Analistas en derechos humanos consultados por Criterio.hn afirmaron que se vulneraron los derechos a la imagen, la intimidad, y la dignidad de la niña, al divulgarse datos sensibles sobre su estado de salud y edad
Tegucigalpa, Honduras. El manejo inadecuado de un caso por parte del departamento de prensa del Hospital Escuela Universitario (HEU) provocó la vulneración de los derechos de una menor de 12 años, al minimizar un abuso sexual mediante una publicación que pretendía generar “conciencia” y promover la vacunación contra el VPH.
Aunque el portavoz del Hospital Escuela dio a conocer que el caso pasó al área legal, al consultar a una oficial de comunicaciones del Ministerio Público, la funcionaria informó a este medio digital que al estar de vacaciones no tenían mucha información del caso, pero que la Fiscalía de la Niñez confirmaría lo sucedido y luego iniciará una investigación.
El papel del departamento de prensa del Hospital Escuela y de los medios de comunicación corporativos ha dejado al descubierto la carencia de conocimiento en materia de derechos humanos, afirmó un especialista consultado por Criterio.hn.
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SOBRE EL CASO
El pasado miércoles 16 de julio el Hospital Escuela mediante un posteo en Facebook dio a conocer el caso de una menor de 12 años, a quien se le diagnosticó cáncer cervicouterino en etapa avanzada, una noticia que se esparció como pólvora en los medios de comunicación corporativos de Honduras.
Aunque si bien, el anunció causó consternación en algunos sectores, los claros indicios de abuso sexual quedaron invisibilizados en la narrativa y el lenguaje empleado por el personal del centro hospitalario.
“Con timidez y voz infantil afirmó haber tenido intimidad sexual, a lo que nuestro urólogo Dennis Chirinos dijo: es probable que haya contraído el virus del papiloma humano y se le brindará ayuda”, mencionaba el texto del HEU, acompañado por un arte que titulaba la detección del caso y que informaba la disponibilidad de las vacunas en dicha institución de salud, sin embargo, posteriormente fue borrado.

Nueve días han transcurrido desde que el Hospital Escuela expuso el caso de la menor de edad, y, pese a que la acción parece inofensiva a algunas personas, representa una vulneración al derecho a la privacidad, dignidad e integridad de la menor, según establece la Convención sobre los derechos del niño, en los artículos 16 y 19, que protegen a los menores de edad de toda forma de exposición o violencia, incluida la mediática.
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POSICIONAMIENTO DEL HOSPITAL ESCUELA
Con el objetivo de conocer si el Hospital Escuela interpuso una denuncia ante el Ministerio Público y si adoptó medidas institucionales por el manejo inadecuado del caso tras el posteo, Criterio.hn se comunicó vía mensajería con Miguel Osorio, portavoz del centro asistencial, quien informó que desconocía el estado actual del caso.
Osorio afirmó que dicho caso fue particular, pues pasó al área legal tanto del Hospital Escuela como de la Secretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), pues, “se está investigando si hubo la comisión de un delito de carácter sexual” expresó.
Con respecto al manejo inadecuado del contenido de la publicación en las redes sociales del HEU, Osorio dijo no entender porque se tomarían acciones, si el posteo fue un llamado a la reflexión de padres de familia y tutores. Agregó que no se expuso la identidad, ni se reveló el rostro ni el lugar de residencia.
“Haber sacado a la luz el caso provocó el interés y conocimiento de la SENAF y llamó a la reflexión de muchos padres de familia y tutores”, manifestó el Portavoz del Hospital Escuela, Miguel Osorio.
Para la abogada y exfiscal del Ministerio Público, Kenia Paz, el hecho que afirmen que no se divulgaron los datos como expone Osorio, no deja de vulnerar el derecho a la imagen, intimidad y dignidad de la niña, pues aun cuando eso se omite, continúa revelando datos sensibles sobre su estado de salud y edad.
Paz explicó que la narrativa de la publicación descontextualiza la vulnerabilidad estructural y la desprotección que rodean los embarazos o las infecciones en niñas que son violadas, enfatizando que se trata de una violación.
La jurista señaló que cuando se omite o neutraliza la dimensión de poder, control y daño, se refuerzan los patrones de invisibilización y revictimización de las niñas desde la perspectiva de género lo que significa que se naturaliza la violencia sexual y minimiza la responsabilidad del agresor.
¿POR QUÉ HAY VIOLACIÓN DE DERECHOS HUMANOS?
El analista en derechos humanos, Christian López, explicó a Criterio.hn que este caso específico sí constituye una violación de derechos humanos por dos vías. La primera, porque se trata de una menor de edad, lo que configura el delito como violación agravada, la segunda, porque la víctima es una paciente en condición de alta vulnerabilidad, al haber sido diagnosticada con cáncer de cérvix.
López detalló además, que el hospital realizó un mal manejo al exponer a una menor al escrutinio público, en lugar de buscar la manera de resarcir el daño, y agregó que el Estado debe encargarse de perseguir a la persona que le generó esa condición y mejorar las condiciones físicas, psicológicas y emocionales de la menor.
El abogado amplió que es fundamental tener claridad en que, al tratarse de una menor de edad y conforme a lo establecido en el Código Penal de Honduras, se configura un delito de violación especial agravada. En ese contexto, no se puede reducir el hecho a un tema de educación sexual, ya que una niña no tiene la capacidad legal para consentir. Por tanto, debe activarse la ruta penal e investigarse como una agresión sexual grave.
López remarcó que el Estado hondureño tiene la obligación de prevenir, sancionar y erradicar toda forma de violencia contra la mujer, incluyendo niñas y adolescentes. Esto implica garantizar justicia, protección efectiva y una atención integral con enfoque de género y niñez.
El analista señaló que por hechos como este, es necesario que tanto los periodistas del sistema público como las personas que en general trabajan en instituciones tengan una formación en derechos humanos, pues de lo contrario se exponen a realizar manejos no adecuados y carecen de tacto, y por ende en lugar de concientizar hacen que un tema tome revuelo y se exponga al escrutinio público tal como sucedió en este caso.

PAPEL DEL DEPARTAMENTO DE PRENSA
Para la doctora y diputada del Partido Nacional, Johana Bermúdez, el manejo del tema por parte del departamento de prensa fue irresponsable, pues detalló que aunque no se consigne el nombre de la menor, el propio personal de salud puede preguntar y acceder a la información.
Bermúdez señaló que en lugar de dar a conocer el caso, al identificarlo lo que debieron hacer fue iniciar con una campaña de vacunación para el VPH.
La congresista además, hizo un llamado al Colegio de Periodistas de Honduras (CPH) al considerar que es necesario que los profesionales de la comunicación sean capacitados en materia de derechos humanos para evitar que se repliquen este tipo de acciones.






