Por: Redacción CRITERIO
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Luego de once viernes consecutivos se ha observado que las movilizaciones de las antorchas se han dividido en grupos, que salen de diferentes puntos de Tegucigalpa, por lo que sus asistentes, piden desde ya, un replanteamiento de esta lucha, que exige la instalación de la Comisión Internacional Contra la Impunidad Honduras (CCIH).
Mediante mensajes posteados y compartidos en las redes sociales, “los indignados” pidieron a sus líderes la noche de este viernes, un replanteamiento de la lucha porque consideran que once semanas consecutivas de movilizaciones está provocando la disgregación del movimiento.
En esta oportunidad se observó dos marchas por distintos puntos de la capital, pero la que obtuvo mayor respaldo fue la convocada por los jóvenes de la Oposición Indignada, que partió del bulevar Morazán hacia el edificio de las Naciones Unidas.
La otra movilización se originó desde la primera entrada de la colonia Kennedy hasta llegar a la casa del presidente Juan Hernández, en la colonia San Ignacio, donde un fuerte contingente militar y policial les impidió el paso. Esta convocatoria había sido trazada a Casa de Gobierno, pero estratégicamente cambió su rumbo.
Los “indignados” consideraron en las redes, que uno de los factores que pudiera estar provocando las marchas paralelas, puede ser el cansancio después de once semanas consecutivas o una posible estrategia gubernamental para debilitar el movimiento, con el apoyo de algunos medios de comunicación.
En consecuencia del desgaste, consideran que ya es hora de iniciar con medidas más contundentes para que el gobierno se sienta presionado y de una vez por todas acepte la instalación de la Comisión Internacional Contra la Impunidad Honduras (CICIH), su principal demanda para corregir los altos niveles de corrupción e impunidad.
Las propuestas para mantener viva la llama, son diversas y contemplan: tomas de carreteras, puentes y peajes, paros en colegios y universidades y luego un paro nacional.
A la par de estas ideas proponen que se establezca una estrategia con mucha discreción y poca publicación en los medios de comunicación y redes sociales.
Pese a los tropiezos y diferentes rutas, la presencia ciudadana sigue siendo masiva y las consignas las mismas, pues se sigue escuchando los gritos: “Queremos la CICIH, queremos CICIH”, “fuera JOH”, “y va a caer, y va a caer, la dictadura va a caer”, entre otros, que denotan el repudio al actual gobierno.
Al igual que en oportunidades anteriores, los participantes solicitaron la renuncia del mandatario Juan Hernández y el juicio político para el fiscal general y fiscal adjunto del Ministerio Público.
Las movilizaciones de las antorchas surgieron desde mayo pasado, luego que el presidente Hernández admitiera que el Partido Nacional, que lo llevó al poder, se benefició de fondos provenientes del fraude al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
Se estima que el desfalco es de aproximadamente 7,000 millones de lempiras, unos 350 millones de dólares. Además del saqueo, el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia (MADJ) documentó la muerte de 2888 personas a falta de atención médica y medicamentos.
