Tegucigalpa. – Esta mañana, con odio y una brutalidad evidente, fue asesinado el periodista Edwin Josué Andino Canaca de 23 años, en un país en el cual el mensaje que se ha plasmado es que ser periodista, defensor de derechos humanos, defensor de ambiente, es casi una sentencia de muerte debido a la labor que estas personas deben ejecutar.
Con el irrespeto hacia la vida que evidencia el crimen y la impunidad que lo permite, el cuerpo de Edwin Andino fue encontrado en ropa interior, con agujeros de balazos incluso en su rostro y cinta adhesiva en su boca, el joven yacía en la calle principal de la Colonia Villafranca de Comayagüela.
Al mismo tiempo otros tres asesinatos se reportaban en diferentes sectores del Distrito Central, según reportes de la Policía Nacional, uno de estos, era el padre del periodista a quien encontraron en la colonia El Rosario.
El periodista laboraba como colaborador y productor en el canal LTV, el director de este medio, Aldo Romero, describió a Edwin Andino a través de un tuit: “Sumamente consternado por la muerte de Edwin Andino. Joven valor del periodismo, lo vimos crecer y desarrollarse en las aulas, sano, graduado con excelencia académica, se estaba desarrollando con buen suceso en su carrera. La violencia nos quita a una gran promesa para el país”.
Como siempre, todavía se desconoce quiénes realizaron el crimen contra el periodista. pasadas la 9:00 de la mañana, se esperaba la llegada de Medicina Forense para realizar el levantamiento del cuerpo.
Según la Policía, dieron con el paradero del vehículo utilizado por los asesinos que quitaron la vida al periodista y su padre, el carro es un Honda color gris.
Lea también: Al menos 219 periodistas y defensores asesinados reflejan una libertad de expresión sepulcral
El último mensaje del periodista en sus redes sociales, fue: “A veces el final, solo es el comienzo de algo nuevo”. La incógnita que queda es si Edwin Andino ya había sido amenazado anteriormente, como ha sucedido en otros casos de asesinato hacia defensores de derechos humanos, periodistas, defensores del ambiente, entre otros.
La directora ejecutiva de Fundación Eléutera, Elena Toledo, señaló en conversación con Criterio.hn, en Honduras se sobrevive bajo la condición “sálvese quien pueda”.
“Si eso le pasó a un joven periodista que trabajaba en un medio que tenía una voz, si se quiere decir legítima, qué puede ocurrir a la personas más desprotegidas. Es sumamente preocupante esta situación. Solo queda llamar una vez más a que las autoridades pertinentes hagan su trabajo y que una muerte más no quede impune”, apuntó Toledo.
En las afueras de la morgue de la capital de Tegucigalpa, una familiar de Edwin comentó que el joven periodista en sus tiempos libres acompañaba a su papá a los pueblos aledaños a la ciudad para vender diferentes productos.
“SÁLVESE QUIEN PUEDA”
Lamentablemente en Honduras no se sabe por qué matan a los periodistas. Tan solo en lo que va de 2022, cinco -contabilizando a Edwin Andino- han sido asesinados en un país que, según Reporteros sin Fronteras (RSF), ocupa el lugar 165 de 180 naciones dentro de su ranking de libertad de prensa, resaltando que, en todo el continente, solo Cuba, país que ocupa el puesto 173, atraviesa una situación peor.
Cabe mencionar que, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) comparte cifras menores, pues datos del Comité por la Libre Expresión (C-Libre), con sede en la capital Tegucigalpa, señalan que 97 periodistas han muerto violentamente entre 2001 y 2022.
Lea también: Amenazas, muerte y extorsión obligan a periodistas hondureños al desplazamiento forzado
El panorama de impunidad es desalentador, pues de estos casos, el 90% permanece sin justicia, además, del 10% judicializado, solo se identificó a quienes fueron los autores materiales.
Con el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, la situación de muerte violentas de periodistas no hizo más que incrementarse. Según datos de C-Libre, entre 2001 y 2009, eran cuatro los periodistas que habían sido asesinados.
C-Libre ha explicado que al analizar la autoría intelectual, la impunidad en realidad sería del 100%. Siempre queda la incertidumbre de que se deba al ejercicio del periodismo y que este es un país donde, si los periodistas que no se alinean a la corrupción y deciden denunciarla, viven con miedo y bajo amenazas.
C-Libre fue fundada en 2001 y, desde ese entonces, se contabilizan más de 2,000 amenazas y agresiones públicas contra periodistas o trabajadores de medios de comunicación.
Toledo apuntó que la inseguridad y el crimen son otra de las razones por las que las personas deciden migrar, entre ellos los periodistas, quienes deciden buscar refugio en el extranjero para evitar ser asesinados, al no ser escuchados por los entes de investigación y justicia cuando interponen una denuncia por amenazas a su vida.
