Los 30 millones de AMLO y el suplicio del pueblo de Honduras

Por: Rodolfo Pastor Fasquelle                           

Desde hace tiempo, ante las dictaduras, México dio refugio y oportunidades a decenas de miles de istmeños. Pelota cuadrada aparte, los centroamericanos en general amamos a México. Otrora, cuando había, preferíamos el cine mexicano, y todavía hoy la música y la lucha libre y los cómics. Del Plan Puebla Panamá se sabe muy poco y quizás no interesan los macroproyectos. Pero, aunque aún tiene más pobreza de la que debería, también goza de una de las veinte economías más grandes del mundo y puede cooperar más, México que no ha tenido desde los 1930s una política hacia Centroamérica. Que pueda ser de beneficio mutuo. ¡No alcanzó a serlo Contadora!

 Hace no muchos años, México imprimió libros de texto para los colegios de Centroamérica en sus inmensas imprentas públicas. Para mis adentros yo, pensé ¡Caray México es padrino de una veintena de escuelas y colegios hondureños a los que, todos los años, envía libros y materiales educativos, de estos que pronto serán obsoletos! ¡Podría -sin gastar dólares- capitalizar sus tecnologías educativas en una donación de Televisión educativa y cultural, y servicios de conexión electrónica para nuestras escuelas, colegios y universidades! Poner a disposición de los graduados de nuestros colegios públicos becas para sus institutos tecnológicos, escuelas agrícolas y de las artes, y para sus mejores universidades. Así se ganaría otro millón de amigos, o varios porque, con los que andan fuera, rondamos los diez. Ahora, la diplomacia mexicana es centenaria, data de cuando Montezuma recibió a Cortes con copal.

 Con sahumerio, el Canciller Marcelo Ebrard presentó a los dos sonrientes mandatarios en la ceremonia en Veracruz, en la cual se anunció que México donará a Honduras $30 millones para generación de empleo. ¡Invertir en esos países que expulsan gente –recordó, Ebrard-  fue, desde el principio de la crisis migratoria, la propuesta de México! Que quiere ser ejemplo. ¡Es su llamado al mundo!  También en México hubo quien desestimó la donación. No todos son igual de nobles. Hay xenófobos que AMLO repudia en forma enérgica, mientras Trump los alborota.

Nota relacionada México se convierte en muro de defensa de Trump

Aquí el anuncio se presenta antier como un espaldarazo al líder en la primera plana de los medios, los mismos que ya hacen la propaganda del régimen a solas, ya que Facebook extinguió antier los miles de falsos perfiles y cientos de páginas fake de JJ-JOH, administradas por una empresa israelí, con la que también denostaba a sus opositores, propagando infundios, el cachureco.

Recuerdo como después del golpe Felipe Calderón dejó en el aire la visita oficial, después que Mel le mandó un saludo desde el Teatro de la Ciudad a Andrés Manuel. A cambio aquí los nuestros han querido convertir esta donación en alta traición y razón para enemistarse  con AMLO y con México. Se insinúa que ese dinero lo gastará JOH en más soldados y gas lacrimógeno. El ex diputado Gilberto Ríos, el Coordinador Nacional de LIBRE, Mel y su Secretario Gerardo Torres Z, publicaron declaraciones primarias, acusando a México de financiar la dictadura y la represión del pueblo, por obediencia a Trump. Un problema, solamente leen los titulares. ¿Da pereza pensar más allá del tuit?

 En efecto, la prensa allá y aquí manejó la noticia con poca seriedad. Televisa publicó que con ese aporte se crearían 200 mil empleos. Un poco más modesto, Diario El Heraldo de Tegucigalpa tituló en primera plana que, con ese mismo dinero se generarían 20 mil empleos.  En la práctica, hoy crear un empleo nuevo sostenible y productivo cuesta 50 mil dólares y 30 millones alcanzarían a crear unos 600 empleos de calidad.  No trascendieron los términos de la donación, sus destinos específicos, formas de desembolso y administración hasta que se explicó hoy que se estaba habilitando con ese dinero a la Agencia Mexicana de Cooperación (AMEXCID) que va a ejecutar el proyecto. Y el contraste no puede ser más tieso, craso y crudo.

 Mientras en México él Peje -muy querido- acepta su límite en un régimen republicano, aquí se ha subordinado a todos los poderes del estado. La Cuarta Transformación de AMLO rechaza a la política neoliberal y combate la desigualdad, mientras que el gobierno sucedáneo del golpe de 2009 es el abanderado de las políticas neoliberales en la región, y conduce el país con mayor desigualdad del Continente. El de AMLO es un gobierno de austeridad, mientras que el de JOH, desde 2010, ha desviado miles de millones y comprado ¡casi $350 millones en equipo militar que no necesita el país! El de JOH es un partido clientelar minoritario, que llega al poder por golpe y se queda por fraude, el de AMLO es un partido popular que luchó para superar el fraude del oficialismo. De modo que en Honduras, noble cuna de F. Morazán, igual los maestros que los médicos, los obreros y los estudiantes, los afrodescendientes y los indígenas gritan en las calles indignados, No es mi Presidente, es un delincuente.

 ¿Cuál es el trasfondo de la donación? ¿Será que México piensa cosechar futuros réditos de esta inversión, confiando en que doña Alicia Barcena, B.C. mexicana y Secretaria Ejecutiva de CEPAL declara (contra los datos que publica su propia organización) que la economía de Honduras es una cornucopia? ¿AMLO calcula ahorrar así parte de que lo obliga a gastar la militarización de la frontera Sur?  ¿Cuestión de pragmatismo y realpolitik? ¿Que pretende la nueva diplomacia de un México reformista en la Honduras de JOH? Estudio los documentos, atiendo.

Escucho con atención el discurso de AMLO en el evento de Minatitlan. Habló con sencillez, como amigo de la gente, hablo de historia, mucho y de las transformaciones históricas. Recordó a su auditorio que Juárez fue un maestro de austeridad, y luchó contra el conservadurismo aristocrático, que la Revolución Mexicana batalló bajo el lema de sufragio efectivo (contra el fraude) y la No Reelección. Contra el régimen de Porfirio Díaz que llegó jurando la Constitución y se quedó 34 años al mando de un país en que se explotaba sin freno. Que lo que hay que perpetuar son las respuestas a los problemas de la gente, pero que no hay que darles la espalda a los pobres y a los jóvenes. Explicó como su combate contra el derroche, la corrupción, el desvío y hurto de recursos públicos le han dado dinero para generar –allá- 200 mil empleos en un proyecto masivo de reforestación (Sembrando Vida) y de regeneración ambiental, semejante al que propusimos en el programa de gobierno de Xiomara y en un proyecto análogo al que -aquí en tiempo de Mel- se llamó mi primer empleo. Y dijo que con este fondo semilla de $30 millones quería proponerle hacer lo mismo a Juan O. Hernández, quien no sabía qué hacer para contener la mueca, lucía incómodo en la tarima jarocha, cual espécimen de colección en la red de un coleccionista de mariposas.