Tegucigalpa, Honduras. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) presentó el informe anual “Panorama de las Políticas de Desarrollo Productivo en América Latina y el Caribe 2025”, un documento que analiza los principales desafíos del crecimiento regional y propone estrategias para que los Estados superen las trampas que frenan su desarrollo.
En la edición número dos de dicho informe, la CEPAL expuso que la región se encuentra sumida en tres trampas de desarrollo: la baja capacidad para crecer, la alta desigualdad, baja movilidad y débil cohesión social; y bajas capacidades institucionales y de gobernanza poco segura.

El secretario ejecutivo de la CEPAL, Juan Manuel Salazar, recalcó que desde dicha comisión insisten en que los países de América Laritina y el Caribe deben escalar y mejorar las políticas de desarrollo a partir de una nueva visión de políticas que tengan relevancia en el actual contexto internacional.
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SOBRE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE
Marco Llinas, director de la División de Desarrollo Productivo y Empresarial de la CEPAL, explicó que la región latinoamericana y del Caribe se encuentra atrapada en una baja capacidad de crecimiento que se deriva de una productividad que se ha mantenido estancada y decayendo en la última década.
Llinas expuso que en 2017 se registró un punto de inflexión donde la productividad laboral promedio a nivel mundial sobrepasó la productividad laboral promedio en la región.
El economista señaló que si la región no aborda el reto de productividad, difícilmente podrá llegar a abordar otros retos de desarrollo.
Llinas remarcó que en América Latina entre 2023 y 2024 se registró un incremento 2.2% en su productividad laboral, sin embargo, recalcó que ese incremento no recompensa la trayectoria decente que se ha registrado en la última década.
Este señaló que para detonar la productividad se requiere de una transformación productiva saltando hacia nuevas actividades de mayor nivel de productividad, además, enfatizó que para ello se deben implementar esfuerzos verticales y horizontales que impacten de manera transversal la economía y de sectores que prioricen los países en el marco de dicha política.
Otro de los esfuerzos expuestos es ampliar la gama de sectores enfocados en una gobernanza central, realizando transformaciones digitales de emprendimiento, de talento humano, entre otros puntos.

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SOBRE LA SITUACIÓN DE HONDURAS
Con relación al contexto de Honduras, el secretario ejecutivo de la CEPAL, Juan Manuel Salazar, contestó a Criterio.hn que en Honduras la productividad laboral ha mostrado avances con un crecimiento promedio anual de 0,6% entre 1991 y 2019, impulsando principalmente por el componente intersectorial que es del 0,5%
Salazar explicó que pese a ello, persisten importantes desafíos como la reducida incorporación de conocimientos avanzados provenientes de la ciencia, la tecnología y la innovación, los bajos niveles de productividad, en particular en las micro y pequeñas empresas, así como los altos niveles de informalidad y acceso limitado al financiamiento, entre otras, que finalmente derivan la reducida asociatividad que restringe posibilidades de generar economías de escala y reducir costos de producción.
Para fortalecer la vinculación entre el sector privado, la academia y el Estado para transformar la productividad sostenible, Salazar recomendó que puede ser lograda mediante la creación y consolidación de plataformas de coordinación multisectorial, como consejos de innovación o clusters productivos que promuevan la articulación entre actores.






