La congresista republicana de Florida, Maria Elvira Salazar, en una franca injerencia sobre otro país, advirtió a Honduras sobre «expropiar» las ZEDE, afirmando que en enero de 2025 habrá un «nuevo sheriff» con la investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos
Massimo Mazzone, propietario de la ZEDE Morazán, defendió el derecho de Salazar a opinar, argumentando que protege intereses estadounidenses
Tegucigalpa. – Defender las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE) a base de amenazas e injerencia, parece ser la línea que seguirán quienes apoyan a los inversionistas extranjeros, luego que este régimen fue declarado inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Honduras.
La representante republicana estadounidense por el estado de Florida, María Elvira Salazar, reaccionó al fallo de inconstitucionalidad con un mensaje en la red X en el que afirmó: “Mucho cuidado con expropiar las ZEDEs en Honduras. ¡En enero habrá un nuevo Sheriff en el pueblo”.
El mensaje hace referencia a la investidura del presidente electo Donald Trump, quien tomará posesión como el 47° presidente de Estados Unidos, en enero de 2025. Este será el segundo mandato de Trump, tras fungir en el cargo entre 2017 a 2021.
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La publicación de Salazar reflejó la percepción que tiene la clase política de Estados Unidos con relación a su dominio sobre el sur global, levantando críticas entre hondureñas y hondureños que han denunciado por más de una década las bases de la inconstitucionalidad de las ZEDE.
INJERENCIA Y AMENAZAS CONTRA LA SOBERANÍA DE HONDURAS
Ligia Ramos, diputada al Congreso Nacional por el Partido Salvador de Honduras, reaccionó al comentario de Salazar señalándole que el mismo es “una falta de respeto hacia el pueblo hondureño”. Además, le recomendó que limite su accionar a legislar para su país y “no comente sobre la soberanía” de Honduras.
La publicación de la diputada Ramos le valió críticas por ciertos sectores que apoyan las ZEDE e incluso ser llamada mentirosa e ignorante por el italiano Massimo Mazzone, quien es el propietario de la ZEDE Morazán, ubicada en Chamelecón, inversionista de ZEDE Próspera y el proyecto Vitalia.
El italiano Mazzone afirmó que “la representante estadounidense tiene todo el derecho de expresarse sobre el tema de las Zedes, porque, 1) defiende los intereses de individuos y empresas de su país, y 2) mucho más importante, como cualquier individuo, tiene el derecho natural a la libre expresión”.
Jimena Garcia, fundadora de Honduras Resurge, expresó a Criterio.hn que“sí hay una injerencia, en cuanto al derecho que tiene el Estado de Honduras de salvaguardar la constitución y las leyes, porque la sentencia a final de cuentas se apega a nuestra constitución, a lo que el constituyente en 1982 estableció, y por ende no debería estar sujeta a cuestionamiento ni de nacionales ni de internacionales”.
Agregó que el posicionamiento de Salazar “está más apegado a los libertarios que a los republicanos”, que “no deja de ser una amenaza, una imprudencia” y un “intento injerencista”. A la vez que se divulga una “mentira” con respecto a que el gobierno hondureño esta atentando contra los bienes los inversionistas que se acogieron a las ahora inconstitucionales ZEDE, cuando publicamente se les ha dicho que se apeguen a otros regimenes que les permitan seguir operando en Honduras.
DETRÁS DE LA HISTÓRICA INJERENCIA DE EE. UU EN LA REGIÓN
Karen Spring, coordinadora de la Red de Solidaridad con Honduras, exteriorizó que la afirmación de Salazar representa más su posición extremista e intereses ideológicos, que un conocimiento del país y la región.
Sobre el comentario de Salazar de que en enero habrá un nuevo sheriff, Spring dijo que es motivo de preocupación para las organizaciones que conforman la Red de Solidaridad con Honduras. Esto no solamente para Honduras, sino para todos los países cuyos gobiernos decidan implementar políticas que ellos identifiquen como progresistas.
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Spring señaló que en el caso del fallo de inconstitucionalidad de las ZEDE, ni siquiera se trata de políticas progresistas, sino “una posición de soberanía, de proteger el país, de guardar los intereses del pueblo hondureño”.
Con respecto a la injerencia histórica de Estados Unidos en la región, la cocoordinadora de la Red de Solidaridad con Honduras compartió que los comentarios en X de Salazar forman parte de esta dinámica que ya se ha visto por parte de la Embajada de Estados Unidos y otros de sus representantes.
“Realmente ella está protegiendo y está básicamente tomando una posición en favor de los intereses económicos de Estados Unidos y en contra de la soberanía, la protección al ambiente, la protección de la comunidad Crawfish Rock en Roatán y otras comunidades que pueden ser afectadas por las ZEDE, y obviamente en la independencia y el derecho que tienen las cortes hondureñas, el congreso de Honduras y el gobierno de Honduras de proteger a la población y proteger sus fronteras y su soberanía”, concluyó Spring.
