Por: Redacción CRITERIO
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El periodista Jorge Ramos (Ciudad de México, 1958) se registró para la conferencia de prensa como el resto de compañeros. Le acreditan tres décadas explicando cada noche las noticias a la comunidad hispana y varios premios sobre la calidad de su periodismo.
Sin embargo, acabó expulsado momentáneamente de la rueda de prensa del candidato republicano Donald Trump y protagonizando un careo dialéctico con el magnate.
“En ninguna parte del mundo me han sacado de una conferencia de prensa o de una entrevista por la fuerza, nunca. Esta es la primera vez”, relata el periodista Jorge Ramos vía telefónica desde Iowa.
Ramos viajó a este estado con un propósito: trasladar a Trump, el favorito entre los republicanos según las encuestas, las preguntas que tiene la comunidad hispana.
“Trump nos había negado una entrevista”, explica el presentador de Noticiero Univision y Al Punto. Tras los comentarios xenófobos de Trump contra los inmigrantes latinoamericanos en junio, Univision había roto el contrato con Miss Universo (propiedad de Trump) y el magnate respondió a la cadena con una demanda de $500 millones de dólares por incumplir lo pactado.
La rueda de prensa en Iowa empezó. De forma espontánea los reporteros hacían preguntas. Trump las respondía.
Jorge Ramos quiso hacer la tercera pregunta:
– Solamente tengo una pregunta sobre inmigración. Su plan de inmigración es…
– OK, ¿quién es el siguiente? – le interrumpió Trump.
– Mr. Trump, tengo una pregunta. – insistió.
– Perdón, nadie te dio la palabra, siéntate. Siéntate, siéntate, siéntate.
Jorge Ramos cuestionó al aspirante presidencial Donald Trump sobre su propuesta de deportar a los 11 millones de inmigrantes indocumentados.
Un guardia de seguridad le hizo salir de la sala llena de periodistas.
“Yo creo que mi trabajo era y es hacer preguntas”, relata minutos después por teléfono el periodista mexicano americano. “Me preocupa muchísimo este uso de la fuerza para suprimir la libertad de expresión”.
Dentro de la sala, los periodistas preguntaron a Trump por qué había expulsado a Ramos: gritaba, respondió el magnate. Fuera de la sala, estaba el periodista intentando entrar.
“La gente de seguridad no me dejó entrar, hasta que alguien de la campaña de Trump me permite regresar y, como yo iba a hacer preguntas, volví a hacer lo que fui a hacer, que es preguntar”, explica.
Uno cortaba al otro. Jorge Ramos le preguntaba por la viabilidad de su plan migratorio.
“El problema de Donald Trump es que no ha sido específico en la manera como va a hacerlo”, explica el presentador sobre la falta de concreción de las propuestas de construir un muro, expulsar a los millones de indocumentados y negar la ciudadanía a los nacidos en EEUU en el seno familias inmigrantes.
“De la misma forma que a mí me saca de una conferencia de prensa, querría sacar a 11 millones de indocumentados de los Estados Unidos”, dice Ramos.
¿Le preocupa que lo vean como un activista?, le preguntamos a Ramos. No cree que nadie lo perciba así: “Mi trabajo fue exclusivamente periodístico. Mi trabajo es hacer preguntas, a quien sea y en cualquier lugar del mundo, y eso es exactamente lo que hice”.
Su celular recibió muchos mensajes: “De compañeros y reporteros, me dan apoyo total para hacer preguntas”.
