Por: Redacción CRITERIO
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Tras cuatro días de haber iniciado, la huelga de hambre se ha fortalecido con la adhesión de más “indignados”, que continúan exigiendo la instalación de la Comisión Internacional Contra la Impunidad-Honduras (CICIH).
La estrategia para presionar al gobierno de Juan Hernández para que acceda a la instalación del órgano, que sería respaldado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), comenzó el pasado lunes en las cercanías de Casa de Gobierno, con la partición de los jóvenes lideres de la “Oposición Indignada”, Ariel Varela y Miguel Briceño.
Sin embargo con el transcurso de las horas se han sumado cuatro jóvenes más y se ha anunciado la adhesión de miembros del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (SITRAUNAH), que no descartan incorporarse al movimiento social, según lo estableció Juan Rafael Durón.
Erlin Mejía, un joven oriundo de la ciudad de Danlí, El Paraíso, al oriente de Honduras, quien pese a su discapacidad física y de andar en silla de ruedas, ha emprendido la lucha.
Mejía fue evaluado por médicos y se le recomendó que no participara en la huelga porque padece de epilepsia, pero se le aconsejó que hiciera un ayuno parcial, por lo que bajo esa condición se mantiene en la acampada.
SE SUMAN MÁS
La huelga de hambre se fortaleció el martes con la adhesión de dos jóvenes más: Gerson Suazo, procedente de la ciudad de Santa Bárbara, del departamento del mismo nombre y German Ayala de la ciudad de San Pedro Sula.
Asimismo este jueves se unió Luis Munguía, un empleado suspendido de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel), que aclaró que su participación no es por haber sido suspendido de su trabajo, sino porque al igual que otros hondureños ha sido víctima de la mala atención en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), producto del saqueo a sus finanzas.
Ahondó que esta semana sus hijos se enfermaron de chincungunya y confirmó la verdadera situación del IHSS, pues al ir en busca de atención médica no se les proporcionó ningún tipo de medicamentos e incluso no había ni acetaminofén.
Los jóvenes denunciaron ante CRITERIO que el gobierno les está violentando sus derechos porque no se les permite unirse a sus demás compañeros, que se encuentran a unos 50 metros de la sede del Poder Ejecutivo, porque no se les permitió ubicarse al frente, tal y como lo habían planificado.
En virtud que una valla acordonada por policías y militares, les impide unirse a Varela y a Briceño, los muchachos no han tenido otra alternativa, más que la de ubicarse en una esquina donde funciona un autobanco.
Bajo una carpa, los jóvenes coincidieron en que su participación en la huelga de hambre, es por una lucha que busca la instalación de la CICIH, para terminar con la corrupción e impunidad que se ha entronizado en las instituciones del Estado de Honduras.
SAN PEDRO SULA
La huelga de hambre se ha replicado en la ciudad de San Pedro Sula, al norte de Honduras, con un ayuno en el que participa un grupo de jóvenes sampedranos y miembros del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia (MADJ).
Los indignados que están en ayuno son el diputado al Congreso Nacional por el Partido Libertad y Refundación (Libre) José Luis Cruz, los docentes Ruy Díaz y Patricia Murillo y los estudiantes universitarios Bladimir Altamirano, Arthur Pajulio y Claudia Arita, miembros del Frente de Reforma Universitaria (FRU) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras en el Valle de Sula (Unah-vs).
