El informe de la Misión de Observación Electoral no mencionó los mensajes de Donald Trump durante el silencio electoral ni otras denuncias clave sobre irregularidades, pese a reconocer fallas técnicas en el sistema de resultados.
El silencio del organismo regional sobre la injerencia estadounidense contrasta con el peso financiero de EE. UU., que aporta casi la mitad del presupuesto regular de la OEA.
Tegucigalpa, Honduras. – La Misión de Observación Electoral (MOE) de la Organización de Estados Americanos (OEA) omitió en su informe ante el Consejo Permanente cualquier referencia a la injerencia de Estados Unidos en los comicios del pasado 30 de noviembre en Honduras.
Eladio Loizaga, jefe de la MOE en Honduras, reconoció demoras en la gestión del material electoral y deficiencias técnicas en los sistemas de procesamiento de resultados, aunque aseguró “no han observado dolo ni manipulación evidente del material electoral ni en los sistemas informáticos”.
Sobre los retrasos del sistema de Transmisión de Resultados Preliminares (TREP), sostuvo que las fallas tecnológicas no constituyen fraude en sí mismas, ya que los resultados constan en las actas físicas, aunque sí evidencian impericias de la autoridad electoral.
No hubo mención a los posteos del presidente estadounidense Donald Trump, quien en pleno silencio electoral publicó dos mensajes en los que condicionó el respaldo de Estados Unidos a la victoria del candidato del Partido Nacional, Nasry Asfura, y anunció el indulto del expresidente Juan Orlando Hernández, condenado a 45 años de prisión en ese país por delitos vinculados al narcotráfico.
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El mismo Donald Trump señaló este lunes que dio su respaldo a un candidato que no lideraba las encuestas y sostuvo que, gracias a su influencia, este ganó las elecciones en Honduras.
El silencio por parte de la OEA frente a la intromisión de Donald Trump en el proceso electoral solo resulta comprensible si se considera que el 49.99% de las asignaciones del fondo regular del organismo para 2025 y 2026 provienen de Estados Unidos.
OTRAS OMISIONES DEL INFORME ELECTORAL
Tampoco se mencionó el incumplimiento a la Ley Electoral por parte del Partido Nacional, que envió mensajes de texto apremiando a la ciudadanía a votar por sus candidatos a la presidencia y a la alcaldía de la capital hondureña en la vispera y el día de elecciones.
Otras omisiones incluyen las denuncias de la comisionada presidenta del Sistema Nacional de Emergencias 911, Miroslava Cerpas, quien presentó ante el Ministerio Público 892 reportes ciudadanos por presuntas irregularidades que podrían constituir delitos electorales, en las que estarían involucradas estructuras criminales orientadas a influir en el voto.
No se abordaron los 26 audios presentados ante el Ministerio Público por el consejero del CNE Marlon Ochoa que supuestamente revelan un plan para boicotear el proceso electoral, y en los que supuestamente se escucha a la consejera Cossette López del Partido Nacional, junto al jefe de bancada de dicho instituto político, Tomás Zambrano, y a un militar activo de identidad desconocida. Menos aún, otros tres audios que fueron revelados por el fiscal general Johel Zelaya.
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Dos días después de las elecciones, supuestos militantes del Partido Nacional en San Pedro Sula acusaron a Roberto Contreras, alcalde en busca de la reelección y presidente del Partido Liberal, de haberlos engañado, al señalar que el acuerdo entre Contreras y el Partido Nacional consistía en votar por él y por Nasry Asfura. Las protestas se produjeron en un momento en que Salvador Nasralla tomó la delantera en los resultados.
Otro señalamiento omitido fue el de la presidenciable del Partido Libertad y Refundación (Libre), Rixi Moncada, quien un día después de las elecciones denunció el envío masivo de mensajes a receptores de remesas, advirtiéndoles que votar por Libre pondría en riesgo las remesas de diciembre.
El 8 de diciembre, el mismo día que Cerpas presentó sus denuncias, el presidencialble por el Partido Innovación y Unidad Social Democrata (PINU-SD), Nelson Ávila, denunció que existe un “fraude matemáticamente evidente” y solocitó ante el Ministerior Público interponer una denuncia contra acciones administrativas que hayan infringido la Ley Electoral.
La semana pasada el científico y médico neurólogo Marco Tulio Medina, designado en la formula presidencial de Salvador Nasralla, hizo pública una supuesta investigación forense sobre la transmisión de resultados electorales en Honduras, en la que se identifican siete anomalías estadísticas críticas que, en conjunto, serían indicativas de manipulación algoritmica.
CANCILLERÍA HONDUREÑA CUESTIONA OMISIONES
En respuesta, el vicecanciller de Honduras, Gerardo Torres, refutó el informe de la MOE-OEA, al señalar que los problemas técnicos sí impactan la percepción pública y que el 88% de las actas presentan inconsistencias. Torres subrayó además la existencia de injerencia externa directa y amenazas de grupos criminales durante el proceso electoral del 30 de noviembre, citando mensajes intimidatorios.
Asimismo, recordó que la Carta de la OEA prohíbe la intervención de un Estado en los asuntos de otro y, amparado en la Carta Democrática Interamericana, solicitó al secretario general y al consejo permanente evaluar la convocatoria a una sesión extraordinaria de la Asamblea General y adoptar medidas diplomáticas ante las agresiones denunciadas, exhortando a no guardar silencio ni omitir los hechos en los informes.
