Por: Redacción CRITERIO.HN
Tegucigalpa, Honduras.- “Las cosas se toman de dónde vienen”, parece ser la metáfora con la que el ex presidente del Banco Central de Honduras, (BCH), Hugo Noé Pino, responde expresiones de Ebal Díaz, Ministro de la Presidencia del régimen, filtradas en las redes sociales en las que, en presencia de su jefe, Juan Hernández Alvarado, se dirige “en un ambiente de mucha confianza” a diputados del Partido Nacional afirmando que “la gente no va a votar por los tres mil muertos en la pandemia, ni contra la corrupción, la gente va a votar por el tema económico, por el dinero que tenga en la bolsa..”.
“Sacaron de contexto mis declaraciones y presentarlo de manera distorsionada; mi postura es que la segunda pandemia más fuerte que están sufriendo hoy los hondureños, es el tema económico”, matizó Díaz.
“No fueron expresiones para el público, fue una reunión del Partido Nacional en una valoración de un tema político con políticos; la persona no va a votar, según mi entender, con resentimiento diciendo este gobierno… confío en la racionalidad, en el entendimiento de que esa es una situación que está afectando al mundo y que nosotros estamos haciendo todo lo necesario para evitar la letalidad y la mortalidad del Covid-19”.
La oposición en España, Italia, Inglaterra, Estados Unidos, en Honduras y en todas partes pasa lo mismo, trata de echarle la culpa al gobierno de los muertos; hay decisiones que no han salido en el tiempo y en lo esperado, pero se ha hecho lo necesario para que no tengamos tantos muertos, concluyó.
Expresiones ante las que Pino, en un foro televisivo, contestó con una serie de consideraciones de moral y ética política-económica en torno al sobreendeudamiento externo y la actitud maliciosa con la que el legislativo, dominado por el nacionalismo, coopera sin objeción alguna, a pesar del desastre económico, social y humano del país.
“Las políticas económicas de un gobierno para que sean creíbles deben tener consistencia, credibilidad y el valor ético de quién las ejecuta; parece que Honduras no tiene historia económica y que la pandemia lo hizo todo”, señaló al desglosar el decrecimiento económico escalonado y el deterioro de la calidad de vida de la población en general, desde 2010 a la fecha.
“Ofrecen políticas como las Zonas de Desarrollo y Empleo, (ZEDE), que hasta ahora aparecen como sacadas de un cuarto oscuro porque nadie sabía nada y ahora son seis; ofrecen 600 mil empleos, hablaron de rescatar a la Empresa Nacional de Energía Eléctrica, (ENEE), se expulsa a la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad, (MACCIH) y ahora, en el último año van a hacer el milagro”.
Si el tema económico, -al que alude Díaz-, determinará el voto, pues el Partido Nacional ya perdió las elecciones, pero ahora viene un sobre endeudamiento pues la forma tiene que ver con el contenido y la semana pasada el Poder Ejecutivo introdujo, de forma subrepticia al Congreso Nacional, un proyecto para la emisión de 850 millones de dólares en Bono Soberanos
La deuda concesional de Honduras ha bajado y esa es la vía correcta de endeudamiento, y tampoco se habla que el BCH puede establecer una línea de crédito para el gobierno.
Pero existe una “falla en el aspecto ético; ese video es repudiable pues un pastor y político no puede hablar en forma pública y privada de manera diferentes; usted dijo a los diputados que la corrupción no importa en momentos trágicos por la pandemia pues la única preocupación del gobierno es retener el poder”, cuestionó Pino.
Ahora, en el último año de gobierno plantean al pueblo nuevas esperanzas que en 11 años no han sabido cumplir; el Presupuesto General de la República del 2021 no refleja lo real porque ahora hay 2.7 millones de hondureños en la miseria y el gobierno no ha dado un plan de gastos de esos 850 millones de dólares.
Otros argumentos contradictorios del ministro de la Presidencia es que los Bonos Soberanos eran para fortalecer el Presupuesto General del 2021 y pagar deudas de la ENEE, y luego para enfrentar la pandemia. Sin embargo, en 2019 autorizó otros 600 millones para rescatar a la estatal eléctrica y mil 458 millones de dólares para la pandemia, concluyó el ex presidente del banco estatal.
