Por: Redacción CRITERIO
Tegucigalpa.-A cinco años de que se distribuyó entre los militantes del Partido Nacional por fin salió a relucir la procedencia de los fondos con los que el Partido Nacional financió la “tarjeta cachureca”, que utilizó el actual gobernante, Juan Hernández, para potenciar su candidatura presidencial de 2013.
De acuerdo a una investigación del equipo integrado de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH) y la Unidad Fiscal Especial Contra la Impunidad de la Corrupción (Ufecic), los fondos salieron de un saqueo de 282, 016,175.00 lempiras, registrado en el 2013 en la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG).
La noticia sobre la procedencia de los recursos fue reafirmada hoy por la vocera interina de la MACCIH, María Calderón Boy, quien al dar lectura a un comunicado de esa instancia dijo que, “parte de los fondos se habrían utilizado para financiar la tarjeta cachureca», refriéndose a los dineros saqueados de la SAG.
El 9 de octubre de 2013 y como parte de su campaña proselitista, Hernández hizo el lanzamiento oficial de la tarjeta de descuento “La Cachureca”, con la que los militantes del Partido Nacional recibieron descuentos en tiendas comerciales y restaurantes y recargas de celular.
En aquel entonces, el candidato nacionalista anunció que la tarjeta permitiría a sus usuarios recibir descuentos de hasta un 35% por la compra de artículos variados en restaurantes, tiendas de repuestos de carro, universidades, telefonía móvil, hospitales y clínicas privadas y supermercados, compra de recargas, entre otros.
Hernández aseguró además que el proyecto político se realizaba mediante una alianza con los comercios enlistados.
«Hay que aclarar algo acá, esta Tarjeta de Beneficio ‘La Cachureca’ es para todo hondureño que quiera tenerla, no es solo para los nacionalistas… es una intención de trasladar beneficios a todo el país, tendrá una vigencia de dos años y se activa en el comercio tres días después de adquirirla gratuitamente. A partir del 15 de octubre se podrán realizar gestiones en la casa del Partido Nacional”, informó Hernández.
Pese a que Hernández aseguró en aquel entonces, cuando era presidente del Congreso Nacional, que la tarjeta podría ser adquirida por todos los hondureños, se constató que el requisito que se exigía era estar censado en las filas del nacionalismo como resultado del padrón electoral de las elecciones internas celebradas en marzo de 2013, ya que el proyecto era meramente proselitista, de hecho su nombre era explícito.
Más adelante en su discurso de lanzamiento de la tarjeta, Hernández dijo que había hablado con su familia para que “todos los quieran viajar a ese paradisiaco lugar que se llama Gracias, Lempira…Ya estoy autorizado para que ustedes puedan firmar ese contrato de un 20 por ciento de descuento en el Hotel Posadas”, expresó al referirse al hotel propiedad de su familia. Lo anterior indica que uno de sus negocios familiares podría haber recibido fondos del Estado a través de la utilización de la controvertida tarjeta.
REQUERIMIENTO FISCAL
El equipo integrado de la MACCIH) y la Ufecic presentó hoy requerimiento fiscal contra 38, imputados entre estos diputados, altos funcionarios públicos y particulares, que en el 2013 drenaron 282 millones de lempiras ($ 12 millones) de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) para financiar campañas políticas de los partidos Nacional, Liberal y Frente Amplio.
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La vocera interina de la MACCIH, María Calderón Boy, explicó en rueda de prensa que los dineros fueron drenados a través de las organizaciones no gubernamentales Todos Somos Honduras y Dibattista, ésta última con sede en el departamento de Islas de la Bahía.