Por: Redacción CRITERIO.HN
San Pedro Sula.- La captura de un hombre ligado al tráfico transaccional de drogas ha puesto de manifiesto nuevamente la incapacidad de los operadores de justicia en Honduras para investigar y castigar el tráfico de estupefacientes.
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José del Transito García Teruel, alias «El Pipo», originario de Florida, Copán, fue capturado este domingo por ser considerado uno de los principales cabecillas de una estructura criminal dedicada al tráfico de trasnacional de drogas que opera en Honduras, Venezuela, Colombia, México y Estados Unidos.
La detención se dio en la colonia Sitrathel de San Pedro Sula, Cortés, zona norte de Honduras. García Teruel se encontraba prófugo de la justicia hondureña y había sido solicitado en extradición por una Corte Federal del Distrito Este de Virginia, Estados Unidos.
El abogado Celso Alvarado, experto en temas de seguridad y narcotráfico, piensa que estamos ante un cuadro preocupante en temas de narcotráfico y corrupción y que es un hecho comprobado que algunos diputados hondureños han sido partícipes de la aprobación de leyes en materia de seguridad y al mismo tiempo estuvieron traficando drogas a EE. UU., siendo un ejemplo, el exdiputado Juan Antonio “Tony” Hernández -hermano del presidente, Juan Hernández, declarado culpable en octubre de 2019 por la Corte del Distrito Sur de Nueva York por cuatro cargos de narcotráfico.
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Alvarado es del criterio que los narcotraficantes están siendo extraditados porque la justicia hondureña y el Ministerio Público no quieren investigar y no quieren acusar. El Poder Judicial tiene que hacer todo un trámite para extraditar, es a todas luces la materialización de una negación de sancionar, dice.
Honduras aprobó un nuevo Código Penal que reduce las penas para los narcotraficantes. «Eso es gravísimo, porque deberían ser las autoridades nacionales las que juzguen y sancionen. Si nosotros, hipotéticamente suprimimos esa serie de eslabones, el resultado que tenemos es impunidad. El concepto de impunidad es la negativa del Estado de investigar, sancionar, castigar y reparar a las víctimas», señala Alvarado.
García Teruel era considerado uno de los hombres de confianza del narcotraficante Alex Adán Montes Bobadilla, quien fue cabecilla del cártel del Atlántico y supuestamente falleció de un paro cardíaco en 2014.
Un juez de la Corte Suprema de Justicia determinará si García Teruel es extraditado a EE. UU por el delito de conspiración para distribuir cinco kilogramos o más de una mezcla y sustancia que contiene una cantidad detectable de cocaína, con la intención y sabiendo que dicha sustancia sería importada ilegalmente hacia los Estados Unidos, en violación del Título 21 del Código de los Estados Unidos de América.
