Por: Redacción CRITERIO
Tegcuigalpa.- Un nuevo acto de corrupción de ha destapado en la Secretaría de Educación que dirige Marlon Escoto, donde se ha denunciado que en esa institución se cobran coimas por otorgar aumentos a los maestros.
Una grabación de una empleada de la institución donde llama a una maestra amiga suya y le explica que si quiere un aumento de 1,300 lempiras mensuales debe pagar 7 mil lempiras y si quiere un aumento de 3 mil debe pagar 15 mil lempiras en coimas.
La empleada grabada dice que ese trámite es seguro y que en el mismo día que pagan se les otorga el aumento que es de por vida y que es un trámite muy seguro porque se hace con la gente de arriba.
Explica además que ella lo ha comenzado a hacer metiendo a sus familiares que son maestros y ya ha ingresó a sus familiares (tíos, hermanos, cuñados, primos) “y ponete pilas porque la situación esta dura y uno vive de los negocios”, dice la empleada.
El asesor del ministro Francis Ulloa y la directora de Escalafón del magisterio, Delia Merlo, tienen los nombres y números de identidades y los centros educativos donde se está dando la corrupción, pero nadie ha hecho nada, dice un empleado en otra grabación a la que Criterio.hn tuvo acceso.
Dice además que pedirá una audiencia con el ministro Marlon Escoto para llevarle la información para ver si él quiere atacar la corrupción porque a nivel de escalafón no han hecho nada.
El presidente del COPEMH, Jaime Rodríguez manifestó que ellos tienen conocimiento de esos actos de corrupción donde ahora los aumentos no se perciben por méritos sino que hay que comprarlos a toda una mafia instalada en la Secretaría de Educación donde le están vendiendo los beneficios a los maestros.
Hizo un llamado al magisterio, porque antes los beneficios eran para todos los maestros cuando salían a la lucha pero hoy es para unos pocos que pueden pagarle a las mafias instaladas en esa secretaría de Educación.
Rodríguez, hizo además la denuncia sobre unos cursos virtuales que están exigiendo a los docentes porque si no los van a despedir y resulta que los diplomas de esos cursos los venden en los Cyber Cafés, lo que evidencia la corrupción que impera en la secretaría de educación y en el magisterio.
