Tegucigalpa.- En Honduras más del 50% de la población son mujeres, quienes han incursionado en las diferentes áreas: unas destacan como trabajadoras, estudiantes, médicos, ingenieras, periodistas, abogadas, entre otras profesiones, oficios y actividades. Todas mueven la economía del país, pero dejan todo atrás, para buscar mejores condiciones de vida en otro país.
Esta mujer es la migrante, aquella que lleva en su mente trabajar “de lo que sea” al llegar a aquella extraña nación, pero poco interesan los retos a los que se enfrentó en la ruta migratoria.
De acuerdo a Médicos sin Fronteras seis de cada diez mujeres migrantes sufren abusos en su trayecto a México, quienes deben salir del triángulo norte de Centroamérica, es decir, El Salvador, Honduras y Guatemala.
Un estudio realizado por Acción Joven Honduras, destaca que las mujeres migrantes se exponen a mayores riesgos de violencia, abuso y coacción sexual, a contagios de infecciones de transmisión sexual (ITS), incluido el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y otras son víctimas de explotación sexual.
Jinna Rosales coordinadora de Acción Joven Honduras, en entrevista con Criterio.hn, mencionó que a través del estudio Situación de la Salud Sexual y Reproductiva de las Mujeres, Adolescentes y Jóvenes Migrantes Hondureñas en Tránsito en el Año 2022, uno de las principales razones por las que las mujeres emprenden el viaje es para mejorar sus condiciones de vida y por la violencia de género.
Sin embargo, para Itsmania Platero, defensora de derechos de los migrantes, la mujer permanece “invisible y es marcada la situación de vulnerabilidad” en la ruta migratoria.
Honduras registra un 73% de la población en condiciones de pobreza y el 53% vive en situación de pobreza extrema, datos de acuerdo con el Instituto Naciones de Estadística (INE).
También se destaca que la población de mujeres hasta el 2022, son 4,927,870, es decir un 51.3 %, detallan las cifras proporcionadas del INE con apoyo de la maestría en Demografía y Desarrollo de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
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MUJERES MIGRANTES Y SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA
La ruta migratoria que emprenden las mujeres hondureñas hacia los Estado Unidos es por Guatemala y México, exponiéndose a diversos riesgos entre ellos la pérdida de garantía de los derechos humanos y por ende los derechos sexuales y reproductivos.
De acuerdo a datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), solo en el 2022 se registraron 17 mil 164 mujeres y 6 mil 408 niñas hondureñas en la travesía hacia el país norteamericano.
En el camino a Estados Unidos, las mujeres migrantes deben cubrir necesidades básicas como comer, dormir, higiene o seguridad, al igual que un hombre.
Sin embargo, por la naturaleza de ser mujer, se enfrenta a necesidades en torno a su salud sexual y reproductiva, como ser la menstruación, uso de métodos anticonceptivos, y protección ITS.
De acuerdo con Nicola Graviano, Organización Internacional para las Migraciones (OIM) Honduras y El Salvador, en la intervención que desarrolla este organismo hay una atención con enfoque de género que permite atender a mujeres y niñas migrantes.
Estamos atentos a que haya zonas para las mujeres y facilitar el intercambio con psicologías y poder brindarles la atención, (…) velamos que las necesidades de mujeres y niñas estén reconocidas y, de esta manera, sus derechos sean respetados.
Algunas migrantes tienen condiciones diferenciadas como mujer madre o embarazada, mujer víctima de violencia doméstica, mujer víctima de abuso sexual y mujer víctima de extorsión, entre otras.
Rosales, exteriorizó que de las principales razones por las que las mujeres deciden irse del país es por violencia de género, que tiene que ver con violencia sexual, violencia doméstica y embarazo en adolescentes.
“Estas mujeres salen huyendo porque son víctimas de violencia de género y lamentablemente se exponen a contextos de más violencia”.
Ante esto Rosales recriminó “si el Estado no brinda ni lo mínimo en garantías de derechos humanos, también es responsable de la situación que estas afrontan”.
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VIOLENCIA, OTRA RAZÓN PARA MIGRAR
En el 2022, en Honduras perdieron la vida de manera violenta 299 mujeres, datos el Observatorio Nacional de la Violencia (ONV) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), esto indica que cada 29 horas y 18 minutos asesinaron a una mujer.
En ese sentido, Platero refirió que las mujeres que se ven obligadas al desplazamiento es porque no obtienen respuesta de las autoridades al ser víctimas de violencia y presentar las denuncias.
“Cuando la mujer siente que no hay repuesta, que está en peligro de muerte y que nadie puede ayudarla, entonces no le queda de otra que irse de Honduras”, apuntó.
Ante este panorama, Rosales señaló que muchas de las mujeres salen huyendo por la violencia a la que están expuestas y por la falta de respuesta de los entes de justicia en el país.
Graviano, en entrevista con Criterio.hn, destacó que dentro de las causas de la migración están los motivos económicos y de seguridad. “Hay un abanico bastante diferenciado de factores que se suman, muchas veces el uno y el otro y que hacen que la respuesta sea compleja”, enfatizó.
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Ante esta situación, el Estado de Honduras debe priorizar la situación de violencia que enfrenta la mujer hondureña y se desarrollar políticas públicas de prevención y seguridad ante la violencia de género, una de las causas principales de la migración y desplazamiento forzado.
