Honduras: Policías prometen nuevamente no reprimir al pueblo

Por: Redacción CRITERIO

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Tegucigalpa.-La escala básica de la Policía Nacional se ha acuartelado con una huelga de fusiles caídos exigiendo mejor trato y respeto a sus derechos humanos por parte de la oficialidad y prometiendo que no van a reprimir más al pueblo hondureño que se manifiesta en las calles y además piden perdón por sus actuaciones y por las violaciones a los derechos humanos del pueblo hondureño.

Ya el 04 de diciembre de 2017 los miembros de la escala básica de la Policía Nacional y los agentes de la Policía Tigres y del escuadrón Cobras entraron a una huelga de brazos caídos argumentando que no querían asesinar al pueblo porque ellos vienen de él, sin embargo al firmar un acuerdo con el gobierno y prometerles aumento de sueldo se olvidaron que el pueblo les llevó alimentos, agua, refrescos y les dio su apoyo en la lucha, por eso hoy los hondureños ven con escepticismo este nuevo acuartelamiento.  

El 05 de diciembre de 2017 salió a la luz un audio donde Juan Hernández ofrecía canonjías a los policías, acción  con la que explícitamente el mandatario buscó congraciarse con los uniformados para que éstos suspendieran su rebelión.

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En un comunicado emitido este miércoles señalan que están sufriendo constantes violaciones a sus derechos humanos fundamentales de parte de los altos mandos, en detrimento de la escala básica y que en la actual crisis en el país tienen una sobrecarga laboral a exigencia de los jefes inmediatos superiores, en franca violación a estándares internacionales de derechos humanos.

Informan que,  «el acta de compromiso firmada por las autoridades de la Secretaría de Seguridad de fecha 05 de diciembre de 2017, que contemplaba 6 puntos, que se acordaron y que surgió del paro de brazos caídos durante la crisis poselectoral han sido violentadas y burlada la buena fe de los garantes de organizaciones de Derechos Humanos que mediaron en esa crisis».

Además,  denuncian que cuando se ven involucrados en actos de legítima defensa por la naturaleza de su trabajo son abandonados por la cúpula y dejados a su suerte y lo mismo ocurre cuando los despiden donde no se observan los derechos que como hondureños y empleados de una institución del estado tienen.

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También denuncian el  acoso sexual y laboral que sufren las mujeres policías, el exceso de trabajo, la discriminación y exclusión que son sometidas al no responder con estas negativas acciones y aunque presenten denuncias no son investigadas, ni tampoco sanciona a los responsables de estas insanas prácticas que dañan la dignidad de las féminas, debe garantizárseles la protección en estos casos.

Entre otras peticiones exigen una Auditoría Forense a los fondos de la Tasa de Seguridad en vista que nos asisten y también piden que se revisen los elevados pagos de intereses de los préstamos personales del Instituto de Prevención Militar (IP.)