Por: Redacción CRITERIO.HN
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Tegucigalpa.- El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), en su accionar contra el olvido y la impunidad de las violaciones de derechos humanos de la década de los 80’s, realizó este jueves un plantón en la Plaza La Merced, a la que bautizaron Plaza de los Pañuelos Blancos, y emitió un comunicado para celebrar 38 años de lucha.
Después de nueve meses, este primer viernes de diciembre las familias víctimas de la desaparición forzada en Honduras, conmemoraron 38 años de lucha presencial en la Plaza de los Pañuelos Blancos en el centro histórico de Tegucigalpa.
señalaron que han puesto sus cuerpos en tierra con las previsiones necesarias para evitar los riesgos de contagio en medio de la pandemia de la Covid-19 y de esa otra pandemia terrible de la violencia de Estado.
«Los seres humanos que hemos sufrido desde 1982 la práctica de la odiosa doctrina de seguridad nacional impuesta por la CIA y el Pentágono estadounidense, a través de las fuerzas armadas, NO olvidamos ni perdonamos a quienes no han dicho nunca la verdad ni se han sometido a la justicia, señala la organización», reza el comunicado.
Aseguran que el estado hondureño no ha investigado, sancionado ni reparado moralmente a la humanidad ofendida a través de más de 200 hombres y mujeres detenidas, torturadas, desaparecidos y asesinados impunemente por ser opositores a la muerte.
En el marco del consumo y el endeudamiento navideño, el COFADEH saluda a quienes sobreviven en albergues improvisados víctimas de una élite perversa que no solo incumple responsabilidades internacionales contraídas después del Mitch en 1998, sino que entregó el territorio a inversionistas sucios que matan y encarcelan para explotar y matar la Madre Naturaleza.
«Si nuestros hijos vivieran opondrían resistencia a las represas que son parte de los problemas, lucharían contra la dictadura que compra consciencias porque los culpables son los mismos que cortan los bosques, los que concesionan las minas a cielo abierto y los que envenenan los ríos aguas arriba», dice en su parte final el comunicado.
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Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. Ver todas las entradas