Por: Redacción CRITERIO
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Tegucigalpa.- La situación de la comunidad de Pajuiles en el municipio de Tela está entre la criminalización que se está haciendo de los pobladores por defender su territorio, el diálogo entre las partes y la defensa del agua que es la causa de los pobladores.
El pasado 23 de agosto de 2017 en el marco del conflicto suscitado en el Sector Pajuiles, Tela, Atlántida a raíz de los daños ambientales causados por la empresa hidroeléctrica HIDROCEP al cauce del río Mezapa, afluente que abastece de agua para consumo humano a más de 20 comunidades del referido sector, se llevó a cabo un proceso de diálogo entre los distintos actores involucrados en el conflicto y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (OACNUDH) quienes participaron como observadores, sin embargo, posterior a dicho proceso y frente a las audiencias en las causas penales seguidas en contra de 17 defensores y defensoras del ambiente, integrantes del Movimiento Amplio, hacemos del conocimiento de la comunidad nacional e internacional:
- Los acuerdos más relevantes de dicho proceso de diálogo se centraron en el compromiso de la empresa HIDROCEP de suspender los trabajos de construcción del proyecto hidroeléctrico «Los Planes», así como el reconocimiento de la situación de criminalización en la que se encuentran 17 integrantes del Movimiento Amplio y de los Campamentos Dignos por el Agua y por la Vida, acordando que a través de la Alcaldía de Tela se presentaría una solicitud de extinción de la acción penal ante el Ministerio Público.
- A pesar de este prometedor acuerdo firmado, resulta alarmante que desde el viernes 25 de agosto de 2017, la empresa HIDROCEP haya irrespetado el principal compromiso resultado del diálogo que fue la suspensión de operaciones del proyecto hidroeléctrico Los Planes, ya que desde ese día han transitado hacia el plantel vehículos de la empresa con instrumentos y trabajadores para seguir con las actividades de construcción del mismo. El 30 de agosto intentó trasladar por la fuerza materiales de construcción como ser tuberías, combustible, entre otros, con los cuales seguirían causando los daños ambientales y sus consecuentes afectaciones al derecho humano al agua de las comunidades del sector Pajuiles reavivando la situación de tensión y conflictividad a lo interno de las mismas, la cual interpretamos como búsqueda de confrontamiento. Todo ello bajo el argumento de iniciar el proceso de reparación. Sin embargo, es necesario recordarle a la empresa HIDROCEP y a los demás actores que dicha reparación NO PUEDE pretenderse sin la participación y vigilancia directa de las comunidades a fin de asegurar que esta no sea una excusa para continuar en labores de construcción que sigan contaminando y dañando el río Mezapa.
- Sin lugar a dudas, el diálogo y los acuerdos tomados por la empresa HIDROCEP, la Corporación Municipal de Tela, el Instituto de Conservación Forestal (ICF), la Sub Secretaría de Derechos Humanos, MIAMBIENTE y las comunidades, representaron una aceptación expresa del conflicto y de los daños ambientales provocados por la empresa, por lo tanto, si estos acuerdos han sido irrespetados por HIDROCEP, las instancias con competencia legal para intervenir tienen la obligación de hacerlo de forma inmediata y oportuna, de lo contrario, esa institucionalidad continuaría comportándose de manera permisiva e indiferente como la hecho hasta ahora. Es importante recalcar que más allá de los compromisos del diálogo, hay evidencias que demuestran la existencia de responsabilidad penal por parte de HIDROCEP respecto de los daños ambientales provocados al río Mezapa y por ende, responsabilidad de instituciones como el Ministerio Público quien los constató desde 2016, de la Corporación Municipal quien otorgó permiso de construcción y de MIAMBIENTE quienes desde la omisión de acciones perpetúan el estado de impunidad desde el cual actúa HIDROCEP, por lo tanto es urgente que con la misma prontitud que se personaron al diálogo asuman las acciones que les corresponden.
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Desde el Movimiento Amplio, reafirmamos que ante una institucionalidad que no muestra voluntad política para hacer que se cumplan los acuerdos y una empresa transgresora de éstos, la única solución ciudadana viable y factible es continuar con el ejercicio de soberanía territorial y defensa de los derechos mediante la protesta pacífica permanente constituida en los Campamentos Dignos y llamamos a las instancias involucradas en el diálogo, y con competencia para intervenir que cumplan sus funciones de manera oportuna y efectiva ya que, las afectaciones que originaron el conflicto, van más allá de la defensa únicamente del agua, sino también de las vidas humanas que están en riesgo debido al consumo de agua contaminada en el Sector Pajuiles.
Seguiremos defendiendo el agua y la vida, desde el convencimiento de que la dignidad es parte fundamental de la misma.
Tomado de la Página del MADJ
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Un comentario
Ya la raya con lo mismo