La violencia, ejercida por relaciones de poder, obliga a las mujeres de Honduras a desplazarse o migrar en caravanas.
Texto: Nancy Paola Cruz García
Fotografías: Fernando Destéphen
Tegucigalpa. – «Hoy las mujeres a nivel del mundo se están movilizando. Desde la costa, los territorios donde estamos luchando contra la violencia, el femicidio, los proyectos extractivistas. Es un día para decir que estamos vivas, que queremos la vida, no queremos que nos asesinen. No queremos ser un narcoestado».
Las punzantes frases anteriores fueron las palabras de bienvenida de la coordinadora de la Organización Fraternal Negra Hondureña (Ofraneh), Mirian Miranda, a la jornada de protesta convocada por la Asamblea de Mujeres Luchadoras de Honduras.
Las mujeres que, se concentraron en el Parque Central de Tegucigalpa, desarrollaron diversas acciones para conmemorar el Día Internacional de la Mujer.
La Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL) establece, en un reciente informe, que Honduras es el segundo país de América Latina con altas tasas de femicidios, el tercero de mujeres adolescentes con embarazos y uno de los tres países que no ha firmado el Protocolo Facultativo de la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer.
En este país centroamericano, donde la venta de la Píldora Anticonceptiva de Emergencia (PAE) es prohibida, existe una tasa de impunidad sobre los femicidios del 96 %, y, según datos del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, cada 21 horas, una mujer es asesinada.
-
Me encanta desafiar el poder y escudriñar lo oculto para encender las luces en la oscuridad y mostrar la realidad. Desde ese escenario realizo el periodismo junto a un extraordinario equipo que conforma el medio de comunicación referente de Honduras para el mundo Ver todas las entradas