Por: Redacción CRITERIO
Tegucigalpa.-La tendencia militarista que se ha implementado como política de Estado en Honduras en los últimos años, fue el elemento más vistoso este 15 de septiembre durante la celebración del 194 aniversario de independencia patria.
Las actividades oficiales programadas por el gobierno de Juan Hernández, contaron con diversos actos donde las principales figuras fueron los elementos de las Fuerzas Armadas.
Como de costumbre, previo a las 12:00 meridiano, se observó los malabares de los pilotos de los aviones de guerra F-5 que surcaban los cielos de la capital Tegucigalpa, mientras la multitud los aplaudía en el estadio nacional “Tiburcio Carías Andino”, donde todos los años convergen los desfiles conmemorativos a la independencia.
A eso de las 12:20 se observó el despliegue de varios helicópteros de la Fuerza Aérea Hondureña, desde donde se originó el descenso del equipo de paracaidistas, que poco a poco fueron cayendo al césped del recinto deportivo.
Al igual que las acrobacias de los paracaidistas, se observó el desfiles de los escuadrones de la Policía Militar del Orden Público y a los miembros del batallón canino, quienes haciendo uso de sus trajes de gala se desplazaron por el estrado principal, donde recibieron las ovaciones y aplausos del presidente de la República y de su gabinete de gobierno.
Durante la jornada también se observó a elementos policiales hacer un simulacro de secuestro, lo que confundió a parte de los asistentes que reaccionaron asustados porque desconocían lo que en realidad sucedía.
La presencia de los uniformados fue tan vistosa que hasta los reservistas y veteranos de guerra desfilaron, mostrando así el poderío que los militares han recobrado en Honduras durante los últimos seis años, tras reformas legales que han facultado a las Fuerzas Armadas involucrarse en tareas de seguridad.
COLEGIALES
Durante los desfiles se observó, además de la presencia militar, la participación de al menos 70 colegios de segunda enseñanza que con sus pelotones de palillonas, pomponeras y bandas marciales, deleitaron a los presentes.
La afluencia de los hondureños al estadio nacional y en las calles del recorrido de los desfiles, fue masiva, ya que es una oportunidad para distraerse de lo cotidiano y participar en una actividad que se registra una vez al año.
Este año, la pareja presidencial lució atuendos alusivos al arte y cultura hondureña.
INDIGNADOS
Mientras los pelotones de estudiantes y militares llegaban poco a poco al recinto deportivo, un grupo de jóvenes miembros del movimiento social “Oposición Indignada” pretendió ingresar, pero inmediatamente se les impidió el acceso.
Los jóvenes que eran encabezados por Miguel Briceño uno de los líderes de las marchas de las antorchas, denunciaron ser atropellados por personal del gobierno y de la misma policía, ya que como hondureños tenían el derecho de ingresar al estadio sin que nadie se los impidiera.
Los jóvenes recibieron el acompañamiento de instituciones defensoras de derechos humanos, que se trasladaron a la zona para constatar la denuncia que en ese momento se trasmitía por algunos medios de comunicación y por las redes sociales.
