Cuarenta años buscando la verdad

El Estado regulador

 
Por: Thelma Mejía
 
Tegucigalpa.- Frescas están aún las imágenes de operativos gubernamentales incautando granos básicos como parte de una “fuerza de tarea” en contra de la especulación y los acaparadores de productos que como el frijol y el arroz conforman la canasta básica familiar. Posteriormente se crearon equipos especiales anti evasión para caerles a los empresarios “mañosos” por el tema de los impuestos.
 
Con el paso del tiempo, las “fuerzas de tarea” fueron para todo: para regular el precio de los huevos, del culantro, del anís, de las carnes blancas y rojas; del pollo y cualquier otra cosa que surgiera por los alrededores y generara alguna inestabilidad. Los hondureños, sin percatarnos, estábamos entrando así hacia un Estado “regulador”.
 
En Seguridad, por ejemplo, las regulaciones se dieron acompañadas de las políticas de mano dura, de los escudos por aire, mar y tierra contra el narcotráfico, las fuerzas de tarea conjuntas con otros países para frenar el ingreso de las pandillas; las reformas penales, las protestas sociales y la figura de criminalización para todo que también genere inestabilidad. El Estado regulador creaba así sus propias normas de protección.
 
En la lucha contra la corrupción, la mayor regulación visible, hasta ahora, ha sido el llamado “pacto de impunidad” denunciado por la MACCIH. El Estado regulador protegió a sus beneficiarios y leales promotores: diputados, ex diputados, funcionarios y ex funcionarios.
 
Tienen tres años para desvanecer ante el Tribunal de Cuentas cualquier cargo que se les impute. Un tribunal, que según los registros, tarda seis años en concluir una investigación y otro tiempo más para judicializar, tanto, que cuando menos se acuerda se ha llegado al período de 10 años, necesarios para la caducidad.
 
Ante la denuncia de la MACCIH, el Estado regulador reaccionó de inmediato: media institucionalidad cerró filas a favor del legislativo por aquello del debido proceso, el honor a la imagen y a la intimidad, un derecho que atañe a todos los ciudadanos, pero que en el caso del Estado regulador, unos al parecer tienen más privilegios que otros.
 
Entramos así a los otros tentáculos de la regulación: la libertad de expresión. No bastando con tener una ley de secretos que blinda la opacidad y hunde la transparencia, así como un artículo 335-B que tiene a la prensa y a los ciudadanos con la guillotina en la espalda por aquello que si hace apología al delito, al odio o al terrorismo, puede ir “al pozo”, entramos ahora a la etapa de la “ciberseguridad” bajo la figura de la “censura privada” como graficó el relator de la OEA para la libertad de expresión, Edison Lanza, la ley que se debate sobre redes sociales e internet.
 
Los debates al respecto serán muchos, entre quienes creen que hay que poner un coto a los excesos en las redes, reviviendo la figura del desacato que penaliza al ciudadano que ofende a un funcionario o al presidente, o los que creen que Honduras necesita tanta paz que las redes sociales y el internet no se las están dando.
 
En materia de libertad de expresión, ninguna regulación es buena, lo que procede es la autorregulación y en casos específicos de abusos, las redes sociales tienen sus propios protocolos, pero también están en las fiscalías de los distintos Estados, departamentos especializados frente a determinados delitos o amenazas a la seguridad. Es decir, toda regla tiene su excepción, pero la norma no es generalizar. La libertad de expresión tiene límites y ya la doctrina establece cuáles y qué hacer al respecto.
 
En Honduras, se cuenta incluso una Ley de Espionaje, pero bajo este esquema de Estado Regulador, como que habrá que aprobar una de “ciberespionaje” disfrazada de “ciberseguridad”. Y vea y no haya algo por ahí que diga que si un presunto corrupto se siente ofendido y expuesto en las redes habrá que aplicarle una de “ciberterrorismo” por aquello del “odio”.
 
Curioso es que esta “ciber regulación” a la que nos vemos abocados se produzca en medio de una crisis político post electoral donde la institucionalidad está siendo altamente cuestionada y cuando un “pacto de impunidad” está a la espera de que se resuelva un amparo en la corte de justicia porque una juez emitió un fallo basándose en una publicación alterada, constitutiva de delito y por la cual se archivó el caso de una compleja de red de presuntos ilícitos en que están implicados varios legisladores, funcionarios, ex legisladores y ex funcionarios. Es el Estado regulador.
  • Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. Ver todas las entradas

2 respuestas

  1. La falta de educación cívica y de formación política en nuestro sistema educativo es evidente ,la cual no es por casualidad; la deficiencia en los asuntos del Estado siempre a sido en todos los niveles,no es de extrañarnos ,es la costumbre;uno de los canceres que hemos padecido tristemente los hondureños en toda la vida »republicana» es la corrupción,la cual se ha entronizado tanto en las mentes de lo ciudadanos y en nuestra »cultura» que tales practicas inmorales e ilícitas son » normales» ,trayendo consigo la impunidad, como fenómenos sociales indivisibles .Ambas conductas torcidas han caminado siempre juntas de la mano,desde los sectores mas »acrisolados» hasta los mas »humildes»,quizás el ser humano como individuo haya escogido este comportamiento no porque quisiera,sino por »inercia» producto de un sistema degradado e injusto que algunos estudiosos de las ciencias sociales le han llamado Capitalismo el cual tiene diferentes fases o categorías,que es precisamente lo que K.Marx y F. Engels analizo’ y critico’ científicamente . Sin embargo no solo en el Capitalismo ha existido corrupción e impunidad ,también lo ha habido en el Socialismo o en el Comunismo,o en cualquier otra forma de gobierno,el asunto es cuestión de Poder y dependiendo quienes lo ejerzan habra’ justicia o injusticias,este es un tema complejo y controvertido, con muchas aristas,es materia política ,y es aquí ,en que la mayor parte de la población carecemos de conocimiento. ¿ Pero a quie’n o a quienes les conviene que la gente permanezca ignorante? La respuesta es sencilla a los que tienen el Poder . A lo que quiero llegar es que es imperativo que los ciudadanos nos conscientizemos a manejar conceptos políticos para entender mejor que es la política ,para escoger mejor a nuestros representantes políticos ,por ejemplo que es el Estado,que significa Carta Magna o Constitución de la República,que es República,que significa Derechos Humanos,que significa autoridad competente,que significa transparencia,que significa honestidad,solidaridad, ética,moral,lealtad, responsabilidad,sinceridad,que es ser ciudadano y cuales son sus deberes y obligaciones,así como cuales son las responsabilidades del Estado atrevez del gobierno,que es Democracia etc, etc, desde luego estos conceptos deberían cultivarse desde la niñez ,desde las primeras etapas de la educación ,para ir formando ciudadanos cultos,inteligentes y conscientes ,pero claro esta’ que para los que han usufructuado el Poder,este tipo de educación son »conspiranoicas» para otros diabólicas o comunistas . ¿ Porque’ es importanti’simo manejar estos conceptos? Lógicamente para entender mucho mejor la realidad ,la nuestra,la de un país o de lo que nos rodea,para detectar con suma facilidad la mentira,la demagogia,el cinismo,la hipocresía,la corrupción ,la impunidad, y para que una vez hayamos entendido del porque’ de las cosas(Filosofía) y tomemos acción directa, participativa y de inmediato, para corregir los errores o los abusos de quienes ejercen el Poder; porque sabiendo cuales son las responsabilidades de un Estado para con los ciudadanos,estos con mayor entereza y patriotismo sabrán que hacer en un momento dado de agresión por parte de los que infringen la Ley y abusan del Poder,esta’ dentro de los deberes y las obligaciones del ciudadano. Cuando un gobierno dentro un Estado comete injusticias,lo que existe es una tiranía,las características de gobiernos tiranos han seguido los mismos patrones históricamente: asesinos,ladrones ,esclavistas,explotadores,inhumanos,indolentes,psicópatas,imponen leyes arbitrarias e injustas,imponen religiones o formas de pensar,limitación abusiva de la libertad de expresión etc. son Estados anarquicos,manipuladores,sin brújula,despiadados ,lo único que les interesan a los ejercen el Poder,es la acumulación de riquezas ,placeres y privilegios,se divierten con el sufrimiento de sus semejantes,no les importan sus vidas. Cuando ha un ciudadano se le exige pagar impuestos, también este tiene el derecho a exigir a saber en que se invierte los dineros que el paga,esperando que sus impuestos contribuyan para el bienestar general,porque de esta manera tanto el ciudadano como sus familias se beneficiara’n,pero en el caso de Honduras como en muchos otros países,nuestros impuestos solo han servido para engordar los bolsillos de los corruptos y para financiarles sus lujos,por estas conductas aberradas y muchas cosas mas ,es que debemos manejar los conceptos ,para no cometer los mismos errores una y otra vez,sabemos que a los saqueadores de los fondos públicos no les gusta que se le digan las verdades en la cara ,por eso se aferran al poder y lo secuestran controlando la institucionalidad,para no ser juzgados o ajusticiados.
    En Honduras todos conocemos a nuestros políticos de patio,y por mucho que traten controlar la indignación popular,la verdad no se puede ocultar ,el pueblo esta’ despertando poco a poco ,mas por las injusticias que por formación política,craso error que han cometido los »lideres» de oposición contra el sistema. Si los hondureños conscientes de todos los sectores permanecemos indiferentes ante la grave situación en que estamos ,el dictador psicópata del régimen nos exterminara’ y habremos perdido para siempre el país que nos vio’ nacer y en manos de delincuentes organizados en redes criminales Nacionales e Internacionales . Hoy la Patria nos necesita mas que nunca y si la amamos incondicionalmente ,debemos defenderla a capa y espada,porque es nuestra tierra y porque no queremos vivir en otro lado y para el bien de las presentes y futuras generaciones .

  2. Yo pienso que las cosas tienen que cambiar a estos diputados sus pueblos tienen que pedirles cuentas y sino son las que el pueblo quiere que los linchen sí al fin y al cabo hellos no les importa nuestras familias las familias de hellos no tiene porque in portarnos a nosotros hay que lincharlos para que los demás aprendan que son elegidos para que nos sirvan a nosotros no que nos regulen y no para que nosotros les sirvamos

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