Foto Portada: Vacunación de adultos mayores en Tegucigalpa
Tegucigalpa. – Honduras continúa a expensas de la mendicidad internacional para obtener vacunas contra la COVID-19. Después de que siete alcaldes lograrán la adquisición de 34,000 dosis que donó el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ahora diferentes organizaciones civiles, empresas e iglesias piden al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, que done la cantidad máxima posible vacunas.
Lo anterior coincide además con el anuncio que hizo la semana anterior el gobierno estadounidense de donar 20 millones de vacunas a países pobres.
Varias organizaciones de la sociedad civil, iglesias, academia y empresa privada enviaron una carta de solicitud al gobierno de Estados Unidos para obtener la donación de vacunas contra el covid-19 para Honduras.
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) y al menos 194 organizaciones más enviaron una carta de solicitud a la administración del gobierno de Joe Biden, actual presidente de Estados Unidos, para que done a Honduras el mayor número de vacunas posibles contra el Covid-19.
La carta menciona priorizar a Honduras en futuras distribuciones de vacunas contra el Covid-19 para proteger miles de vidas y empezar a recuperarse económicamente, debido a la pandemia, el fenómeno migratorio, los huracanes y la consiguiente recesión económica han exacerbado los desafíos ya existentes en el bienestar económico y social del país.
En la solicitud mencionan que en Honduras se ha vacunado menos del 2% de la población y que eso constituye el porcentaje más bajo de a nivel Centroamericano y con una población cercana a los 10 millones de habitantes, solamente se han recibido 248,000 dosis.
Asimismo, manifiestan en la carta que en Honduras ha reportado más de 211.000 casos de COVID-19 y 6.000 muertes y la pandemia ha exacerbado los desafíos ya existentes para el bienestar económico y social en el país. También que 500,000 personas han perdido sus empleos.
En la iniciativa expresan que es momento de proporcionar vacunas a países como Honduras, ya que la falta de estas aumenta la posibilidad de las resistentes variantes amenacen a toda la comunidad internacional, así como a Estados Unidos.
Entre las organizaciones que firman la carta, se encuentran la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Asociación de Municipios de Honduras (AMHON), Instituto Universitario Democracia, Paz y Seguridad (IUDPAS-UNAH), Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP), Fundación Universidad Tecnológica Centroamericana de UNITEC, Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), Fundación Alfredo Landaverde, Centro Cristiano Internacional (CCI), Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH), Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Iglesia de Dios, Red Viva Honduras, Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras (CODEH), Proyecto Aldea Global, World Vision Honduras, entre otras.
Cabe mencionar que, en Honduras por la mala gestión del gobierno de Juan Hernández en la adquisición de las vacunas, en el país se ha vuelto de moda pedir vacunas contra la COVID por la falta de las mimas.
La mayoría de la población vacunada en el país lo ha logrado con vacunas donadas por diferentes casas farmacéuticas y muy pocas han sido las compradas hasta el momento.
El gobierno ha anunciado la compra de 4.4 millones de dosis con la farmacéutica Pfizer, sin embargo, la compañía ha aclarado que lo suscrito es la intención de compra y no el contrato de compra en sí.
A Honduras han llegado hasta la fecha 48,000 más 189,600 dosis de la vacuna contra el covid-19 de la farmacéutica AstraZeneca, bajo la modalidad de donación por el mecanismo COVAX y otras 5,000 dosis donadas por el gobierno de Israel a Honduras. También 34,000 dosis donadas por el por el presidente del Salvador, Nayib Bukele a siete alcaldes.
Y solo 46,000 dosis del contrato de 4.2 millones de dosis de la vacuna de la farmacéutica Sputnik V que Honduras compró al gobierno ruso. El viernes llegó el segundo envío de 40,000 dosis de la vacuna Sputnik V, del fabricante Gamaleya de la compra bilateral del gobierno central.
