Tegucigalpa. – El 90 por ciento de los hondureños retornados por las autoridades de Guatemala a inicios de enero de 2021 se debió a que no contaban con sus documentos personales: identidad, partida de nacimiento e incluso carné de vacunación, informó el representante de la Comisión de Acción Social Menonita (CASM), César Ramos.
De las 9 mil personas que conformaban la caravana, sólo 40 personas habría lo logrado ingresar a Guatemala, pero en su mayoría eran nicaragüenses con su documentación completa y fueron amparados por su situación política.
Sobre esta situación, la exintegrante de CASM y periodista, Yanina Romero, contó a Criterio.hn que acompañó 40 días en Tijuana, México a la mega caravana de octubre de 2018, donde comprobó que “la mayoría de los emigrantes hondureños no saben defender sus derechos”, siendo una de las razones la baja escolaridad.
“Los nicaragüenses que sí lograron pasar al menos terminaron el sexto grado o iniciaron la secundaria, los nuestros ni el cuarto grado han cursado, ellos pueden caminar libremente por todo el territorio guatemalteco, el problema es que no saben cuáles son sus derechos, no los saben defender, al encontrarse en esa vulnerabilidad pues obviamente el Estado con que se enfrentan se aprovecha de su ignorancia y los deporta de inmediato”, explicó.
De esa forma, la comunicadora manifestó que los emigrantes que conocen bien sus derechos y saben argumentar su situación en el país han logrado exiliarse o refugiarse en México, incluso, algunos han entrado a Estados Unidos en esa condición.
Sin embargo, Romero reconoce que la condición que obliga a los hondureños a viajar sin papeles o sin vacuna, se debe al mismo Estado fallido en que vivimos. “En este momento muchas personas reclaman su DNI, pero el Registro Nacional de las Personas no la entrega todavía”, señaló la entrevistada y explicó que el proceso se retrasa porque los mismos empleados no han recibido sus sueldos.
En las últimas caravanas integradas en su mayoría por hondureños, han sido retenidos e incluso fuertemente reprimidos ya sea en Guatemala como ocurrió en enero de 2020 o en México como ha ocurrido reciente con los emigrantes que lograron pasar este país vecino.
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CASI 100 MIL HONDUREÑOS SALEN ANUALMENTE
De acuerdo a estudios, Romero destacó que las caravanas se venían dando de manera gradual, salen al menos 500 personas por día, subió abruptamente de 250 a 350 personas diarias y así continúa, por lo menos, 10 mil personas salen del país cada mes, más casi 100 mil hondureños al año intentan emigrar.
“Hay miles de personas viajando con coyote, pero esas personas que van en la caravana son las mayorías, los que no pueden pagarle a un coyote, pollero o tratante. En los Estados Unidos cuando converso con gente hondureña, es común que digan que va a llegar un primo, que van a una casa de visita y llegó hace tres meses, que acaban de llegar o están en la frontera, pero todos esos van con coyote”, comentó.
La experta en temas migratorios indicó que, mientras a los hondureños les vaya bien en los Estados Unidos, la gente siempre pensará en irse, pues insistió que es lógico buscar mejor calidad de vida y oportunidades, todavía más cuando un ciudadano observa que su vecino se fue a Estados Unidos y sus familiares en Honduras se levantaron económicamente, viven en una mejor casa con todas las comodidades y reciben su remesa.
“Yo siempre digo que la migración solo es la punta del iceberg de todos los problemas que tiene Honduras, muchas veces la academia dice muchas cosas sobre el tema de migración, pero ni siquiera conocen de dónde salen los migrantes y tampoco ven las zonas de recibimiento donde llegan, ese es el primer choque con que se encuentran cuando llegan nuevamente a Honduras, los mismos que vienen deportados se van porque ya no se acostumbran a estar aquí”, relató la especialista.
En ese contexto, observa que el tema de la migración es sobre sobrevivencia porque hay unos que migran con visa, es decir, son migrantes privilegiados, mientras que los demás deben viajar de manera irregular con el rechazo total de los países en tránsito.
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BIDEN NO PODRÁ CUMPLIR ALGUNAS PROMESAS MIGRATORIAS
Romero destacó que las garantías jurídicas que implementará el nuevo gobierno de Honduras en acuerdo con Estados Unidos dan a entender que habrá mayor inversión en el país y, por ende, que bajará la migración. Pero, en su opinión, no se trata de endurecer las políticas, sino generar las condiciones en el país para que los compatriotas no se vayan.
“Creo que nadie quiere abandonar su casa o su familia, pero la necesidad obliga, aunque si las condiciones cambian yo creo que los estadounidenses son los más interesados en que cese un poco la migración”, razonó.
Para la periodista, es importante recordar que el expresidente Barack Obama decía que era amigo de Latinoamérica, pero fue uno de los presidentes que más gente ordenó deportar, claro, de forma silenciosa, mientras que Donald Trump también deportó mucha gente, pero de manera pública, no a escondidas.
Por su parte, el actual presidente estadounidense, Joe Biden, prometió muchas cosas antes de tomar el poder, pero no podrá realmente cumplirlas, porque quienes trabajan en migración tienen otros argumentos y no se puede interferir en esas disposiciones que ya son del Estado. Romero señaló que hay leyes federales y del Estado, y Biden debe ser respetuoso de eso, sin embargo, donde más política migratoria se aplica es por donde más pasan nuestros compatriotas.
“Las deportaciones se van a seguir dando, lo que yo percibo es que la mayoría de la gente que deportan es porque cayó en alguna redada, lo atraparon durante un accidente, estaba conduciendo en estado de ebriedad o faltó a alguna norma y otros no tienen a nadie que los reciba en Estados Unidos”, compartió la comunicadora.
Cabe recordar que, en diciembre de 2021, la Casa Blanca anunció las inversiones del sector privado por un total de 1.200 millones de dólares en países del Triángulo Norte, con el propósito de impulsar su para combatir las raíces de la migración irregular.
