Por: Redacción CRITERIO
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Tegucigalpa.- El Banco Holandés de Desarrollo (FMO, por sus siglas en inglés) y el Fondo Finlandés para la Cooperación Industrial (FinnFund), dos de los mayores inversionistas de la represa Agua Zarca en Honduras, anunciaron hoy su salida del proyecto. Este suceso se produce a más de un año del asesinato de la defensora de los derechos indígenas, Berta Cáceres, y de una posterior campaña de Oxfam y aliados que los empujaron a abandonar la iniciativa.
“Este es un paso muy esperado e importante en el arduo camino que la familia de Berta y su organización, el COPINH, han realizado en la lucha por la justicia y el respeto a los derechos del pueblo lenca”, expresó el Director de País para Oxfam en Honduras, George Redman.
“La historia no debe repetirse. El Finnfund y el FMO deben trabajar de forma más estrecha con las comunidades en terreno para asegurar que respalden proyectos que respeten plenamente las leyes internacionales y nacionales. Todas las denuncias de irregularidades en sus inversiones deben tomarse en serio y responder con una acción rápida y apropiada. Los beneficios no deben anteponerse a las personas”, agregó.
Oxfam señala que el mayor inversionista, el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), no ha emitido ningún anuncio oficial sobre el proyecto desde abril del año pasado, cuando dijeron que actuarían en conjunto con el FMO. Cuanto más se prolongue este silencio, más se cuestionará las verdaderas prioridades y valores del BCIE, convirtiendo este proyecto en una mancha en su historial.
Oxfam reclama a otras compañías aún conectadas con el proyecto, incluyendo a las firmas alemanas Voith y Siemens, que también se retiren del proyecto Agua Zarca.
“El anuncio de hoy no significa que ya se hizo justicia en el asesinato de Berta. La captura de ocho sospechos es un paso positivo, pero sus juicios han estado llenos de atrasos e irregularidades y los autores intelectuales no han sido identificados.
Hasta que esos individuos y todos los responsables de las amenazas, ataques y asesinatos de miembros de la comunidad no sean presentados ante la justicia, no hay condiciones para que se propicie el diálogo entre las comunidades locales y el FMO. Desde Oxfam, seguiremos este caso muy de cerca”, finalizó Redman.
Berta Cáceres fue asesinada el 3 de marzo de 2016. Días después, Oxfam pidió que el FMO y el FinnFund retiraran su apoyo al proyecto Agua Zarca, y poco después lanzó una campaña pública dirigida a presionar a las compañías para que actuaran.
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Un comentario
Que bueno que FMO se da cuenta que debe haber diálogo y así evitar problemas con los q se oponen al Desarollo