Fotografía y redacción de Horacio Lorca
El Congreso convocó a los diputados y diputadas nuevamente el sábado 11 de febrero a las 3:00 para continuar con la elección de la nueva Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Desde tempranas horas había diferentes anillos de seguridad por parte de los agentes de la Policía Nacional que resguardaban los alrededores del Palacio Legislativo. En esta ocasión, como las anteriores, los colectivos del Partido Libertad y Refundación (Libre) exigían, entre consignas, la elección de los nuevos 15 magistrados y magistradas.
Antes de reanudar la sesión, tanto diputados del Partido Nacional (PN) como de Libre vociferaban enérgicamente consignas para tratar de intimidarse entre sí, mientras en el hemiciclo un diputado del Partido Nacional le lanzaba una camisa a un legislador de Libre con la leyenda “SI PERDEMOS LA CORTE, PERDEMOS EL PAÍS”, la misma que usaron en sus curules los diputados del Partido Salvador de Honduras (PSH).
Iniciada la sesión, las bancadas del Partido Nacional y del Libre presentaron nuevamente mociones nominativas, pero ambas propuestas no fueran tomadas en consideración al ser rechazadas por el pleno.
Los diputados de la bancada del Partido Salvador de Honduras pidieron con insistencia la palabra antes de terminar la sesión, pero no les fue dada. Luego dieron declaraciones a la prensa y al finalizar la jornada salieron juntos del hemiciclo.
Al no haber consenso, la sesión fue suspendida y se convocó a los jefes de bancada para continuar con las negociaciones el lunes 13 de febrero a las 11:00 de la mañana. Así concluyó el tercer intento fallido por lograr la elección de la nueva Corte.
