Mi Casita
Fotografías y redacción de Horacio Lorca
Tegucigalpa- El derecho a la propiedad fue declarado un derecho humano inalienable en la Declaración Universal de Derechos Humanos, adoptado por la Asamblea General de la Naciones Unidas en 1948. Sin embargo, en la práctica, este derecho se limita a una minoría que goza de privilegios y de riquezas monetarias que otros no poseen.
En Honduras, el despojo o desalojo es algo que se da con frecuencia; el patrón parece ser el mismo: pobladores que habitan en tierras comunales son acusados por terratenientes de usurpar las tierras que ellos alegan ser los propietarios porque poseen títulos suplatorios.
En los últimos meses hemos visto conflictos en los que también los pobladores han mostrado títulos de dominio pleno y aún así existen órdenes de desalojo porque personas con cierto poder alegan ser los legítimos dueños porque también tienen documentos que los acreditan como tal.
Entones ¿Quiénes son los legítimos dueños de la tierra?
Mientras los jueces en los tribunales de justicia siguen emitiendo órdenes de desalojo a lo largo y ancho de Honduras, los pobladores instan a la presidenta Xiomara Castro a que ponga sus oficios para que se les respete el derecho humano a la propiedad.
