Al menos unos 70 productos incrementaron su costo en temporada navideña, que representa un incremento de 700 a 800 lempiras, ubicando el costo de la canasta básica en más de 12,800 lempiras
Tegucigalpa, Honduras. – En diciembre, la mayoría de hogares hondureños tienen un olor particular entre cominos, carnes condimentadas, especias olorosas y dulces. Sin embargo, el alto costo de algunos productos de temporada limita la elaboración de los mismos.
“Todo está caro, los precios están bastante elevados y a veces sale mejor comprar los tamalitos, aunque en menor cantidad, para no perder la costumbre”, expresó Jasmín Galo, ciudadana que se acerca cada viernes a la feria del agricultor en Tegucigalpa para hacer sus respectivas compras de despensa.
En este mercado, se reúnen –todos los viernes— los agricultores y artesanos de las comunidades cercanas a la capital de Honduras, lugar al que los capitalinos se acercan en busca de pollo, carnes, mariscos y principalmente verduras y legumbres.
Jasmín Galo, mientras conversó con Criterio.hn, señaló que en los últimos meses el costo de los productos ha incrementado, especialmente los de temporada, situación que la ha obligado a disminuir la cantidad de sus compras.
La carne de cerdo, uno de los principales productos que consumen las familias hondureñas para las fiestas decembrinas, en las últimas dos semanas tuvo un incremento de dos lempiras, de costar 62 lempiras ahora los consumidores tienen que pagar 65 por cada libra.
De acuerdo con el carnicero, Abel Pacheco, los proveedores de la carne de cerdo “se aprovechan porque es navidad y las personas buscan más este producto”. Además, añadió que dicho incremento se queda establecido en el mercado, afectando la economía de los hondureños.
Mientras la carne de cerdo incrementó su precio, otros productos como el pollo, mantienen su costo, asi informó al Criterio.hn, Edilson Merlo, joven que trabaja en un establecimiento de pollo y derivados, quien detalló que la libra está a 31 lempiras.
VENDEDORES SE APROVECHAN
Los nacatamales y las torrejas son de los alimentos que no pueden faltar en la mesa de los hondureños y hondureñas, pero el costo de la materia prima hace más difícil la elaboración de estos.
En el recorrido por el mercado capitalino, las hojas para nacatamales, huevos, pan de bolillo y rapaduras de dulce son los más visibles.
Con relación al costo de los huevos, Marco Varela, vicepresidente de la Asociación de Productores y Artesanos de Tegucigalpa, señaló que el precio se mantiene estable a 122 lempiras el cartón de 30 unidades, en cambio en el mercado Zonal Belén, su costo oscila entre los 140 y 150 lempiras.
“Nos mantenemos vigilantes para que el precio no se eleve y no se venda más de un cartón de huevos a cada ciudadano”, refirió Marco Varela, además detalló que hay personas que se oponen a la medida de vender solo un cartón de huevos por personas.
Las hojas para los nacatamales, incrementaron su costo, de costar 15 lempiras, el rollo para unos cinco nacatamales, ahora cuesta L 25.
Con relación al pan de bolillo, según Fanny Carrasco, panadera artesanal, originaria de Sabanagrande, el costo varía por la manera de elaboración y también por el aprovechamiento de algunos vendedores.
“Debería ser vigilado el precio de los productos para que no se aprovechen de los compradores”, expresó Fanny Carrasco. En su puesto de pan artesanal, se observaban rosquillas, quesadillas, semitas y otra variedad de pan, esta actividad les ha permitido subsistir a ella y a su familia por más de 25 años.
FACTORES QUE INFLUYEN EN EL INCREMENTO DE PRECIOS
Para el economista, Martin Barahona, en Honduras –en la temporada navideña— la dinámica de la oferta y la demanda es uno de los factores que influyen en el incremento de los precios, dinámica que se acompaña con la especulación y el “aprovechamiento indecoroso” de ciertos comerciantes.
Además, señaló en entrevista con Criterio.hn que otro de los factores que generan el alza de los precios, es “que no hay una buena presencia de las instituciones protectoras de los consumidores”.
El 20 de diciembre, la Fiscalía Especial de Protección al Consumidor y Adulto Mayor (Fepcam), anunció la Operación Salus IX, a fin de garantizar estabilidad y evitar alzas en precios de productos de la canasta básica.
De acuerdo con el comunicado girado por el Ministerio Público (MP), la operación se ejecuta en conjunto con la Agencia de Regulación Sanitaria (ARSA) en los diferentes mercados, supermercados y establecimientos bancarios.
Adalid Irías, presidente de la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica de Honduras (Adecabah), durante la temporada navideña alrededor de unos 70 productos incrementaron su costo, incremento de al menos 700 a 800 lempiras. Es decir, la canasta básica de costar en el mes de octubre 12,091.80, según el reporte estadístico de la Secretaría de Trabajo y Seguridad Social (STSS), ahora tiene un costo de 12,891.80.
De acuerdo con Irías, dicho incremento también se debe a los precios de los carburantes, la devaluación de la moneda y la escasez de venta de dólares en los establecimientos bancarios.
El incremento de la canasta básica golpea de manera directa al obrero común que devenga entre L. 9,000 y 10,000. “La canasta básica está cerrando en L 13,000, eso significa que el obrero no puede satisfacer sus necesidades básicas fundamentales”, lamentó Irias.
Para el economista Martin Barahona, en Honduras al no funcionar apropiadamente las leyes del mercado, es decir la ley de oferta y demanda, cuando se incrementan estos precios –artificial y especulativa—, “hay una inelasticidad, una rigidez, en los precios que no vuelven a bajar al punto o al nivel original”.
En ese sentido, Adalid Irías es de la opinión que se debe crear una política pública que garantice la tutela de la canasta básica para que sea accesible a la población.
Por su parte, el economista Martin Barahona, considera que debe haber un trabajo integral de diversas instituciones para ejercer tareas de monitoreo y regulación de monopolios y oligopolios.
Entre esas instituciones, que, de acuerdo con Barahona, deben fortalecer su trabajo están: el Ministerio Público, la Secretaría de Desarrollo Económico, la Comisión de defensa y promoción de la competencia, que a criterio de Barahona es “una institución que solo consume presupuesto”.
HONDURAS DEBE REPOTENCIAR PRODUCCIÓN AGRÍCOLA
Tomates, cebollas, chiles, zanahorias, papas, son algunos de los productos vegetales y legumbres que han incrementado su costo
En el recorrido, dialogamos con Carlos Valeriano, campesino de 68 años originario de Santa Cruz de Soroguara, al norte de la capital. En su pequeño puesto de venta de verduras, con una sonrisa amena atienden a los y las compradoras que se acercan.
Para Carlos Valeriano, los productores son un pilar fundamental en la alimentación de los hondureños. “Pidamos a Dios que los productores, no nos vallamos a cansar de trabajar, porque si no, quién va a sembrar las semillitas”, expresó, mientras acomodaba unos manojos de cebolla.
Por otro lado, Ramón Zelaya, que viaja desde Piedra Grande, Tatumbla, al oriente del país para vender sus verduras, unas producidas por él y otras que compra a sus compañeros agricultores de la zona, no desconoce el incremento de precio, en ese sentido, comentó que el caso de las verduras y legumbres “cuando lo precios suben es por la falta de producción y no porque uno se aproveche”, dijo.
Además, Ramón Zelaya, hizo un llamado urgente a las autoridades estatales a poner su mirada en la producción agrícola del país. “Ya casi no podemos producir, los precios de los fungicidas están caros, no tenemos ayuda de nadie”. Además, denunció que las ayudas económicas que llegan a su comunidad para fortalecer a los campesinos, se distribuyen de acorde a la afiliación política.
Sobre la repotenciación de la producción de alimentos, para Adalid Irías, el gobierno debe preocuparse por fomentar la producción de los granos básicos, “no es posible que estemos importando el mínimo verde, la zanahoria y otros productos que podemos producir”, refirió en entrevista con Criterio.hn.
Adalid Irías, advirtió que, de no tomarse medidas urgentes, la inseguridad alimentaria golpeará más fuertes a los hondureños y hondureñas.
El Banco Mundial, en su última actualización sobre la seguridad alimentaria, señala que la inflación superior al 5 % se registra en el 61,9 % de los países de ingreso bajo.
Además, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), refiere que, en 2022, en América Latina y el Caribe, al menos 247,8 millones de personas experimentaron inseguridad alimentaria moderada o grave.
La Fao, en el informe: “Panorama Regional de la Seguridad Alimentaria y la Nutrición” , señala que la región de Mesoamérica, enfrenta un escenario complejo, debido a factores sucesivos como: la pandemia de la COVID-19, las persistentes desigualdades, los niveles de pobreza, la crisis climática y los efectos del conflicto en Ucrania.
En ese sentido, señala que dichos factores “han contribuido al aumento de los precios de los alimentos y a la inflación alimentaria”. Bajo este contexto, que el hambre y la malnutrición siguen siendo los principales desafíos para la región.
