Por: José Eduardo Martell
Recientemente el diario mexicano El Universal, periódico de primer ni el y prestigio, de los que ya no tenemos en Honduras, publicó un artículo titulado “´Explosivo cóctel´ socioeconómico obliga a los hondureños a migrar a EU”, a través del cual expone las razones del éxodo masivo, permanente y sistemático de compatriotas hacia el norte del continente y en el que, de manera clara y categórica, evidencia la incapacidad de quien hoy usurpa la Presidencia de la República en resolver, o al menos menguar, los problemas ingentes de la sociedad.
Cuando las mal llamadas caravanas de migrantes surgieron con fuerza en octubre pasado, el régimen de Juan Hernández culpó a la oposición de estar detrás de este fenómeno, asegurando que las motivaciones eran “estrictamente políticas”. El citado artículo de El Universal echa por tierra esta aseveración y muestra, con datos y estadísticas contundentes, que las razones principales son “desempleo, elevadas tarifas de servicios públicos, pobreza, encarecimiento cotidiano de la canasta básica, exiguos salarios, prolongada sequía, incendios forestales, desnutrición, inseguridad, violencia, crimen organizado, pandillas y desprotección al consumidor”. Y peor aún, concluye estableciendo, en palabras de Karla Rivas, Coordinadora de la Red con Migrantes Centroamérica de Honduras, que “hay ausencia del Estado en Honduras: formalmente existe un Estado democrático y un país que se precia de ser república, pero el sistema democrático no funciona o funciona solo para los privilegiados”.
La crisis política y la inestabilidad derivada del fraude electoral cometido por Juan Hernández el 26/11 no hicieron más que agudizar la crisis socioeconómica, pues las condiciones de inversión privada empeoraron y son sustancial y altamente desfavorables, siendo la altísima carga fiscal otro elemento desincentivador.
Si revisamos las escalofriantes estadísticas actuales presentadas en el artículo, el panorama el desalentador:
1. La pobreza afecta al 63% de los hondureños.
2. En los centros públicos de salud se cuenta con 6,872 camas, para un promedio hondureño de 0.78 camas por cada mil habitantes, siendo la media en América Latina de 3 por cada mil.
3. El sistema sanitario posee 14 médicos y enfermeras por cada 10 mil habitantes, siendo el promedio en el resto de Centroamérica de 20 galenos y personal de salud por cada 10 mil ciudadanos. Un 39 % de las salas de emergencia de los hospitales públicos carecen de personal suficiente para cubrir la demanda. De 217 salas inspeccionadas, 129 están sin suficiente personal.
4. Una mujer fue asesinada en Honduras cada 20 horas de 2014 a enero de 2018, con 37 víctimas mortales al mes.
5. Un total de 861 denuncias fueron presentadas ante el CONADEH en 2018 por personas obligadas a abandonar sus hogares por violencia delincuencial, en un incremento en comparación con las 817 de 2017. En el 42.6 % de las denuncias se concretó el desplazamiento y en el 57.4 % prevaleció una situación de alto riesgo.
6. Un creciente malestar mostró la población hondureña en 2017 y 2018 por el aumento en las tarifas de electricidad, los prolongados cortes de energía, los cobros indebidos, las fallas eléctricas y la desatención a los reclamos.
Nota relacionada Energía Honduras incapaz de solventar apagones
En relación con temas de violencia y seguridad, tema del que ha presumido el régimen, el fracaso es manifiesto:
1. Se contabilizaron 21,941 homicidios (hombres y mujeres) del primero de enero de 2014 al 30 de junio de 2018. Las pandillas, los cárteles del narcotráfico y las mafias de otras modalidades del crimen organizado han agravado la inseguridad en Honduras.
2. La Policía Nacional recibió 24,850 denuncias por delitos contra la propiedad y la integridad personal en el primer semestre de 2018 (138 diarias).
3. Medicina Forense reportó 11,248 evaluaciones de enero a junio de 2018 por lesiones personales y atenciones a mujeres agredidas, entre otros. La DPI sumó 7,427 delitos contra la integridad corporal de enero a junio de 2018.
4. La violencia, el crimen organizado y la impunidad permanecen, ocupan y administran espacios de control, poder ilícito y exclusión, según el CONADEH.
Dejando al margen la legalidad, legitimidad y el estatus democrático de Juan Hernández como Presidente, algo que obviamente no es sencillo, nos preguntamos: ¿Qué ha hecho como Presiente? Su incapacidad e ineficacia como gobernante es claramente innegable e incuestionable. No solo ha destruido la institucionalidad y los vestigios de democracia que quedaban, sino que ha mutilado el tejido social, ha asesinado la esperanza y ha devastado la autoestima del hondureño, a tal punto que Honduras es el país menos feliz de Centroamérica, de acuerdo a la ONU.
El Universal mostró al incapaz al desnudo. Lo aplazó en su gestión y lo redujo a un grado de inoperancia extrema. Pero la tarea para lograr su salida del poder es nuestra, de los que sufrimos su gestión. Dejemos la cobardía, el conformismo, la mediocridad y las ambiciones personales. Trabajemos organizada y disciplinadamente en expulsar del poder al dictador y su camarilla de secuaces, que han saqueado el erario público de manera grosera y aberrante. De lo contrario, puede que en el próximo éxodo migrante los pasajeros seamos nosotros mismos.
-
Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. Ver todas las entradas
4 respuestas
Appreciate the recommendation. Let me try it out.
PUEBLO UNAMONOS A SACAR A PUNTA DE VERGA A JOH D UNA X TODAS
La Denuncia y señalamientos a Todo Nivel de los Corruptos que están es tan en todos los partidos políticos. Es Nuestro único recurso para poder Combatir la Corrupción que ha por décadas prevalecido como normal en nuestras esferas Políticas. Por ende La Denuncia y sólo La Denuncia dará Lugar a la Ruptura de este Sistema Corrupto.manejado por los Políticos y grupos de Poder en perjuicio de Toda Nuestra Nación. Es Ahora Denuncia!!!!!!!!!!
Jajajajajajajajaja a llamar a la Dalia