Tegucigalpa. – En los últimos 16 años un total de 90 profesionales de la comunicación han sido víctimas de la violencia homicida en Honduras y el 91.1% de las muertes fueron con arma de fuego, según el Observatorio Nacional de la Violencia (ONV).
En el marco de la celebración del día del periodista en Honduras que se celebró el pasado 25 de mayo, el Observatorio Nacional de la Violencia (ONV) del Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (IUDPAS) por medio de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) presentó un boletín infográfico No.1 sobre homicidios contra periodistas, comunicadores sociales y dueños de medios en Honduras en el periodo 2005 a 2020.
Los datos preliminares son el resultado del proceso de validación que el ONV realizó con fuentes oficiales: Policía Nacional (Dirección Nacional de Telemática y la Dirección Nacional de Investigaciones) y el Ministerio Público por medio de la Dirección General de Medicina Forense, instituciones que proporcionaron información sobre muertes por causa externa, registrados de levantamientos y autopsias realizadas en todo el país.
Según el sexo, los datos muestran que el 95.6% eran hombres y el 4.4% mujeres. Además, que el 91.1% de las muertes fueron con arma de fuego.
La Declaración de Chapultepec suscrita por Honduras en el 2010 establece que “el asesinato, el terrorismo, el secuestro, las presiones, la intimidación, la prisión injusta de los periodistas, la destrucción material de los medios de comunicación la violencia de cualquier tipo y la impunidad de los agresores, coartan severamente la libertad de expresión y de prensa. Estos actos deben ser investigados con prontitud y sancionados con severidad”.
Sin embargo, en los últimos 16 años, 90 periodistas y comunicadores han sido víctimas de la violencia homicida en Honduras, contraviniendo lo establecido en ese principio No.4 de la Declaración de Chapultepec.
Asimismo, según los datos los departamentos que muestran el mayor número de homicidios contra periodistas y comunicadores sociales son Cortés al norte de Honduras y Francisco Morazán en la zona central del país.
El ONV presentó el infográfico como evidencia de la situación que vive el gremio periodístico y por la necesidad de que la memoria histórica no olvide a quienes, en el ejercicio de sus funciones, perdieron la vida violentamente.
Además, ONV hace un llamado al gobierno, a las instituciones del sistema de seguridad y justicia y al Congreso Nacional para que establezcan acciones concretas y regulaciones afectivas que acaben con la impunidad de estos hechos violentos.
De los periodistas asesinados, el 97% de los casos siguen impunes en el país.
