidad”, añadió en alusión a los señalamientos de narcotráfico contra el gobernante y la perspectiva de un juicio a futuro en Estados Unidos.
No obstante, con el hecho de que Hernández tenga a un candidato directo, “ya pierde el 40 por ciento de su poder”.
Para Pineda Alvarado, “vamos por la ruta correcta”, y las cosas van a empezar a cambiar “siempre y cuando la gente buena de este país abandone su área de confort y empiece a arriesgarse un poco porque si no, lo que nos espera el otro año es el abismo, la desilusión social y la crisis”.
Sobre los resultados de estas elecciones primarias, en las que varios candidatos se han autoproclamado vencedores, opinó que “hay mucho trayecto que recorrer todavía y yo creo que nadie está legitimado para alzar las campanas al vuelo”.
El analista dijo que independientemente de que Luis Zelaya sea o no el candidato oficial del Partido Liberal, hará una alianza con Salvador Nasralla porque “ellos anteponen el interés de que haya un relevo, que haya un cambio en la estructura de gobierno, a sus propias ambiciones para ser candidatos, allí ellos están claros”.
Mientras que al partido Libertad y Refundación (Libre) “solo les queda la alianza con Yani (Rosenthal)”.
Recordó que en las últimas dos elecciones, Libre ha sacado 460 mil votos y “con eso no llega a ningún lado, (…) lo que va a sacar son trece diputados” en una elección general.
Lo que sí está claro para Pineda Alvarado es, primero, la necesidad de una reforma política que debe darse en el primer año del próximo gobierno; segundo, que van a haber alianzas; y tercero, que es necesario cambiar el mecanismo de financiamiento de las campañas, que tienen que ser baratas.
