Elecciones primarias con genuinas opciones ciudadanas

Por: Rodolfo Pastor Fasquelle

La publicidad monstruosa que nos ha entapiado el paisaje  en las ciudades y atiborra las ondas hertzianas con jingles y spots (que representan –en plata contante y sonante– fortunas para los formatos y los publicistas) ya dejan ver la importancia trascendental del evento. De hoy en ocho se celebrarán las elecciones primarias de los partidos políticos más grandes.

Todos somos responsables de que este ejercicio cívico sea transparente reflejo de la voluntad de los ciudadanos afiliados por distintas razones (tradición y convicción,  enojo o  atracción personal) en esos partidos. Y todos nos merecemos el respeto de los adversarios y de los indiferentes. Porque, por vía de las elecciones somos responsables conjuntamente de lo que ha sucedido y de lo que sucederá con el gobierno. Sin duda que hay hartazgo por el derramamiento de sangre y el abuso de poder y autoridad, por las dificultades económicas cotidianas y la inestabilidad de la dictadura hoy reforzada con el poder de vida y muerte de JOH. 

Hay poco que elegir en el Partido Nacional, que ciertamente recoge entre todos sus simpatizantes a un tercio de los electores y que esta fortalecido por ocho años en el poder y control de los recursos públicos. Dos movimientos impulsan la reelección del presidente en funciones Juan Hernández, Juan sin miedo que también disfruta del apoyo declarado del estadounidense. Y asimismo tiene el soporte del bloque mayor de la elite, aunque ya no todos los empresarios están con él como antes y varios aun refunfuñan de un chantaje. En sus planillas van poderosos caballeros de la Banca y del comercio, y los cuadros mas antiguos del PN como F. Irías, que le clava una bandera mas a Pico Bonito y el menos Oswaldo (Cervecitas) Ramos con quien nadie se pierde. A los demás solo les veo los afiches ahí en las invasiones. Aquí en San Pedro los cachos postulan al alcalde actual Calidonio que pronto va a poder cumplir sus promesas y al Dr. Jaar. Quizás lo más interesante ahí sin embargo es un malestar en la base. Los cachurecos desafectos que son muchos –no solo por el tema de la reelección ilegal si no también por la marginación en su partido– tienen como  recursos alternativos tanto la opción del Chino, como la del voto  en blanco, la del voto nulo y la de la abstención… que podrían ganarle sumados a sus candidaturas oficialistas. Es mentira. Nadie sabe como será el voto ahí.

Los LIBRES tenemos la mayor gama de opciones, tan amplia que a primera vista resulta desconcertante, por la oferta de nueve movimientos internos. Aunque siete de esos nos postulan a Xiomara otros proponen sus propias formulas presidenciales, mas de media docena de aspirantes a las candidaturas a alcalde de las ciudades y, por ejemplo, unos 180 precandidatos de diputados para el Departamento de Cortes, entre quienes solo es posible escoger, intercambiando entre nosotros las informaciones y escudriñando conjuntamente sus meritos y debilidades.

He publicado mis preferencias más o menos razonadas y por supuesto que salgo perdiendo, porque al endorsar a 15 aspirantes a la diputación, 165 se quedan enojados y ni siquiera los recomendados me defienden. Cumplo con mi deber de ciudadano que quiere incidir, con miras claras a la necesidad de tener muy buena oferta electoral en las generales en que la primera competencia será de los propios aliados. En todo caso LIBRE va en un ejercicio de claridad, a escoger a los verdaderos líderes y liderezas que son los que van a inspirar y a mover el voto y en el  cual ejercicio se premiará la apertura democrática y la fidelidad, mientras se deduce responsabilidad a los dudosos. Y se capacita.

Los liberales tienen cinco opciones que conjuntan a los viejos cuadros residuales del Partido, mi amigo 1. Carlos Montoya, alias montoyita por lo chiquito, quien siempre he dicho que es el mas astuto, 2. Gabriela Núñez (la Batichica) con apoyo de veteranos como Eliseo Castro y Elvin Santos. Y 3. Impulsado por los lideres principales de la derecha, C. Flores Facusse y R. Micheletti, Luis Zelaya (a quien también llaman el Pitcher de La Embajada), que ha declarado que bajo ninguna circunstancia se integraría a una alianza de oposición y quien lanza con fuerza para San Pedro al amigo porteño M. Lara y a los mismos diputados de antes. Y luego dos jóvenes retadores, 4.Enrique (Kike) Ortez, de tercera generación con el mismo nombre, que postula para alcalde al joven profesionista  P. Anastasiu y 5. Eduardo Martel, de segunda generación con su apellido  que tiene al candidato a alcalde mas joven, el artista Luis Chávez. Y todavía hay vigor ahí para que los liberales emprendan una renovación impostergable que solo se lograría si prevalecieran o avanzaran lo suficiente los retos. En todo caso, siempre y cuando estén capacitadas las alternativas, la competencia dentro del P.L. mantendrá sus resultados ajustados a la intención del elector.

Nadie en cambio ni siquiera Ricardo Álvarez podrá ya garantizar que los oficialistas del Partido Nacional, prácticamente solos en sus urnas, no repetirán ahí el fraude que esconda la reacción adversa de la gente. Para ellos el problema va a seguir estando ahí el día después, cuando despierte el dinosaurio. Todos los ciudadanos pueden ir a votar a las primarias a las mesas que les corresponden e implementar ahí cada uno su propia estrategia política íntima, siempre y cuando respeten y se comprometan con las consecuencias.  Aunque se distorsionen las proporciones, las estrategias sumadas de todos van a definir ese nuevo día, ese nuevo punto de partida.  Algunas cosas desde ya anticipamos. Desde la culminación de las primarias hasta la celebración -ojala- de las elecciones generales, Honduras vivirá una nueva fase álgida de su historia contemporánea, que ofrecerá un gran potencial democrático y sin embargo contendrá graves peligros de involución.

Esa será una fase de reformas o conflictos previos, de apertura civilizada o enfrentamiento sin precedente. No se extrañen de que anden desvelados unos y nerviosos otros. Asistamos a las urnas primarias defendiendo con firmeza nuestro derecho a pensar y escoger entre las opciones que nos quedan, con la esperanza de impulsar lo mejor, con fe en nuestro pueblo y especialmente en los jóvenes. Se oyen y se sienten los pasos del gran dragón de la conciencia de la masa, que despierta, completamente inmune a las balas del fusil oficial y a la publicidad mercantil enajenada y sin sentido. Suerte Honduras.